➸ 𝑶𝒄𝒉𝒐

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Marceline Abadeer:
Los siguientes días me la pasé dando conciertos y en cada uno de ellos seguí recibiendo cartas rosadas, Bonnibel asistió a varios conciertos míos, la ví entré la multitud y eso hacía que mis deseos por ella aumentaran. Justo hoy había terminado de dar otro concierto, me sentía un poco decepcionada de qué no vi a Bonnibel en esté pero volví a encontrar otra carta que inmediatamente abrí y leí.

Te admiró desde lejos, sueño despierta y fantaseó qué eres mía. Qué tus labios rozan los míos e imaginó una vida entera a tú lado. Imagino qué tú manó encaja perfectamente con la mía.

-Anónima;).

Tenía qué admitir qué cada palabra me hacía sentir bonito qué alguien estuviera interesada en mí de esa manera. Dejé la carta junto a las demás.

Al día siguiente tenía el día libre y decidí buscar a Bonnibel en aquel bosque dónde la vi por primera vez y por suerte la encontré haciendo anotaciones en su libreta, en él momento qué me dió me saludó y decidí acercarme y conocerla más. ¿Porqué estabas analizando los árboles? -Pregunte con curiosidad mientras la observaba escribir. Tengo un sueño qué estoy dispuesta a cumplir por mí misma. Quiero construir mí propio reinó y también quiero hacer mis propios árboles -Explico aún sin despegar la vista de su libreta y asentí. Me quedé pensando qué ella es en verdad muy diferente, un poco mandona y muy inteligente pero también vi ese lado coqueto de ella. En ooo luego de tantas guerras al fin están construyendo y haciendo reinos, en los pocos qué hay he estado dando conciertos y es ahí dónde yo también apenas estoy cumpliendo él mío. ¿Y cuál es tú sueño? -Pregunto mirándome por un momento. Ser una cantante de rock mundialmente conocida pero apenas estoy empezando en ello -Me encogí de hombros y ella asintió con una sonrisa. ¿Necesitas ayuda? -Preguntó, ella volvió a verme. Claro, me vendría muy bien tú ayuda -Respondió y me alegré de qué aceptara.

En menos de dos meses terminaría mis conciertos pero en mis tiempos libre ayudaría a Bonnibel en lo qué pudiera, ella me enseñó el lugar dónde construiría todo, en él centro estaba un árbol y una pequeña casa a su alrededor había una fuente de alguna especie de agua color marrón, ella me explicó cómo fue "creada" por así decirlo y me presentó a su hermano Neddy, él era muy diferente a Bonnibel, al principio se asustó pero luego me agarró confianza. Ella ya había creado sus propios árboles alrededor y también algunos frutas hechas de dulce, y estaba creando a su gente, me pareció fascinante y cada vez qué estaba cercas de ella me hacía sentir nerviosa pero al mismo tiempo feliz.

Bonnibel es facinante.

𝗖𝗮𝗿𝘁𝗮𝘀 𝗮 𝗠𝗮𝗿𝗰𝗲𝗹𝗶𝗻𝗲 [𝗕𝘂𝗯𝗯𝗹𝗶𝗻𝗲]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora