4. CUIDÉMONOS

129 18 2
                                    

"So I drown it out like I always doDancing through our house

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

"So I drown it out like I always do
Dancing through our house

With the ghost of you..."
Ghost Of You, 5 SOS.


Estar rodeado de flores en medio de la nada es una buena forma de olvidarse de que está solo. Rodearnos de soledad es una vía muy válida para olvidar momentáneamente la que llevamos dentro y de la cual no podemos deshacernos fácilmente por mucho que queramos.

¿Para qué ansiar llenar nuestro vacío pudiendo abrazarlo?

Kaminari tiene la tentación de tumbarse sobre el pasto y dejarse fundir en el ambiente lleno de... de nada. Es la nada lo que le rodea y es nada lo que siente. Un poco aturdido aún por tanta paz, se agacha a recoger unas flores amarillas que le han llamado la atención, topándose con otra mano que pretendía hacer lo mismo que él.

Dos personas que buscan lo mismo en kilómetros. Dos personas que han encontrado algo que ha captado su atención y que han coincidido en su acto de alcanzarlo. Qué caprichoso el destino, los deseos que los impulsan y ellos mismos, sumisos ante sus instintos.

Lentamente retira su mano, alzando la mirada para ver a la otra persona allí presente. Cuando chocan miradas, algo dentro del chico se revuelve ansioso, familiar, y un velo de calma se cierne sobre su propia piel cuando esos ojos marrones como tierra después de una tormenta coinciden con los suyos, dorados como el atardecer.

La chica es joven. Tiene su edad, probablemente. Su pelo es perfecto, ni muy largo ni demasiado corto, con un flequillo adorable. Sus pestañas son tan largas y su rostro tan adorablemente tierno, que Kaminari se nota a sí mismo sonrojado a más no poder cuando se da cuenta de que lleva un rato mirándola sin decir nada. Pero ¿cómo no hacerlo cuando creía tener un ángel delante suya?

"¿Querías esta flor?", pregunta ella, sonriendo.

Sus mejillas parecen de porcelana y Denki siente la urgencia de comprobar con sus propios dedos si su piel es tan frágil como parece. Ah, piensa, tenía sentido estar soñando con una chica así después de haberse ido a dormir sintiéndose tan solo. ¿Era esa la imagen que su cerebro había creado como solución a su problema? ¿Era esa chica lo que él entendía por perfección? Porque se acercaba, aunque supiera que el encanto de las personas se encuentra en sus secretos y en sus deslices, no en la perfección de ningún tipo.

"Puedes quedártela", responde al cabo de un rato. Ni siquiera sabe si ha abierto la boca para hablar. Donde están no hace falta hacerlo.

La chica, que viste un vestido azul claro, arranca esa flor y se levanta, tendiéndosela.

"Yo tengo muchas aquí, puedes quedártela"

No muy seguro de si aceptar el ofrecimiento, la alcanza, rozando esos dedos fríos como una madrugada de invierno arropada por un cielo nevado.

ghost of you | shinkamiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora