Decimo octava Mordida

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Un viernes a medio día, Taehyung y Jungkook se encontraban almorzando en una cafetería no muy lejos del instituto, Seokjin no había asistido, por dos razones, una; no había llevado su uniforme de repuesto, y dos; estaba demasiado cansado tratando de lidiar con un cóctel de emociones que le hacía mal a su cabeza, como a su mente, Jungkook decidió no presionarlo, así que por eso de encontraban solo él y su alfa.
Estaban comiendo, Taehyung algo apresurado porque creía estar llegando tarde a trabajar, pero por más prisa que llevara, lo amaba porque siempre le daba de su tiempo y atención.

— ¿Entonces sabes si Jin hyung aun ira? —  Taehyung tomaba de su gaseosa, tenia un poco de mostaza en la esquina de la boca, que había echo para merecerlo.

— No lo se, supongo que si, a él le gustan muchos las excursiones, además, pienso que sería una buena idea, para que se despeje un rato — Jungkook estiro la mano para retirar los restos de mostaza de las comisuras de los bonitos labios de su novio, Taehyung le sonrió de boca cerrada ya que estaba comiendo

Jungkook espero que Taehyung terminara de comer para escucharlo, el había terminado hace unos minutos, por lo que el más desesperado por acabar era Taehyung

-— Si quieres podemos cancelar algunas cosas, para acompañarlo, no hay problema si no quieres, lo digo para hacerle compañía también — tomando una servilleta, se limpio los posibles restos de comida, procediendo a limpiar sus manos también.

— Supongo, si no te molesta, podemos hacer otras cosas, otros días, gracias por pensar en él hyung — Jungkook se acercó a Taehyung y lo abrazo todo lo que la silla donde estaba sentado le permitía, Taehyung correspondió y dejo un pequeño beso en la cabeza del omega, jamás se cansaría de tenerlo cerca, era como si todo lo que existiese, dejara de serlo y soló fueran ellos dos.

— Tenemos tiempo para nosotros, mucho tiempo, además, Jin hyung es mi amigo ahora también.

La mente de Jungkook giraba entorno a lo que Taehyung había dicho "tenía tiempo" su alfa no parecía tener problemas con repetir constantemente que harían una vida juntos, porque sonaba tan serio que a veces Jungkook mismo se cuestionaba si Taehyung era real, todas las personas con las que había salido, tenía solo planes a corto plazo, mientras Taehyung, incluso pensaba hablar formalmente con sus padres respecto a un compromiso, y Jungkook creía que era un sueño porque nadie había ido enserió con él, solo era diversión y ya, Jungkook ya no se cuestionaba que Taehyung fuera su destinado, y ahora afirmaba cada ves más el amor que le tenía, porque iba más a ya de sus lobos, se trataba de él, amando a una persona tan especial como lo era Taehyung, porque era tan real y al mismo tiempo irreal, amaba día con día las acciones y pequeños pensamientos que a veces decía en vos alta, razón por la que se sonrojada, a quien Jungkook había observado como alguien reservado, tan poco demostrativo, incluso indiferente, ahora se veía tan lejano, quizás cualquiera persona que no lo hubiese tratado como alguien insignificante, se hubiese ganado el cariño y el genuino intereses departe de él.


Jungkook sabía que estaba enamorado, también sabia que ahora amaba a alguien, y eso lo hacía feliz, amar era algo tan especial, debía hablar con su mamá, ella se pondría feliz.

....


Seokjin caminaba despacio en dirección a su casa, observando alrededor el que su madre no llegara en cualquier momento, si es que llegaba claro, porque no dudaría en darse la vuelta, más no vio ni su auto, por lo que alerta ingreso a su casa.


Era de día, pero la casa no tenía muchas luces encendidas, busco a Mihna por la casa, sin embargo solo había silencio, no había nadie.
Solo subió hasta su habitación, buscando una maleta y metiendo lo necesario, posiblemente su madre ni siquiera tendría planes de regresar, pero mejor prevenir que lamentar, solo necesitaba tiempo, y varios cambios de ropa, si.

Mordidas | Taekook Donde viven las historias. Descúbrelo ahora