11

3.6K 256 14
                                    


La habitación se llenó con los sollozos de Jimin y Jungkook lloraba en silencio, quería proteger a Jimin, tenerlo en sus brazos, pero no podía, ni siquiera podía dar un paso, su cuerpo se sentía pesado.

Jimin estaba embarazado, pero ahora su pequeño bebé ya no estaba con ellos, ¿cómo sentirse en este momento?, pequeños fugaces escenarios pasaron por su mente rápidamente...

Él y Jimin junto a un pequeño bebé en brazos riendo de lo lindo que este trataba de balbucear.

Jimin con el bebé en brazos alimentándolo mientras él abrazaba por la espalda a Jimin.

Jungkook manejando al pequeño bebé mientras este dormitaba.

Jimin y el bebé dormidos acurrucados en su pecho y envolviéndolos en sus brazos, todo ello y mas escenarios juntos fueron como dagas para Jungkook quien solo puso su mano en el pecho y presiono aquello que le dolía, el corazón.

No supo cuanto tiempo paso, tal ves mas de quince minutos o tal vez solo un par, pero el llanto de Jimin ya había cesado solo vio como este se abrazaba así mismo con sus brazos para darse calor, consuelo y pasaron otros largos segundos observándolo, ese era el dolor que Jimin había soportado estos días y solo en esta habitación blanca y fría.

La voz de Jimin retumbo en sus oídos y en la habitación, su voz se oía firme ante aquellas palabras.

– Divorciémonos – dice de repente – Es lo que deseas y yo no voy ha retenerte. – termina de decir.

– No, no es así – niega y quiere acercarse pero Jimin lo detiene levantando levemente su mano negando a aquella acción.

– Lo escuche todo, no necesitas negarlo – suspira – No quiero tu lastima.

– Jimin...

– Vamos solo vete ahora – sonrió falsamente y giro su rostro en la dirección contaría a la de él .

– No, no voy a irme así sin mas.

– Los papeles te los mandare con mi abogado solo necesitas firmarlos Jungkook – dijo firme en sus palabras ignorando lo anterior – Ahora vete, ah y no te preocupes por los bienes que eso ha sido justamente dividido en ambas partes.

– Jimin.

– Será mucho mas fácil para ambos porque no tenemos hijos de por medio.

– Maldición Jimin, crees que es momento de hablar de divorcio.

– Lo es – afirma – Ahora ya puedes ser feliz – dice esta vez viéndolo a sus ojos, ojos que no mostraban ninguna emoción – Ya no soy un impedimento para tu felicidad.

– T-tú.

– Adiós Jeon Jungkook, te pido amablemente que ahora te retires.

Que mas decir, nada, Jungkook ni siquiera podía creer todo lo que había escuchado, impedimento de su felicidad, maldición Jimin era, es y será siempre su felicidad, pero al parecer eso ya no le importaba al contrario quien tras esas palabras ya no volteo mas a verlo, aun así que mas podía decir, Jimin lo había escuchado, como justificar aquello que ya se ha enterado, como recuperar todo lo que ahora parecía perderse de sus manos, nada, eso quedaba nada.

Jungkook se quedo varios segundos ahí parado esperando que en algún momento Jimin dijera que todo estaría bien y que ambos superarían su perdida, pero al parecer todo fue en serio, Jimin frente a él no pronuncio nada y entonces fue cuando Jungkook salió de esa habitación azotando la puerta tras él y esta retumbo por el lugar las enfermeras le reclamaron, pero hizo oídos sordos y salió del hospital a zancadas ya afuera un grito lastimero escapo de sus labios.

– Maldición! – susurro para si mismo con sus manos en sus cabellos se encamino a un bar cerca de ahí, que mas podía hacer, nada, solo ahogar sus penas en alcohol y así lo hizo hasta el amanecer.

Mientras tanto Jimin cerca al anochecer fue dado de alta Hoseok lo ayudo y fueron juntos a su casa la cual compartía con Jungkook, no se sorprendió cuando la encontró vacía, sin mas se dirigió a su antigua habitación tomando un par de maletas y un bolso llenando todas sus pertenecías con ayuda de su amigo.

– Hoseokie – dice y el mencionado lo mira – En la otra habitación hay algunos lienzos podrías ponerlo en folios y llevarlos al auto, por favor.

– Si, esta bien yo me encargo de eso. – responde – Jiminnie... estas seguro de esto.

– Es lo mejor Hoseokie.

– Esta bien – acepta – Te falta mucho.

– No, tranquilo solo algunas cosas mas y termino, te encargo mis lienzos.

– Esta bien.

La habitación ahora se sentía mas fría, sus cosas ya estaban en las maletas, claro sus ropas, zapatos, algunos cosméticos y algunas joyas que tenia. La habitación estaba impregnado de bellos recuerdos después de todo había vivido aquí por mas de cinco años, lo hermoso y bello vivido ya, no es fácil de olvidar y eso toma tiempo, pero lo lograría y Jimin estaba dispuesto a eso, había meditado y pensado todo en esos días que estuvo en el hospital.

En un par de días estaría partiendo a Busan para comenzar una nueva vida, una vida lejos de la persona que ama.



– [Cajita de quejas  aquí] –

Bueno, la verdad es que no pense que llegariamos a más de 12 capítulos, pero creo que asi sera jejej

Espero que les este gustando la historia, y estoy muy agradecida por su apoyo y el amor que le están dando a este fanfic.

Besitos y cuidense, no olviden hacer sus deberes, bye.

TODO SE ACABODonde viven las historias. Descúbrelo ahora