okupa || carrera y spreen (os)

• domingo 18 •

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los kiero <3

・゜゜・ ❥ ・゜゜・

Rodrigo.

Estaba caminando por las calles de mi barrio. Creo que ya llevaba una hora así, sinceramente no lo sé, solo sé que en mi casa estaba aburrido.

Saqué mi celular del bolsillo para ver la hora.

Domingo 18, 5:38 am. La calle estaba más sola de lo normal y eso se me hacía raro.

Mientras más caminaba, más solitario se hacía todo. Las casas del barrio iban desapareciendo hasta el punto de no quedar nada. Literalmente nada.

Todo era descampado y mis pies seguían moviéndose.

Empecé a mirar para todos lados como buscando ayuda, aunque no me sentía asustado. A lo lejos vi una laguna o algo así era. Mi boca pareció secarse de la nada y las ganas de tomar agua me mataban.

Comienzo a correr lento y cada vez aumentaba la velocidad. Sentía que iba flotando, era como volar.

Llegué hacia el estanque ese casi en un parpadeo. Me agaché para poder tomar agua, y al tomar un trago del agua entre mis manos todo se volvió negro.

Sentía que mis dientes comenzaban a doler, mis ojos ardían y mis músculos estaban tensos. Y de repente abrí los ojos.

Estaba transpirando, el pelo se me pegaba en la frente. Me apoyé fuertemente del piso como si me fuera a caer si no lo hacía.

El lugar era estrecho y oscuro, al final se veía un círculo de luz blanca pero estaba muy lejos.

El aire en ese lugar era denso, como si la gravedad fuera mucha. Me sentía vigilado y eso me asustaba.

Giré mi cuerpo y mi mirada hacia atrás, donde yo creía que alguien me vigilaba. Pero como era de esperarse no había nadie.

Me giré de nuevo para tratar de caminar hacia la luz blanca, pero una figura me impedía el paso. Grité del susto, como si me hubieran mostrado la peor escena de terror.

Al frente mío había lo que parecía una mujer, o eso distinguí por la poca luz. Sus ojos rojos brillaban fuertemente y sus grandes alas azules impedían mi paso.

-Rodrigo, aquí es donde te esperábamos... ven, sígueme.- Ella comenzó a volar hacia la luz y yo no entendía absolutamente nada. -Veo que no comprendes, tranquilo, yo te explicaré.

No pude responder ya que de por sí las palabras no salían de mi boca. Ella comenzó a explicarme como era todo, y que yo había muerto en esa laguna.

Dijo que yo me había matado, ya que esa agua era sumamente tóxica, y que ahora había llegado hasta acá, el Plan C de la vida.

Me contó que ellos tenían 4 planes que seguir en la vida. Plan A, nacer. Plan B, morir. Plan C, debatir a dónde iría. Plan D, al cielo o al infierno.

Pero según esa mujer lo mío no era fácil ya que me había "suicidado". Me dijo que mi destino ahora era ir al infierno, pero que allí podría encontrar una "salida" a esto.

Yo solo seguí caminando, aunque sentí que nunca avanzamos.

De repente ella frenó y se volteó a verme. Posó su roja mirada sobre la mía y susurró un "chau Rodrigo", que bastó para que una fuerza sobrenatural me empujara hasta el fin del túnel.

Pero no donde estaba la luz, si no del lado contrario. Comencé a caer en un pozo oscuro, pero tenía luces rojas, no era todo negro.

Al fondo del mismo, había un hombre de sombrero y con un bigote demasiado largo. En su mano izquierda tenía un cuchillo y en la derecha tenía sogas.