1521 AC; PLANETA TIERRA, TENOCHTITLAN.
ONMINISCIENTE.
Todo estaba hecho un desastre, los humanos se destruían entre llamas con espadas, lanzas y demás, los unos a los otros, TN escuchaba todo en el bosque con decepción dolor. Ella siguió caminando hasta llegar a estar junto a su madre y cierta velocista se les unió pronto.
-¿Y los otros? -pregunto Ajak cuando tuvo al trio enfrente.
"Tuvimos que separarnos "dijo Makkari con lenguaje de señas.
-Había mas desviantes de los que dijiste -la platinada reclamo viendo a Phastos.
-Apuesto a que se les hizo muy divertido.
El eterno había mirado a la princesa y la diosa, a sabiendas de que a ellas les encantaba pelear contra aquellas criaturas. Ambas mujeres sonrieron.
-Lo fue -contesto la pelinegra.
-Mi preciosa Luz -sonrió Druig mientras tomaba la mano de su esposa, ella miro directamente a sus ojos con una sonrisa.
-Mi eterno -
-¿Te encuentras bien? -
- Si, ¿Tu te encuentras bien? -
Antes de que Druig pudiese llegar a responderle, una explosión llegó a los oídos de los eternos abriéndole a mas desastre, el eterno de TN , como el se hacia llamar, llevo su mirada allá, mientras se acercaba dejando caer la mano de su esposa.
El caos no solo se escuchaba, sino que también lo veían. El castaño sin poder evitarlo, hizo brillar sus ojos de aquel tono.
-No lo hagas -advirtió la voz de Ajak, deteniendo lo que el haría. TN solo miraba desde donde se encontraba, había tomado la decisión de mantenerse al margen en ocasiones similares ya que siempre Druig terminaba enojado con ella-. Nunca interferimos en sus guerras.
El ruido de cada disparo afectaba a thena, la hacia tambalearse sobre si misma, parecía estar perdiendo el control sobre si misma pero nadie lo notaba, a excepción de su hija, que la tomo del antebrazo.
-Oye, mamá ¿estas bien?
-No es una guerra, es genocidio -respondía Druig.
Thena parecía querer contestarle a su hija, pero no podía, las palabras se atoraban en su garganta.
-Sus armas se han vuelto letales -seguía hablando el hombre mientras se giraba hacia Phastos-. Tal vez ayudarlos a avanzar no fue tan buena idea, ¿no lo crees, Phastos?
- La tecnología es parte de su proceso evolutivo, Druig-respondió el moreno, Makkari paso por un lado del hombre hasta ponerse frente a su amigo-. No es un elemento que pueda detener.
La discusión de aquellos dos era ajeno a TN y Thena, la primera intentaba averiguar que era lo que le estaba ocurriendo a la diosa, y, la diosa, estaba como en un estado de suspensión.
-No, tu no. ¡Pero yo si!
"Resiste" -señalo.
- Mamá, me estas asustando -
-Ya es muy tarde -respondió a nada, su voz estaba vacía.
-¿Mamá? -
-Todos van a morir al final -siguió hablando justo antes de que sus ojos tomaran un color blanco de lleno.
Las armas de la diosa aparecieron en sus manos tan rápido como se movió, pues cuando menos lo pensaron y antes de que la chica llegara siquiera a usar su magia; el arma de Thena había traspasado el cuerpo de TN.
Apenas Makkari se dio cuenta de lo que ocurría, corrió a su velocidad para tomar a la platinada por los hombros y llevársela hasta donde logro, el arma de thena salió del cuerpo de TN, ocasionando que esta caiga de rodillas sobre la tierra, coloco una mano sobre la herida y miro su mano, roja.
Estaba desangrándose.
Levanto la mirada y logro ver a Druig correr hacia ella, pareciendo gritar cosas, pero ella solo podía escuchar un pitido molestoso. Estaba segura de que no moriría pues era inmortal, pero el dolor lo sentiría, y si a un mortal aquella herida lo mataba, a ella la pondría en un sueño de veinticuatro horas.
La diosa platinada descansaba en una mesa de piedra, al igual que su hija, ambas estaban sumidas en los sueños de la inconsciencia, al tiempo que los eternos las miraban con seriedad. Druig tomaba la mano de su esposa con fuerza, su cabeza estaba hecha un lio, pensaba en sus opciones... analizaba todo. No quería dejar a TN
-Creí que el Mahn Wy'ry era un mito.
El silencio hacia lleno en el lugar, Phastos jadeo mientras la eterna suprema terminaba de curar su herida; -No existe una cura, así que nadie habla del tema.
-Voy a tener que informarle a Arishem y llevarte de nuevo a nave, donde tenemos la tecnología que necesitamos.
"Pero dejara de ser Thena" argumento
Makkari.-¿Y si vuelve a pasar? Casi las mata - kingo miro al resto de los eternos-. Pudo habernos
matado a todos.-Te lo pido - comenzó la diosa sollozando-, te pido que no me hagas olvidar mi vida. No quiero olvidar mi vida,no quiero olvidar a mi pequeña, no quiero olvidarla. Por favor
-Thena, yo te amo pero, escúchame; no es importante si no la puedes recordar-puso su mano en el pecho de la contraria-, tu espíritu no cambiara, en el fondo siempre serás Thena, confía en mi...
-¿Por que confiaría en ti? -intervino Druig, dando un paso bajo la mirada de los presentes -. Le ruegas que te deje borrar su esencia, sus recuerdos a su hija.
-Druig, ya se que estas molesto, pero...
-¡¿Molesto?! Estos siete mil años hemos confiado en ti y mira a donde nos has guiado -sus palabras eran como dagas filosamente peligrosas, le brindo una mirada a su TN - mi esposa esta inconsciente en una mesa de piedra, si fuese una de ellos, ¡estaría muerta! No puedo perderla, Ajak. No puedo hacerlo. Durante siglos, he visto a los humanos destruirse los unos a los otros cuando tenia el poder de detener su furia.
¿Entiendes el dolor que provoca después de siglos? ¿Y si la misión fue un terrible error? ¿Enserio creen que estamos ayudando a conseguir un mundo mejor? -El eterno guardo silencio durante un mini segundo, dejando sumirse a los otros en el mismo, analizo rápidamente todo lo que había planeado, antes de dar la vuelta y caminar a la salida para observar todo ese caos que se originaba al final de la pirámide;
-Somos iguales a esos soldados, peones de sus lideres, cegados por la lealtad - hizo una pequeña pausa-. Pero esto se acabo.
Y, fue entonces que sus ojos comenzaron a brillar en aquel distintivo color, fue solo cuestión de unos segundos para que los humanos detuvieran aquel genocidio que estaban causando.
-Libéralos-ordeno Ikaris tomándolo por el hombro para empujarlo contra la pared.
-Tendrás que obligarme.
-¡Ya basta! -Ajak abrió su camino hacia ellos, el hombre volador miro a la mujer mientras Druig no le quitaba la mirada de encima, escrutándolo con esta.
Ikaris, finalmente, obedeció a la líder suprema y se alejo de aquel hombre.
Sabia lo que hacia, sabia lo que dejaba y sabia que la perdería...
-Si quieres detenerme -comenzó hacia Ajak -, tendrás que matarme.
Pero aun así lo hizo.
Se dio la vuelta y comenzó a bajar por aquellas escaleras de la pirámide, su nariz picaba y sus ojos ardían, su vista se sentía borrosa y aunque a su esposa no le el estaba en lo correcto.
¿No?
-Ya es tarde, mi linda TN -murmuro por ultimo.

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Eternals {Driug y tu}
FanfictionLos Eternos, una raza de alienígenas creados por los Celestiales para defender a los humanos de sus contrapartes, los Desviantes. Después de estar separados por 500 años se vuelven a reunir para combatir de nuevo con los Desviantes, ya que su líder...