Mi destino

💫-24

El tiempo si que a pasado bastante rápido , yuu había terminado la secundaria la preparatoria y ahora se encontraba por terminar la universidad

Se había casado con Mika cuando cumplió los veinte años pues Según el rubio el seguía siendo menor y obviamente que era menor ambos se llevaban cinco años de diferencia y aún así no les importaba nada por que ellos se amaban más que a nada en el mundo .

Ellos se seguían cuidando durante su celo o bueno eso pensaba Mika , pero hace más de un año que yuu había dejado de usar supresores y anticonceptivos con el , el por qué? Quería un hijo suyo no había más respuesta que esa y claro que lo habían hablado Mika había dicho que era mejor esperar a que el terminara la universidad ya que no quería entorpecer sus estudios pero claro a yuu no le importaba eso , ya no podía esperar para tener un bebé de su alfa

Un bebé que recibiría con los brazos abiertos y mucho amor para dar . Ese día se estaba preparando para ir a la universidad Mika se estaba arreglando un poco y el ya había preparo el desayuno pero de pronto sintió horribles ganas de vomitar corrió al baño donde desecho todo se sentía algo mareado y asqueado — aah..esto es horrible – suspiro para apoyarse de la puerta escucho la voz de mika salir de la habitación la casa tenía tres baños privados y uno adicional que quedaba en el pasillo este era para visitas Mika le busco en la cocina y pues al no verle allí pues le llamo yuu se levantó y lavo su cara salió del baño – ¿que pasa?– le pregunto sentándose en una silla

— ¿estás bien?

— si no te preocupes– le dijo

— ¿Seguro que estás bien? Te veo un poco cansado tal ves debas quedarte a descansar– le dijo preocupado

Yuu no quería llevarle la contraria pues realmente se sentía pésimo así que acepto y dijo que se hiba a recostar un momento , Mika asintió y le vio marcharse preguntándose lo que podría tener su azabache no quería verle mal . El rubio fue a despedirse de su tierno esposo pues ya era tarde yuu estaba revisando su teléfono y le miró — oye Mika – el rubio le miró – ¿a que hora volverás?–le pregunto

— jumm pues como a las cuatro – le dijo el rubio sentándose a su lado le dio un abrazo y beso su coronilla – ¿por que pasa algo?– pregunto

— no . Solo que me pregunte si podrías traerme un rico helado de chocolate y un pastel de tres leches junto a una malteada de caramelo

— ¿todo eso?– pregunto

— si ¿que tiene?

— es que es demasiado– le dijo

— hay vamos mi amorcito conscienteme si – yuu besaba Suavemente sus labios con mucho cariño Mika le tomo de las mejillas– no seas malo

— está bien– le dijo en un suspiro– eres demasiado mimado

— así me amas – exclamó el azabache tras besar su mejilla dulcemente

— claro que te amo . Te amo como no tienes idea – el rubio robo un beso de sus labios yuu inconforme le tomo de la corbata y le jalo donde se besaban de manera hambrienta– mm mi amor si sigues así no me detendré

— no lo hagas – suspiro el azabache–vamos hazme el amor

No vasto más , el rubio se olvidó del trabajo y estubo atendiendo a su Omega , habían probado varias posiciones y estuvieron casi toda la mañana hasta el medio día donde terminaron y Mika se alistó para ir al trabajo dejando a su azabache satisfecho y muy agotado . Yuu estubo durmiendo el resto del día hasta las cuatro donde se despertó , tomo un baño y se preparo algo para comer , luego estuvo viendo televisión hasta que el rubio llegó con todos sus pedidos le abrazo y le agradeció tomo aquella malteada y comía con el pastel dejando el helado para la noche , ahora que lo pensaba estaba comiendo más y tenía algunos antojos y malestares tal ves debía ir al médico — amor – yuu miró a Mika quien se estaba cambiando para acostarse en la cama