Me cambiaste [BrightWin]

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Bright se alistaba, cambiándose la camisa enfrente del menor este pudo observar la herida que estaba cicatrizando, al igual que su tobillo había desinflamado, se sentía aliviado de que el pelicafe estuviera mejor. No le gustaba verlo mal herido.

–¿Saldrás?– preguntó el menor– Bright asintió– ¿Me dejarás solo?– indaga curioso de saber qué gesto haría el pelicafe.

Frunció el ceño caminando al armario, sacó un gorro color rosa y se lo alcanzó a Win. El menor sonrió llevando el gorro a su cabeza.

Salieron de la misma forma que siempre lo hacían, caminaban hasta llegar a la gasolinera, iban en la camioneta, pero esta vez el destino era distinto.

Estacionaron afuera de una tienda de ropa, dónde Bright conocía al dueño porque era amigo de Melish. Bright hizo una señal de saludo que el dueño ya conocía, el menor detrás de él hizo lo mismo. El pelicafe se acercó a la variedad de camisas y se quedó viendo a Win por unos minutos.

–¿Qué? ¿Quieres que busque?– señaló el menor.

–S-si– pronunció Bright sorprendiendo al menor.

El menor obedeció y así fueron con más prendas, llevando para él y para el pelicafe. Después de cancelar. Bright entró a la tienda de conveniencia. Checó en las estanterías y se fue por el lado de lácteos. Win se había dado cuenta que el pelicafe buscaba helado. Había descubierto que le gustaba lo dulce, debido a que agregaba extra miel en sus hotcakes y siempre mantenía dulces en los gaveteros de la cocina.

En todo lo que Bright buscaba en el refrigerador, Win se desplazó hacia otra estantería, buscando los condones y lubricantes. Se quedó analizando unos segundos mordiendo la esquina de su labio.

–Win– hablo el pelicafe cerca del menor haciendo que se sobresaltara.

–Casi me da algo– dijo el menor colocando una mano en su pecho.

Bright se le quedó viendo con un signo de interrogación al verlo observar las cajitas en las estanterías.

–Mmm.. ¿Recuerdas lo que hicimos el día anterior en la cama?– preguntó sonrojándose.

–S-si– respondió Bright. Win se acercó más para susurrar al oído del pelicafe.

–Los utilizas para cuando quieres hacer el amor– señaló Win las cajitas– es algo parecido a lo que hicimos en la mañana– dijo ansioso por querer enseñarle al pelicafe.

Win se alejó y vio un leve rubor en el contrario que hizo calentar su corazón. Tomó los condones y el lubricante con la aprobación del pelicafe, cancelando en caja.

Cuando llegaron a casa Win se fue a la habitación para guardar las prendas que habían comprado, mientras Bright se quedó en la sala, su mente divagaba en las palabras del menor, busco la bolsa que obtuvieron en la tienda, sacó sus golosinas y helado, viendo la otra bolsita dónde venían los condones y el lubricante. Se preguntó si esto era parte de lo que Melish le había explicado una vez respecto al unirse con otra persona. Dejó los pensamientos al igual que la bolsita a un lado y guardó sus golosinas en la cocina.

Win salió de la habitación,buscando la bolsa de compras para guardar la bolsita.

En todo el día los dos chicos se entretuvieron en el sótano, Bright le enseñaba cada herramienta a Win y como utilizarla, también tenía otro tipo de medicamentos que servían para aniquilar o dejar débil al contrincante. También Win aprovecho para repasar más palabras con el pelicafe.

Después de un largo tiempo salieron del sótano para cenar. Se sentían cansados, querían comer y dormir. Aunque el pelicafe no hablara mucho a Win le agradaba saber con tan solo un gesto o en la mirada que quería decirle, esos detalles estaban creando un espacio de amor en su corazón.

Los dos listos para dormir se recostaron en la cama, Win se acurrucó en los brazos de Bright y cerró sus ojos para dejarse llevar por el sueño.

Apenas entraba la luz del día por la ventana, los brazos de Bright rodeaban al menor, se movió y  soltó un pequeño gemido cuando sintió  algo duro pegado a su trasero. Con picardía hizo pequeños movimientos, tocando el miembro del pelicafe con el trasero, de sus labios solo salían gemidos. Su respiración se comenzó a agitar. Y el pelicafe  también empezó a soltar gemidos, giró para quedar frente a él y con sus manos tocar el miembro. Bright  poco a poco comenzó a abrir sus ojos viendo a los del menor, reflejando ternura y cariño, pero también el deseo.

Juntaron sus labios en un beso necesitado. Ruidos eróticos salían del intercambio. El menor se colocó encima de él, para quedar a horcajadas y el pelicafe con sus manos comenzó a amasar las nalgas.

Las manos del menor jugaban con los  pezones del pelicafe. – Bright ¿te gustaría que hagamos el amor?

– S-si. –dijo con dificultad, pero eso lo excitó más.

Unieron otra vez sus labios. El menor se levantó, a lo cual el pelicafe soltó un gruñido que ignoró, fue por la bolsita en dónde estaban los condones y lubricantes que compró en la tienda.

Se volvió a posicionar encima de Bright. Acercó el bote de lubricante. Bright perdido en los movimientos del menor observaba con atención,  a Win le dió ternura la carita que mostraba el pelicafe.

–Bright, ¿Sabes para qué es eso? –Él negó con la cabeza.

–Con esto me tienes que preparar, y dilatar aquí– señaló– para que no me duela, pues tu amiguito no es pequeño.

Tomó las manos de Bright, llenando sus dedos de lubricante y las dirigió a su entrada. Le explico cómo lo tendría que hacer.

Con mucho cuidado dilató al menor, de sus labios solo gemidos salían. Bright no despegaba su mirada del rostro del menor.

Cuando sintió que era el momento, agarró el condón, lo abrió y colocó en el miembro de su pareja. Se posicionó frente a él, comenzando a bajar para tomar toda su extensión.

Cuando llegó a la base, sus pieles chocaron. Sonando por toda la habitación. Win cada vez se  acostumbraba a la intromisión.

–Te quiero.

El pelicafe posó una mano en el pecho del menor y sostuvo su mano para colocarlo en su pecho haciéndole entender que él también lo quiere. A Win se le aguadaron los ojos, sin poder contener la dicha beso los labios del pelicafes, separándose susurro. – Muévete.

Bright siguió la orden, dando estocadas más certeras, aumentando el movimiento, el sonido de sus gemidos y la piel chocando. Fue demasiado para Win. Viniéndose gritó el nombre de Bright, sintiendo como el contrario se venía en el condón.

Dejando un pequeño beso el menor se quitó de encima ayudo a quitar el condón y después limpió su vientre. Los dos estaban ruborizados, Bright acarició la mejilla del menor, para darle un beso de ternura y delicadeza. Los dos se volvieron acostar y Bright colocó su rostro entre el cuello del menor para abrazarlo.

😳Están un poco dulce los chicos?

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Créditos de la escena smut a LuzdeNoche99

Nos vemos mañana, cuidense. 🧙🏻‍♀️🐳