Reencuentro [ Druig ] [Eternals]

~001~

Al inicio de todo
En el domo...

Todo era oscuro hasta que abrimos los ojos, viendo uno estatua en el centro de la nave en la que estábamos, una esfera salió de dicha estatua dirigiéndose hacia la persona quien será nuestra líder de ahora en adelante.

XXX: es hora de empezar

Cómo si una fuerza nos guiara nos levantamos y nos dirigimos cada uno hacia una esquina del domo, sin más lazos dorados nos rodearon empezando a crear el traje de cada uno de nosotros.

Luego de que mi traje estuviera terminado me dirigí hacia donde estaba la estatua del celestial que nos había otorgado una misión, estaba tan concentrada que no noté una presencia a mi lado hasta que escuché que me hablaron.

XXX: es Arishem

____: disculpa?

XXX: Arishem es el nombre del celestial 

____: ya veo... Soy ____

XXX: Druig -dijo sonriéndome-

Cuando sonrió no pude evitar sonrojarme levemente para sonreírle de vuelta, poco a poco seguimos hablando e incluso nos presentamos con el resto para así conocernos entre todos, cuando por fin llegamos a la Tierra vimos a dos personas siendo atacadas por un desviante, uno fue devorado por dicho depredador mientras que el niño era salvado por Makkari gracias a que Ikaris atacaba al desviante. Gilgamesh y Thena peleaban contra otro desviante al igual Kingo y Makkari, mientras yo peleaba contra otro golpeándolo con un cetro/lanza que yo misma cree. 

Terminé con el desviante clavándole la lanza  en la cabeza vi que otro iba a atacar a Makkari por atrás así que hice lo mismo que con el otro desviante acabándolos por completo.

Makkari: gracias -me dijo con señas-

____: sin problemas -dije de igual forma

Cuando acabamos con los desviantes que habían en ese lugar, los demás bajaron del domo a través de los inventos de Phastos, cuando bajaron las personas que habían ahí se acercaron con sus armas en alto, pero gracias a Druig que controló sus mentes vieron que no éramos una amenaza.

Ajak, luego de haber curado a Ikaris nos miró a Sersi y a mí para que nos acercáramos al niño que anteriormente Makkari e Ikaris habían salvado, en el camino cree una daga en mi mano derecha para entregársela a Sersi quien la hizo de color azul y dorado, cuando llegamos con el niña, le extendimos la daga y este la aceptó.

En ese entonces nuestra misión era proteger a los humanos de los desviantes, éramos felices y nos conformábamos con eso sin saber lo que nos esperaba más adelante hasta que nos enteramos unos años más tarde...bueno, unos miles de años más tardes

Actualidad...

Me encontraba en el refugio de animales alimentando a unos cachorros recién nacidos aunque mi mente se encontraba en el terremoto que había sucedido hace 2 días.

Elisa: deberías descansar, hace días que no duermes

____: por qué lo dices? -dije fingiendo inocencia-

Elisa: será porque atrapas ladrones en la noche y por eso no duermes lo que te causan ojeras, aunque no se te noten mucho, sigo sin entender por qué de noche?

____: porque así no le haré daño a nadie -dije con seriedad y tristeza-

Elisa: entiendo, pero por un momento podrías ser egoísta y preocuparte por ti? -dije tomándome de los hombros preocupada-

____: sabes que no puedo Elisa pero te tomaré la palabra e iré a descansar -dije tratando de irme-

Elisa: irás a ayudar a toda la ciudad no es cierto? 

____: me conoces bien amiga -dije alzando la mano para despedirme y salí del refugio-

Elisa es una de mis grandes amigas, solo a ella le he contado sobre los eternos y lo que hemos hecho desde nuestra llegada a la tierra y entre otras cosas, el resto del día pasé ayudando a las personas con tareas pequeñas o en lo que necesitaran hasta que cayó la noche.

La razón por la que protegía a la ciudad con mis poderes en la noche es porque mis poderes han "evolucionado" o más bien ahora tengo más de un solo poder, al inicio solo podía crear objetos y armas, por ello me llevaba bien con Phastos, el punto es que ahora puedo controlar los elementos, crear esferas de energía e incluso tengo poderes relacionados con el hielo, algunos creerían que es algo bueno pero no lo es, estos nuevos poderes aparecen de la nada y no los puedo controlar. Hace poco cuando trataba de apagar las llamas de un incendio lo que hice fue agrandarlo poniendo en riesgo a una persona, por suerte logré salvarlo por poco, desde ese momento decidí no usar mis poderes de día que era cuando habían civiles por todos lados.

Justo ahora me encontraba sobre un edificio vigilando por si apareciera algún ladrón, en esta ciudad aparecían ladrones por doquier aunque ahora era más común que aparecieran en la estación policial sin explicación alguna, pero ya es obvio que soy yo quien los deja ahí luego de haberlos atrapado y devuelto lo que robaron. Esta noche no era la excepción, el trabajo nunca acaba y menos para un eterno.

575 a. C.
Babilonia...

Nos encontrábamos peleando contra desviantes mientras tratábamos de proteger a los humanos tras los muros de la ciudad e Babilonia, Ikaris atacaba desde el cielo mientras Makkari con su velocidad llevaba a varias personas tras los muros, Kingo y Thena atacaban a los que se acercaban, Gilgamesh y yo estábamos frente a los muros ayudando a la gente que traía Makkari

Gilgamesh: ¡Rápido! ¡Por esa puerta! -dijo con una sonrisa activando su poder y golpeando a Enkidu-

____: cúbreme -dije creando dos espadas-

Gilgamesh: lista?

____: lista -Gil me ayudó a saltar sobre Enkidu, logre herirlo y me bajé para seguirlo atacando-

Los demás se nos unieron, Kingo le lanzaba esferas de energía, Makkari lo golpeaba con su velocidad, Ikaris le lanzaba rayos desde arriba y Thena hacia lo mismo que yo con sus armas, por último Gilgamesh lo golpeó derribándolo aunque volvió a levantarse con pocas fuerzas, de nuevo recibió otro golpe por el más fuerte de nosotros acabando así con el último desviante que se encontraba atacando Babilonia.