6 de Junio del 2021
Los rayos de luz entran por mi ventana y van directo a mi cama.
Mala idea poner mi cama enfrente de la ventana cuando estamos a pocos días de verano.
Me levanto aún con sueño y salgo de el cuarto para dirigirme a el baño. Al salir, el sueño se me quitó por el baño frío que me acaba de dar, mi pelo aún no estaba seco del todo y eso causaba que las gotas cayeran a el piso o que mojaran mi camisa.
Al entrar de nuevo a el cuarto, voy directo a el ropero de madera oscura que ya solo tiene la puerta de la derecha. Saco un pantalón de mezclilla azul oscuro y una playera de manga corta con el logo de una banda a la cuál no e escuchado pero misteriosamente tengo su playera.
Meto ropa extra, una pequeña toalla y unas chanclas en una mochila negra con líneas blancas, salgo de mi cuarto y bajo a la cocina donde agarro una tostada y le pongo mermelada.
—Voy a ir con Zack a la playa —le avise a mi mamá y salí de la cocina antes de que me regañara.
Encontré a mi papá que estaba apunto de salir y solo lo salude, agarre mi skate que estaba en la entrada y salí de la casa.
Antes subirme a mi skate, me pongo unos audífonos de cable negros a mi celular para luego poner la Playlist que una vez hice cuando estaba en el hospital porque casi me atropellan, en mi defensa el auto no vio los lados y el semáforo estaba en rojo. Yo estaba respetando as leyes y los semáforos.
Me pongo solo un audífono y ahora si me subo a el skate para ir a la playa.
Zack era mi amigo, era rubio y su piel estaba bronceada ya que hacia ejercicio en la playa, sus ojos eran color miel y tenia a todas las chicas detrás de él.
Paso algunas tiendas rápido y en una banqueta hago que gire mi skate y luego lo manejo con tranquilar ya que estaba a unos minutos de la playa.
Cuando vi el auto deportivo rojo de Zack, me detuve y lo salude con la mano, él estaba hablando con una chica morena en bikini.
—Luego te marco nena —le dice él cuando me ve, ella se muerde su labio y se va moviendo las caderas. —¡Por fin llegas!
—En primer lugar... No quería venir
—Vamos hombre, necesitas divertirte antes de que entres a tu aburrido trabajo de verano.
Desde que entre a la universidad, los veranos siempre trabajo en una heladería, con ese dinero extra tengo para todo lo que necesito para mi carrera de fotografía, incluso hace un año me pude comprar la cámara que tanto quería.
—A mi me gusta mi trabajo —me defendí.
Y es la verdad, mi jefe es amable conmigo, me deja poner la música que quiero y decorar la heladería como quiero solo en verano cuando trabajo.
—Lo único que me gusta de tu trabajo es el helado de limón que tiene ahí.
Cada que trabajaba, Zack me iba a visitar incluso mi jefe lo regaño y por esa razón cuando me espera a que salga, compra un helado. En dos semanas entraba a trabajar y creo que lo único que no me gusta es que tengo que utilizar una camisa naranja con el nombre de la heladería en la espalda y de el lado de el corazón.
—Oye, ¿Y que paso con la fotografía? —me pregunta sacando una mochila de su auto
—Aun sigo teniendo la cuenta pero hace semanas que no subo una foto.
Tenia una cuenta en Instagram en la cual publicaba unas fotos que tomaba, una vez publique la foto de una pareja en la playa—la cual era Zack y una de tantas exnovias que tiene—, me sorprendí al ver que casi llega a un millón de me gusta.
ESTÁS LEYENDO
En las tardes de un verano
RomansaTrabajar en la heladería de su papá es consecuencia de sus actos, tenía planes para este verano los cuales no podran realizarse ya que trabajará en una heladería cerca de la playa en cambio; él siempre ha trabajado en esa pequeña heladería y nunca h...