Huida

63 8 2
                                    

Se escuchan sonidos de explosiones y motores en el cielo. Abro los ojos y veo a Nicolás sentado no muy lejos de mi. Estamos en un cerro donde se puede ver la ciudad. Nicolás se voltea hacia mi y al darse cuenta que ya me he despertado, se para, camina hacia mi y me da una buena bofetada en mi cachete izquierdo haciendo que mi cabeza empieze a dar vueltas y empezar a sentir como mi cachete se va agrandando.
-¡Te dije que no salieras de la cafetería! ¿qué no entiendes esas simples palabras?, ahora el día uno está activado.

No sé que hacer.

Nicolás se sienta de nuevo y pone sus manos en su cara en signo de preocupación y desesperación.
Aparto la vista de Nicolás y vuelvo a mirar la ciudad. Cada cinco segundos caen dos proyectiles del cielo que hacen volar todo donde explota, y se escuchan gritos de personas pidiendo ayuda en todas partes. Es desastroso.
Decido mejor quedarme callado y en silencio para que Nicolás diga algo o haga algo.
Pasan los minutos y nada, Nicolás sigue en la misma posición de antes y no menciona nada, ni un suspiro.
-¿Nicolás estas bien?.
No hay respuesta.
-¿Ahora que va a pasar?.

Silencio.

-¡Respondeme!.
Empiezo a caminar hacia él, cuando se escuchan los motores en el cielo más cerca de lo normal. Nicolás se pone de pie, me toca el hombro y desaparecemos.

Aparecemos en otro cerro que se encuentra justo en frente del otro en donde estuvimos hace unos segundos.

-Nos encontraron.
-¿Quienes?.
-No lo sé, tal vez quieren matarte y a mi también, y será mejor que empecemos a alejarnos de está ciudad lo más antes posible.

Los motores empiezan a escucharse más cerca. Y empezamos a caminar hacia el norte.

-Gon.
-¿Sí?.
-Perdóname, al darte la bofetada, no estaba pensando en lo que hacia, sólo fue la reacción del momento y tú sabes que fue tú error al salir de la cafetería aún cuando te dije no lo hagas.
-Está bien.
-¿No estas enojado verdad?.
-No.
-Bueno, entonces puedes preguntar cualquier cosa sí quieres, así puedes saber lo que vamos a hacer en adelante y lo que pasó hayá en la ciudad.

No lo pienso dos veces y pregunto.
-¿Qué son esos motores en el cielo?, ¿por qué empezaron a bombardear la cuidad?, ¿me están buscando?, o mejor dicho ¿nos están buscando?.
-No sé que son esas cosas en el cielo, pero sí se porque bombardean la cuidad, porque te están buscando a ti.
-¿Por qué?, ¿y como tú sabes todo eso?.
-No lo puedo decir aún, porque todavía hay piezas que no encajan.

Me quedo callado y seguimos caminando en silencio, volteo para ver la ciudad y se ve que hay humo negro elevandose hacia el cielo.

-En un par de horas esa cuidad ya no existirá e irán a otra para buscarte, y así irán en ciudad en ciudad hasta encontrarte.
-¿Estas diciendo que sí no logran encontrarme tal vez podrían destruir toda la tierra?.
-Exacto.
-¿Y tú no puedes hacer nada?.
-No hasta que se presenten más acontecimientos.
-Que quieres decir.
-Digo que tal vez pueda salvar tú vida, pero la del planeta...no.

Me quedo callado, procesando todo lo acontecido desde los sueños hasta el bombardeo a la cuidad y la posible extinción de todo ser vivo en este planeta, lo cual suena absurdo. Y pensar que todo eso es gracias a mi, a un insignificante adolescente que su vida no tiene sentido ni valor.
Me empieza a picar el cuello, además de que hace calor y no entiendo nada, ni las autoridades se pronunciaron o el ejército hace algo. Realmente creo que es un sueño bastante real y a la vez no.
Me sigue picando el cuello y esta vez me lo rasco.
A lo lejos hay un riachuelo y voy corriendo para tomar agua, me quito la casaca y quedo en polo corto. Nicolás hace lo mismo y empezamos a tomar agua. Me lavo la cabeza y el cuello que me sigue picando; y me siento en una roca lisa al lado del riachuelo. Nicolás termina de tomar agua cuando me mira detenidamente. No me mira a los ojos sino al cuello. Nicolás empieza a avanzar hacia mi y yo temiendo recibir otra bofetada suya se acerca y se queda asombrado con lo ve. Me empieza a manosear el cuello que me pica y yo sigo sin entender lo que Nicolás vio.
-¿Que tengo en el cuello?, ¿tengo una picadura?, porque me está picando.
-No Gon, no es una picadura.
-¿Entonces que es?.
-Es...es un tatuaje.

KadurDonde viven las historias. Descúbrelo ahora