Narra Alejandro:
Me levante y fui directo a la puerta, me acerqué a este tipejo estafador, lo tomé del brazo haciéndole la invitación a tomar algo, él sin pensarlo y sin dudarlo acepto. Al llegar a la mesa se puso pálido nunca imagino ver a Vanesa y a Pablo, pero mucho menos a Risto.
Pablo jaló una silla y le dijo que se sentara junto a él invitándole una cerveza. En cambio mi malagueña tenía una mirada clavada en Risto y este con la cabeza agachada.
Pablo:
Bueno, ¿qué te pasa chaval?,... ¿te ha cambiado el semblante?,...¿qué te sucede?.
Vanesa:
Yo creo que el que tiene que responder es Risto.
Pablo:
Es verdad Vane, los dos son muy amigos.
Alejandro:
Que bien que ya estemos todos aquí, quiero que me respondas por estas fotografías que nos haz tomado, ojo no tienes escapatoria, esta es tu laptop y tu cámara.
Reportero:
¿Como le hicieron para obtener mis cosas?.
Vanesa:
Chaval, eso no importa.
Alejandro:
Entonces ¿sabes perfectamente lo qué hay ahí en esa laptop?.
Reportero:
Si, lo sé.
Pablo:
¿Y sabes porque estamos todos aquí?.
Reportero:
Ya me puedo imaginar el porqué.
Risto:
Me largo, yo no tengo nada que ver en esto.
Vanesa:
Te lo vuelvo a repetir Risto, ni se te ocurra moverte de tu lugar.
Alejandro:
Espero que tú Risto y tú reportero barato se den cuenta en el problema que se han metido.
Reportero:
Yo esto lo hago por trabajo. Debo de aceptar que si he estado detrás de ustedes invadiendo su privacidad.
Pablo:
Venga felicidades tú si que has tenido más huevos que Risto.
Vanesa:
Tu has dicho que lo haces por trabajo... que mal...
Pero mi duda aquí es saber algo,....contesta con la verdad por favor ... ¿quien te dio la orden de que nos siguieras?.
Reportero:
El Sr. Risto.
Alejandro:
Jaque mate Risto.
Pablo:
Ya el asunto quedó prácticamente resuelto.
Se confirmo todo.
Risto:
Tengo que aceptar que me han ganado, les pido una disculpa.
Alejandro:
Esto no se resuelve con una simple disculpa, daremos parte a las autoridades.
Vanesa:
Que decepción Risto.
Pablo:
Escucha muy bien esto Risto, yo en lo personal estoy cansado de que se quiera hablar más de mi vida personal que de la profesional. No vallas por el mundo haciendo daño porque el día de mañana vas a pagar por todo el mal que hayas hecho, ya sea con lo más valioso que tienes, (tus hijos, trabajo etc.).... cuídate mucho porque arrieros somos y en el camino andamos.
Risto:
Joder, Pablo que me dejas sin palabras, estoy muy arrepentido de haber hecho esta bajeza.
Alejandro:
Mejor guarda tus palabras Risto, que nadie te cree.
Vanesa:
Bueno yo me retiro, tengo más cosas por hacer.
Pablo:
Yo también.
Alejandro:
Pues prepárense que nuestros abogados se van a ir con todo, y no tendremos piedad de nadie.
Reportero:
Perdón por el daño que les causé.
Vanesa:
Ya es tarde chaval.
Narra Pablo:
Mi cuerpo temblaba de coraje, salimos los tres del restaurante dejando en el a Risto y al reportero, llegando al estacionamiento Alejandro les dio la orden a sus abogados de presentar formalmente una denuncia en contra de Risto.
