Capítulo 5

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Habilidades
Habitación Roja
(Maryina Horka-Bielorrusia)
2005


Narrador omnisciente:
Los meses pasaron y el perfeccionamiento de las habilidades de la niña fue mejor de lo premeditado. Le deba una gran pelea al soldado, si bien ganarle era todavía un gran reto también era para el soldado un reto vencerla, poco a poco dejaba atrás a la niña inexperta que había llegado meses atrás, en tanto a las artes su fuerza y gracia era excepcional había perfección en sus pasos que deleitaban a la mujer que la entrenaba, esta estaba orgullosa de lo que había logrado con la niña pues era lo que su anterior protegida no pudo ser.

 Le deba una gran pelea al soldado, si bien ganarle era todavía un gran reto también era para el soldado un reto vencerla, poco a poco dejaba atrás a la niña inexperta que había llegado meses atrás, en tanto a las artes su fuerza y gracia era exce...

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En tanto a sus habilidades el doctor Kozlov se encargó de ellas, tardaron un par de meses en volver a surgir, el doctor entraba en una gran desesperación cada que fallaba su enojo era palpable y gracias eso la pelinegra era castigada. El fallar para sus instructores era algo que para el punto en el que se encontraba era imperdonable, tener "tropiezos" para la niña ya no era una opción y se lo hicieron saber con claridad; al fallar en cualquier prueba era llevada al cuarto más profundo de la habitación, ahí la esperaba el mismo soldado que le entrenaba como siempre en la esquina de la habitación esperando órdenes, en medio de esta se encontraban dos cadenas que se sostenían del techo y dos cadenas sostenidas del piso cada una con un grillete la pelinegra era despojada de su ropa cada vez y amarrada a los grilletes, una vez así daban orden al soldado y la niña era torturada, latigazo tras latigazo era impactado en su pálida piel por horas, horas en que la niña lloraba por ayuda, que pararan de hacerle daño. Todo esto en vano pues en ese oscuro y sangriento lugar nadie podía escucharla.

Al terminar su castigo Madame Kotzakova entraba y le repetía cada vez que esto solo era por su propio bien, esto haría que recordara que fallar jamás era una opción. Y claro que la niña dejaría de fallar pues las cicatrices en su cuerpo no la dejarían hacerlo nunca.

Ahora la niña se encontraba en el mismo cuarto que recurrentemente era el escenario de sus pesadillas practicando sus habilidades con el doctor kozlov el cual no se cansaba de repetir que crecían exponencialmente y era imprescindible trabajar en ellas el tiempo que fuera necesario, aún si la niña tenía que dejar de dormir y comer lo poco que le daban para asegurar que fuera mas que excepcional el desarrollo de sus poderes.

En medio de la terrorífica habitación atado con los grilletes que dolorosamente le pertenecían a la pelinegra se encontraba un hombre, civil por lo que Yelena pudo ver en su mente. El hombre estaba aterrorizado y con las palabras que escucharía a continuación lo estaría aun mas.

- Quiero que que entres en su mente Yelena, que le hagas ver su mayor miedo y cuando esté al borde del colapso quiero que acabes con el - "Acabar con el", era ahora el momento al que tanto temió llegar.

Que su vida terminara no era algo realmente preocupante para ella pues su perseverancia por sobrevivir era exclusivamente por y para su hermano, su familia. Alguien inocente que jamás  debería ver la maldad del mundo que los rodeaba aunque ellos mismos estuvieran en el centro de ella, y que la misma pelinegra fuera de las peores partes de este mundo.

IN THE DARCK -Bucky Barnes-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora