En las tardes de un verano

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14 de agosto del 2021

Una taza con café amargo sin azúcar y un sándwich con jamón y queso es lo que estaba en la mesa, tal vez no era el mejor desayuno, pero era suficiente para mi. 

Al igual que era suficiente que mi mamá estuviera acompañándome para desayunar, casi nunca lo hacia y me parecía raro y sospechoso que lo estuviera haciendo. Ella también tenia una taza con café y un sándwich con jamón y queso, pero la única diferencia es que ella desayunaba feliz y yo estaba de seguro con una ojeras horribles y con una cara insoportable ya que me desvele y no por algo productivo, si no solo por ver mi celular. 

Casi siempre me desvelo mirando alguna serie o alguna película, o a veces simplemente me quedo mirando el techo, sumergido en mis pensamientos, pienso demasiado las cosas y por esa razón es por la cual el tiempo se me pasa demasiado rápido y cuando veo ya esta amaneciendo. 

—¿Cómo se llama? 

La voz de mi mamá de inmediato me saco de mis pensamientos e hizo que levantará mi mirada para encontrarme fijamente con sus ojos. 

—¿Qué? —pregunté confundido

—¿Cómo se llama?

—¿Quien? —volví a preguntar aun más confundido 

—Con la que trabajas, la que dices que es hija de tu jefe. 

Mi mamá y yo teníamos confianza y le había contado que mi jefe había puesto a su hija para trabajar conmigo, ella me escucho, pero poco después se rio delicadamente, la había mirado confundido sin embargo no me dijo nada. 

Desde entonces no habíamos tocado el tema sobre mi trabajo... hasta que me pregunto eso. 

—Elisa —respondo 

Sonrió delicadamente y tomo un poco de café. 

Fruncí el ceño —¿Por que? 

—Esta lindo su nombre, ¿Ella también esta linda?

—Mamá 

—¿Tendrás alguna foto de ella? 

—¿Por que tendría una foto de ella? 

—Tal vez porque te gusta  

La miro fijamente y ella solo me sonríe para después tomar un poco de café.

—Hijo, se que esta pasando algo en su vida y ese algo puede ser Elisa 

—No me gusta Elisa —dejo de mirarla y agarro el sándwich para darle el primer bocado

—Eso es lo que le dices a tus amigos, ahora dile la verdad a tu mamá

La vuelvo a mirar fastidiado por esta conversación y suspiro antes de hablar.

—Mamá, te estoy diciendo la verdad, no me gusta Elisa 

—Arán se cuando mientes, te gusta la chica y quisiera conocerla

—No me gusta Elisa, es... insoportable 

—Bueno si no te gusta, ¿Te esta empezando a gustar? 

Frunzo el ceño, pero no respondo nada. Ni yo sabia que me estaba pasando

Suelta una risa —Pero que pregunta tan estúpida, es claro que si te esta empezando a gustar. Cuéntame más sobre ella

—¿Qué quieres saber? —pregunto 

—Pues lo que sepas de ella 

—No se nada de ella