D.A.R

Cap.27

Eda Blue (Hija del Beta actual)

Todos observamos con atención como la tía Sel le indica a Daniel que deje a Devin en el centro de la sala y una vez este hace lo indicado ella no pierde tiempo y le pide a Niniel e Iker que se acuesten cada uno a un costado de ella

-Entrelacen su mano con la de ella –pide con suavidad

Iker sostuvo fuerte la mano de Devin entrelazando sus dedos con los de ella

Niniel lo imitó pero su agarre no era tan fuerte como el de Iker, ella parecía mucho más relajada que él, es la primera vez que veo a Iker un poco nervioso

-Muy bien –suspiró la tía Sel –esto dolerá solo un poco –sonrió levemente

-No lo disfrutes tanto –se quejó Niniel

-No lo hago –amplió su sonrisa

-No disfrutaras torturar a tu hijo, pero sí a mí –bufó –sí que lo disfrutarás, te conozco lo suficiente como para saberlo

-Oh, claro que lo haré –alzó una mano en la dirección de Devin –como no tienes idea –musitó antes de empezar a murmurar palabras en un idioma del que no tengo ni puta idea

Que genial se ve haciendo lo que hace

Observé como de la cabeza de Devin salía un fino hilo negro, era sumamente fino, la tía Sel alzó su mano libre en dirección a Niniel y segundos después de su cabeza salía el mismo hilo solo que este es de color morado

Retrajo sus brazos con cuidado y acercó sus manos simulando que ataba algo y sorpresivamente el hilo negro y el morado se acercaron entre sí y se hizo un nudo uniendo ambos hilos

Ahora la tía Sel separó un poco sus manos y los hilos se estiraron un poco más fortaleciendo el nudo que antes estaba formado, ahora apuntó en dirección a Iker y segundos después al nudo se unió otro hilo color marrón

Los tres hilos formaban un perfecto y fuerte nudo

Fue cuando noté que Niniel e Iker ya tenían los ojos cerrados, sus respiraciones eran casi inexistentes, al igual que sus latidos, eran tan lentos y suaves que tenías que esforzarte para poder notarlos

Observé como tía Sel con cuidado bajaba las manos pero está vez los hilos no se movieron más, en cambio se quedó en su lugar

-¿Ahora qué sigue? –cuestionó la tía Adara de inmediato

-Esperar –contestó tía Sel –esto tardará mucho –llevó la mano a su abdomen y fue cuando recordé el hecho de su embarazo

-Tía –me acerqué a ella y tiré de su cuerpo para obligarla a tomar asiento en el mueble más cercano -¿te sientes bien? –cuestioné viendo su agotado rostro

-Lo estoy –me sonrió dándole cariñosas palmadas a la mano con la que sujetaba una de las de ella

-Iré a prepararte algo de comer –susurré –debes alimentarte bien y reposar un poco por lo menos –me puse de pie notando todos los ojos sobre mí, pero algo muy diferente me detuvo --¿hay algo que ahora no puedas comer? –me giré en su dirección frunciendo el ceño

Se quedó pensando unos segundos y luego sonrió

-Con los gemelos el picante me daba mucha acidez –terminó diciendo

Lo apunté mentalmente y terminé asintiendo

-Nada con picante entonces –murmuré y estaba por irme de inmediato cuando observé fijamente a los humanos entrecerrando los ojos --¿ustedes van a querer algo? –cuestioné