Labios

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Final pt.2

Jennie sostuvo la mochila de Lisa mientras ésta terminaba de peinarse.

—Cuando Soyeon te pateó casi me desmayo —expulsó la preocupación que había guardado en su cuerpo durante esa última hora—. Pero el maestro apenas hizo algo.

Lisa se burló de la mueca de su novia. Sí que había visto como Jennie abrió sus ojos cuando cayó al suelo durante la clase, y fue aún mejor su expresión cuando el maestro solo parpadeó.

—No se supone que debe hacer algo, pero si me lastimo siempre puedo parar.

—Si te lastimas no voy a querer verlo. —Le devolvió sus pertenencias a Lisa y se dio la vuelta para salir de ahí. Seguida por la tailandesa.

Ya habían pasado dos semanas, tres días desde que su relación se volvió oficial y sólida. Todo pasó de forma natural, tal como ambas lo esperaban, durante una de sus citas.

El circo se instaló en la Plaza y no tardaron en hacer planes para ir, pues solo se quedaría dos semanas y los exámenes se aproximan. Guiadas por la ida de pasar una linda noche, terminaron dando vueltas por la plaza y después pasaron por el parque, cerca de la casa de Jennie. Tuvieron una conversación larga, llena hasta el cuello de sentimientos.

Lisa ya ha expresado esa emoción por el amor hacia Jennie, y también la morena. Pero lo que comenzó como una charla más sobre su amorío, terminó en Jennie preguntándole a su querida amada cuándo comenzarían su relación oficial.

Lisa se sorprendió mucho, creía que ella sería la primera en preguntar cuando su paciencia acabara. Pero no, la morena es más impaciente de lo que supuso.

Jennie ya había tenido suficiente con el tiempo. Y no dudó en expresarlo antes de pedirle a Lisa que avanzaran a algo formal.

La tailandesa lloró, no pudo evitarlo cuando Jennie dijo que de verdad deseaba pasar el mayor tiempo posible con ella, todo lo que pueda, todo lo posible por seguir ahí. Y ese golpe de emociones fue aún peor cuando se lo contó a Rosé y esta terminó llorando con ella.

Lo consiguió. Increíble pero cierto.

Al día siguiente cuando se encontraron fue la primera vez que Kai se enteró de todo aquello. Toda la escuela lo habló de boca en boca como la noticia del día y sus oídos fueron los primeros en asomarse entre la multitud. El error que cometieron fue saludarse en la entrada de la secundaria con un beso, amoroso, que tomó desprevenidos a los estudiantes, que no dudaron y corrieron hacia el co-capitán con el único motivo de crear una discusión entre la expareja.

"Yo tenía razón, ¿no?" dijo Kai "Te fue tan fácil reemplazarme" volvió a murmurar cuando Jennie pasó cerca de él por los pasillos, en un tono de voz tan bajo que apenas lograron escucharlo. Estaba muy poco contento, lleno de celos, y nadie podría negar el mal humor que llevó todo el día. Lisa lo vio y escuchó perfectamente.

BamBam las felicitó, y por privado, se acercó a su hermana para mencionarle que todo el equipo estaba desaprobando su elección de correr tras la exnovia de su segundo capitán. Pero Lisa le reprendió asegurándole que ella ni siquiera forma parte de ese equipo.

El coreano estaba despechado. Y Jennie se vio afectada el primer día, mientras le dirigía pequeñas miradas llenas culpabilidad.

—¿A tu casa? —Lisa preguntó. Jennie le había dicho que su clase de lengua se canceló, ya no tendrían que ir— ¿o quieres hacer algo?

La coreana la miró, pensativa. Por supuesto que prefiere perder el tiempo fuera de casa, su padre ha pasado más tiempo ahí y su madre quiere que convivan. Pero eso pasa a otro plano en ese momento.