prólogo

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— yeonjjunie. — el menor le llama con ese tono meloso que tanto sabe le molesta (o sólo de vez en cuando, yeonjun realmente no puede enojarse con beomgyu por ser lindo), inclinándose sobre él haciendo que el contrario se mueva un poco. ellos apenas han salido del instituto y él sigue teniendo la misma energía que tenía por la mañana, cosa que yeonjun envidia del menor.

— ¿qué quieres, beomgyu? — le contesta luego de un poco de insistencia de parte del castaño, el frunce los labios, inconforme con el desinterés que muestra.

— estoy muy cansado... comamos algo. — propone emocionado, jalonenado un poco uno de los brazos del contrario quien, a cambio de él, no parece muy feliz por la idea. al menos es lo que beomgyu asume al ver su expresión.

— uhm... la verdad no tengo hambre. — murmura, su negación inmediata provocando que la emoción del menor se disipara por completo.

— ¿cómo no vas a tener hambre? no hemos comido nada desde el almuerzo. — no dice nada al respecto, porque ambos saben que tiene razón, pero yeonjun sólo está cansado y mucho le gustaría dirigirse a su casa de lleno. beomgyu reconoce su silencio y, en un último intento desesperado por que acepte, vuelve a sacudirlo para llamar su atención. — ¡hyung! ¡comamos algo!

pone los ojos en blanco, finalmente deteniendo su caminar.

— ¿dejarás de molestar si acepto? — asiente un par de veces, sonriendo, visiblemente satisfecho porque sabe que dirá que sí; y el pelinegro sólo puede suspirar, aceptando su derrota. — bien... comamos.

el clima se siente sorprendentemente frío a pesar de que aún no anochece, la niebla sobre los edificios es densa y lo más probable es que sea un aviso de una pronta llovizna. pero eso es algo por lo que beomgyu no se preocupa en realidad- al menos no ahora que tiene la oportunidad de poder pasar el tiempo que quiera con su hyung favorito. para él eso es lo principal ahora.

— deberías llamar a tu hermano... para decirle que llegarás más tarde. — le advierte jugando un poco con la poca comida que había ordenado, fue sincero cuando dijo que no estaba muy hambriento; no como beomgyu, que engulle de su plato como si no hubiera tomado un bocado en meses.

— lo llamaré en un momento, aún es temprano... dudo que esté en casa. — aunque, irónicamente y como si las palabras de yeonjun lo hubieran invocado, el teléfono del menor comienza a sonar frenéticamente desde su bolsa. deja sus cubiertos a un lado y su ceño se frunce un poco al ver la pantalla del aparato. — hm... es beomhyun.

— contéstale. — obedece sus palabras y atiende la llamada de inmediato, yeonjun sólo se abstiene a mirarle hablar en silencio.

— ¿bueno~? — se queda callado por un momento antes de que una sonrisa amplia se dibuje en su rostro al oír la voz del otro lado de la línea, una voz que realmente no esperaba escuchar. — hola, señora kang. ¿cómo está? ¿qué...?

pero parece ser interrumpido por la mayor cuando su sonrisa simplemente se desvanece, dejando en su lugar una expresión fría, algo parecido al susto y es entonces que yeonjun comienza a tomarle más atención a la llamada que está teniendo el menor.

» ¿cómo? — es imposible para él no darse cuenta de cómo su voz tiembla, de como pasa saliva y su mirada parece congelarse.

— ¿qué pasa? — pero él no le responde nada, ni siquiera parece escucharlo.

— ¿en dónde está? — el mayor también comienza a preocuparse un poco al notar que los ojos de beomgyu comienzan a cristalizarse. se pregunta mil veces qué está pasando en esa llamada. — está bien... ya voy para allá. gracias por avisarme, señora kang.

— beomgyu, ¿qué sucedió? — sigue al menor con la mirada cuando este se pone en pie de golpe y comienza a guardar desordenadamente sus cosas en su mochila, sin importarle que su plato de comida aún siga medio lleno. yeonjun tiene que salir corriendo detrás suyo, pagando seguramente de más al dejar un puñado de billetes en la mesa. aunque ese es su último problema en este momento. tiene que detener al castaño cuando está cruzando la puerta del restaurante porque parece estar tan enfrascado en sí mismo que ni siquiera recuerda esperarlo. y repite:— beomgyu, ¿qué pasó?

— beomhyun... tuvo un accidente volviendo a casa. — solloza, incluso hablar parece ser difícil para él cuando las lágrimas le empapan el rostro. yeonjun pasa saliva; siente que su corazón se comprime en su pecho y los nervios le hacen temblar las manos. — la mamá de taehyun me dijo que era urgente.

— ¿dónde... dónde te dijo que estaba? — incluso para él es dificultoso hablar, no sabe exactamente qué le ha dicho la señora kang a beomgyu ni qué tan grave sea el estado de su hermano; lo único de lo que yeonjun está seguro es que él también se está desmoronando al ver a beomgyu así. el menor no deja de caminar lo más rápido que puede, yeonjun supone que para llegar cuanto antes.

— en la clínica del centro... una que está cerca del... centro comercial, no estoy seguro. — contesta agitado, apenas pudiendo regular su respiración entre el cansancio y el llanto. yeonjun, una vez más, debe ser quien detenga su caminar antes de que continúe alejándose. — ¿qué haces?

— beomgyu, esa clínica está demasiado lejos; no vamos a llegar nunca si nos vamos caminando desde aquí. — escuchar como sus palabras le hacen sollozar, verlo enjugándose las lágrimas con las mangas de su suéter le rompe el corazón. le gustaría poder hacer algo por él. — hay... una línea de autobús que llega hasta allá, podemos tomarlo aquí.

todo lo que hace es asentir, al parecer un poco más calmado por la solución del pelinegro. no dice nada desde que el nudo en su garganta no le permite articular palabra.

» oye, tranquilo. todo estará bien. — acuna su rostro entre sus manos, intentando que la sonrisa en su rostro se vea genuina aunque ver a beomgyu llorando así le haga sentir igual de dolido.

— ¿y qué pasa si no? — es lo que yeonjun no esperaba oír de él. ¿qué pasa si no? no sabe qué contestar ante ello y, al igual que el menor, siente un nudo pesado cortando su respiración. niega, inseguro aunque beomgyu no lo sabe.

— estará bien. tu hermano es un chico fuerte. — yeonjun se siente más tranquilo al ver como una ligera sonrisa se dibuja en el rostro del menor, aunque quiere prefiere no decir nada más.

él no sabe lo vacías que se sienten sus palabras.






- beomgyu 16 / yeonjun 17- angst

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- beomgyu 16 / yeonjun 17
- angst.
- no smut.
- menciones de intento de suicidio, discapacidad física (y emocional), automedicación, violencia, etc. TEMAS DELICADOS EN GENERAL


muerto en vida ☆ yeongyuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora