Cap.11

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Izan White Stone (Futuro Rey de los Dragones)



Llevé una mano a mi pecho sintiéndome extraño

No sabía que me sucedía y podía identificar perfectamente que estos sentimientos no me pertenecían pero por alguna razón los estaba sintiendo

Tenía una sensación de ahogo que no se iba en ningún momento, el nerviosismo y la incredulidad eran algunos de los sentimientos que lograba interpretar

Y volvía a reiterar que estos no me pertenecían, no son míos

La puerta del baño se abrió y sentí la presencia de Iker entrar en este

-Te ves de la cagada –escuché que dijo

Levanté el rostro para observarme en el espejo

Mi rostro estaba extremadamente rojo y en mi cuello estaban saliendo unas ronchas que me tenían de los nervios porque picaban como el demonio pero sé que no es recomendable rascarme, solo las empeorará

-Pareces sacado de la pesadilla de un niño –observé a través del espejo a Iker

Este me miraba con fijeza mientras comía una manzana con tranquilidad

-¿Vas a seguir burlándote o buscaras a mamá? –cuestioné frunciendo los labios

-Me voy a quedar burlándome claro está –le dio otra mordida a su manzana –aunque a perdiste la gracia –me miró de arriba abajo

Sí, ese era mi adorable gemelo

-Tú rostro me da nauseas –volvió a decir

-¿Por qué tan irritable? –me burlé --¿necesitas a tu princesita caprichosa? –cuestioné con burla

-No le digas así –frunció el ceño pasando de un semblante relajado a uno molesto

¡Bingo!

-¿Por qué? ¿No es así como la llamas tú? –cuestioné con diversión

-Exacto, así como YO la llamo –enfatizó la cada palabra

-Calma fiera –sonreí con diversión –ni que te fuera a robar tu apodo, aquí entre los dos el mísero ladrón eres tú, no yo –rodé los ojos

Me miró con fastidio

-Listo, muérete solo, te iba a hacer compañía hasta que respiraras por última vez, pero ya no –salió del baño

Y sabía que él no le diría a nadie, si es capaz de dejarme morir, como si no lo conociera

Suspiré con pesadez

Mamá

Lo repetí incontable veces hasta que la puerta del baño fue tocada con suavidad

-Cuernitos ¿sucede algo? –escuché la suave voz de mamá del otro lado

Miré mi rostro una última vez

-Pasa –musité en un susurro que por supuesto ella escuchó

Entró con la clara preocupación marcada en sus facciones

-Mamá –sentí mis ojos llenarse de lagrimas

¿Por qué estaba llorando?

No lo se

Solo...

De repente estaba llorando y no podía detenerme

Mamá se apresuró en tomarme entre sus brazos y como si fuera por arte de magia empecé a dejar de sentir esas emociones que sabía perfectamente que no me pertenecían

D.A.RDonde viven las historias. Descúbrelo ahora