58 - El Desierto Gerudo

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Como todos conocemos, Hyrule es un reino compuesto por verdes llanuras cubiertas de árboles, ríos, lagos, y está rodeado por altas montañas nevadas y gélidos glaciares. La vida abunda en estas tierras, ya sean plantas, animales o diferentes tribus de seres pensantes. Sin embargo en el oeste de esta tierras, un inhóspito y gigantesco desierto se extendía hasta donde la vista alcanzaba a ver. 

Kilómetros y kilómetros de arena, soledad y muerte. Se trataba del hogar de una antigua raza de guerreras cuyo origen se desconoce: las bandidas Gerudo.

El desierto (cuyo nombre era el mismo que el de la tribu de las bandidas) era el próximo destino de nuestro héroe. La razón de esto era porque esos dominios en algún momento fueron el lugar de nacimiento del mismísimo Rey del Mal, Ganondorf.

Ahí estaba la importancia de su viaje. La ubicación del último de los templos era desconocida, y siendo las leyendas hablaban de un desierto, lo más probable es que fuera ahí. La pregunta era 'dónde'. 

Y siendo que mencioné al Rey del Mal, pues las cosas parecían alborotadas en estos momentos dentro del Castillo de Ganon. Alrededor de una larga mesa cubierta con elegantes manteles y un enorme banquete, estaban sentados todos los seguidores de más alto rango del malvado.

En la cabecera por supuesto estaba el rey sentado un un pequeño trono, y a su lado estaban las dos figuras encapuchadas que por su voz parecían ser unas ancianas. En el resto del lugar habían Stalfos (monstruos similares a un esqueleto humano que estaban bien entrenados y armados para el combate), Nudillos de Hierro (armaduras que cobraron vida gracas a la magia del mal, y que portaban un enorme hacha de doble cara), un Moblin más grande de lo normal que portaba una porra, y algunos Hylianos desertores que por miedo se unieron a la causa de Ganondorf.

 En el resto del lugar habían Stalfos (monstruos similares a un esqueleto humano que estaban bien entrenados y armados para el combate), Nudillos de Hierro (armaduras que cobraron vida gracas a la magia del mal, y que portaban un enorme hacha de d...

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Ganondorf yacía en silencio, jugando con un cáliz que tenía en su mano

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Ganondorf yacía en silencio, jugando con un cáliz que tenía en su mano. Ahí, escuchaba lo que sus subordinados discutían, sin darle mucha importancia a la búsqueda de soluciones sin sentido de los problemas que estaban teniendo. ¿Y cuáles eran dichos problemas? Pues tan solo uno:

El Héroe del Tiempo.

Todos discutían aterrados de lo que el Héroe del Tiempo había logrado en tan solo unas semanas desde que despertó de su estado de ivernación. Los Sabios de Antaño estaban despertando, y pronto llegó la noticia de que Bongo Bongo había sido destruido.

De inmediato las fuerzas del mal hicieron una reunión de emergencia para ver como solucionar el asunto de una vez por todas. 

Pero como antes mencioné, Ganondorf no se veía preocupado, sino que al contrario; para él todo lo que sucedía era un juego y se estaba divirtiendo. Sin embargo, eso no significaba que él se estuviese confiando o que pensara que Link no sería capaz de vencerlo. Él jamás subestimaría al joven de nuevo. No después de haber regresado después de siete años a arruinarle todos sus planes.

Finalmente, Ganondorf se levantó, silenciando a todos los que ahí discutían.

"Creo que es momento de tomarse más enserio al chico... Hasta ahora ha logrado vencer a todos los obstáculos que le he enviado"

"Propongo enviar a los ejércitos, mi señor"

"No será necesario... Las fuerzas del mal están conquistando todas las tierras de este reino y de las lejanías... Es tan solo un chico con quien queremos acabar... Y para encargarse de este problema creo que tengo a las personas indicadas"

Respondió él con mucha seguridad, mirando a ambos lados, donde las ancianas encapuchadas escuchaban en silencio.

"¡Ji, ji, ji, ji...! Será un honor para nosotras terminar dicho problema, mi señor"

"¡Ju, ju, ju, ju...! Nos encargaremos personalmente de traerle la cabeza del Héroe del Tiempo, amo mío"

"Cuento con ustedes, hermanas Twinrova..."

Finalizó el Rey del Mal abandonando su lugar en la mesa para dirigirse a la salida del gran comedor de su castillo. Con una malévola sonrisa, ambas ancianas rieron y con eso, su misión para acabar con Link comenzaba. Sin embargo las cosas ahora serían mucho peores, porque las hermanas Twinrova eran las consejeras de Ganondorf y sus subordinadas más poderosas.

Sin duda alguna, este sería el desafío más grande que tendría el Héroe del Tiempo antes de enfrentarse al Rey del Mal.

<<[O]>>

Las verdes praderas en Hyrule se iban tornando marrones y secas mientras Link avanzaba más y más al oeste. 

El paso entre las montañas se hacía más cercano, y se apreciaba mucha menos vegetación. El calor era mucho mayor y el terreno se volvía rocoso y árido. Pronto abandonaría el reino de Hyrule para entrar en los dominios de las Gerudo.

El viaje había durado ya un día desde que salió de Kakariko. Había pasando la noche en un rancho pequeño que no estaba muy lejos de donde se encontraba en esos momentos. No tardaría mucho más en llegar a las arenas del desierto.

Para llegar al mar de dunas era necesario cruzar primero por el paso de las montañas. Sin embargo, no seria tarea fácil. 

El río que nacía desde los glaciares de los Dominios Zora, atravesaba la cordillera, creando un acantilado que solo se podía atravesar por un antiguo puente colgante. Podía parecer simple, pero esa zona estaba fuertemente vigilada por las bandidas. Al otro lado del cañón se encontraba la Fortaleza Gerudo cubriendo la entrada al desierto. Se trataba de una serie de hogares hechos de piedra construidos en la base de dos montañas, las cuales estaban protegidas en ambos extremos del paso por dos gigantescos muros del mismo material.

Finalmente, luego de haber atravesado todos aquellos peligros, lo último que debían hacer era atravesar las arenas del Páramo Embrujado. En la extensión del mar de dunas, muchos viajeros se perdían por siempre en las tramposas arenas malditas de ese desierto. Era por eso que era tan importante obtener la información para llegar a la sagrada construcción de las Gerudo.

Sin duda alguna, este sería el desafío más grande antes de llegar a su destino: el ancestral Templo Espíritu.

THE LEGEND OF ZELDA: OCARINA OF TIME - LA NOVELADonde viven las historias. Descúbrelo ahora