28 de mayo del 2021
Ya se podía sentir el calor abrazador de el verano.
Tal vez a algunas personas no les gusten el verano pero yo lo adoró por varias razones, dos de ellas son que mis papás y yo vivimos a diez minutos de la playa y la otra razón es que el diez de julio es mi cumpleaños.
Pero no soy a la única que le gusta el verano ya que a mis dos amigas también les gusta y esa es la razón por la que somos muy unidas pero a veces hacen muchas cosas tontas.
Como ahora que estamos enfrente de la casa de una supuesta señora que adivina el futuro.
¿De quién fue la idea?
De mi amiga Fernanda. A ella la quiero mucho e incluso puedo decir que le tengo envidia por su piel morena que heredó de su mamá, su piel oscura queda perfecto con sus ojos azules y su pelo negro liso
Yo igual tengo mi pelo negro pero la diferencia es que el mío en ondulado.
Fernanda es mi amiga desde que tengo recuerdos pero esto es una locura total.
—¿Y si nos secuestran? —pregunto asustada cuándo Fernanda toca la puerta blanca de una casa que parece normal
De dos pisos, dos ventanas abajo y dos arriba que no se veía nada ya que estaba tapada por las cortinas, el techo era plano y para terminar, toda la casa era color café claro.
—Elisa, es una conocida de mi mamá —dice Fernanda con una sonrisa dulce
—Además... Sera divertido saber nuestro futuro —dice mi otra amiga que se llama Ariadna.
Ella tiene su piel tiene un bronceado natural, sus ojos son negros igual que los míos pero su pelo es castaño claro que en el sol se ve muy claro.
—¿Cuánto pagaron?
—Poco —dice Ariadna.
Suspiró y en ese momento se abre la puerta, ambas nos enderezamos y damos un paso atrás al ver a la señora de unos cuarenta años con el pelo rojo y un vestido largo de gala color negro.
¿Cómo no puede tener calor?.
Fernanda llevaba un vestido con girasoles abajo y lo demás blanco mientras que Ariadna llevaba un short negro con un top blanco que tenía una luna y yo igual llevaba un short negro con una camisa holgada blanca con un arcoíris que abajo decía Happy.
—Supongo que son Fernanda, Ariadna y Elisa
—Si, venimos a lo de nuestro futuro —dice Fernanda.
La señora entra y nos hace una seña para que la sigamos, las tres la seguimos hasta donde se supone que es la sala. Sus paredes eran blancas y en medio de la sala solo había un tapete dónde estaba una bola que parecía de las que se utilizan para los bolos.
La señora se sentó en la almohada circular roja que estaba en el suelo y nos señaló tres almohadas negras cuadradas que estaban enfrente de ella. Ariadna fue la primera que se sentó y fue en la almohada de la izquierda mientras que Fernanda se sentó en medio y yo a la derecha.
—Solo les veré la mano y me podrán preguntar solo una cosa sobre su futuro
—¡Yo primero! —exclama Fernanda.
A Fernanda le leen la mano diciéndole que tendrá mucho éxito pero poca suerte en el amor, mucha salud y tendrá la vida suficiente para ver a sus bisnietos.
La pregunta de Fernanda fue: ¿Cómo iba a ser su verano?, A lo cuál la señora que aún no sabemos su nombre le dijo que su verano iba a ser divertido junto a nosotras.
Tal vez en eso tenga razón ya que tenemos muchos planes para este verano.
La siguiente que quiso intentar fue Ariadna, la señora le empezó a decir que su vida igual iba a ser exitosa, con muchos pretendientes pero que iba a tener una enfermedad pero que no se preocupará ya que iba a sobrevivir para ver a sus nietos.
La pregunta de Ariadna fue: ¿Cuáles son las respuestas de el examen?, La señora fue por una hoja y empezó a anotar las supuestas respuestas, le entrego la hoja y Ariadna se emocionó al verlas.
La señora me miró a mí y hizo una mueca.
—Tú no crees en esto, ¿Cierto?
—No —respondo honestamente
—Pásame tu mano.
Le di mi mano derecha y ella empezó a acariciar la M que estaba en mi palma.
—Tendrás éxito, mucha salud pero poca suerte en el amor y tu vida será larga hasta que tu lo decidas. —suelta mi mano —¿Qué quieres saber?.
La miré poco confiada y en ese momento se me ocurrió algo divertido.
—¿Cuándo conoceré a mi alma gemela?.
Ella se sorprendió pero cerro los ojos para respirar hondo. Miré a mis amigas que estaban con la boca abierta, les sonreí y volví a girar a la señora.
Ella abrió los ojos y me sonrió.
—El día de tu cumpleaños número diecinueve—dice y yo borró mi sonrisa.
Escuché que mis dos amigas gritaron pero yo solo veía a la señora.
—¿Quién es? —pregunte
—Solo es una pregunta, si te dijo puedo afectar el futuro pero si quieres saber quién es... espera hasta tu cumpleaños.
Me levanté y me fui rápido de esa casa, Fernanda y Ariadna me siguieron pero las dos no dijimos nada hasta que estuvimos cerca de la casa de Fernanda.
—Elisa, se que crees que es mentira pero si las respuestas son correctas entonces en tu cumpleaños conocerás a tu alma gemela —dice Ariadna señalando la hoja
—Esta bien, si las respuestas son correctas, acepto mi supuesto destino.
[...]
Ya estábamos haciendo en examen dónde Ariadna estaba copiando las respuestas de el examen, yo estudié porque claro que no creía en eso.
Fernanda también había estudiado pero tenia una copia de la hoja de las supuestas respuestas. Nuestra maestra solo nos miraba desde su escritorio pero llego un momento en el se paro y empezó a caminar entre las mesas, Ariadna escondió la hoja cuando la maestra paso a lado de ella y la saco cuando volteo a otro estudiante pero para mala suerte de Ariadna alcanzó a ver la hoja.
—¿Qué es esto Ariadna? —dice la maestra agarrando la hoja.
—Amm... ¿Cómo llego eso aquí? —dice fingiendo sorpresa.
La maestra la mira cansada para después ir a su escritorio y sacar una hoja dónde estaban las respuestas.
—Esto esta mal, ni siquiera en una coincide.
Todos se empiezan a reír y Ariadna solo mira a la maestra confundida.
—Te la voy a dejar pasar solo porque son incorrectas pero si la próxima vez haces lo mismo te repruebo Ariadna... vuelvan a sus exámenes.
Ariadna me voltea a ver y yo le sonrió casi riéndome.
Parece que es mentira eso de que adivinaron nuestro futuro.
[...]
Bienvenidos a esta nueva historia escrita por mi y antes de que sigas leyendo quiero decir que los capítulos son narrados por ambos protagonistas, en este caso, Elisa empieza la historia y el segundo capitulo lo narra el protagonista masculino y así es sucesivamente.
Con cariño, Yare <3.
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En las tardes de un verano
RomantikTrabajar en la heladería de su papá es consecuencia de sus actos, tenía planes para este verano los cuales no podran realizarse ya que trabajará en una heladería cerca de la playa en cambio; él siempre ha trabajado en esa pequeña heladería y nunca h...