Capítulo 8

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And I was runnin' far away
Would I run off the world someday?
Nobody knows, nobody knows
And I was dancing in the rain
I felt alive and I can't complain

But now, take me home
Take me home where I belong
I can't take it anymore
- Runaway, Aurora
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Amor de madre

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Una potente ráfaga de viento se encargó de arrojarlo fuera del bosque de golpe. Ya no estaba con Thor, al levantarse se dio cuenta que estaba en el prado que dividía al bosque del pueblo. Estaba en casa. Sin pensar siquiera en ello salió corriendo en dirección a la aldea, pero a tan solo tres metros del bosque sus piernas se clavaron con fuerza al suelo.

Esta vez no había ningún tipo de magia de por medio, fue su propio cuerpo el que lo detuvo.

- ¿Qué esperas? Tu hogar está más adelante -

De inmediato Loki giró detrás suyo buscando la voz que le había hablado, pero no estaba. Confundido volteo a todas partes sin encontrar nada.

- ¿No es esto lo que tanto querías? - habló otra vez pero más cerca, detrás de él. Hizo que se sobresaltara y volteara hacia atrás pero otra vez no había nadie.

- ¿Qué está pasando? ¿Quién eres? - le hablo Loki con pánico.

- Eso no es relevante ahora. Debes de tener mucha prisa - rió ligeramente la voz desconocida.

Loki volvió a mirar en dirección. ¿Por qué de pronto pareció tan ajena? Una sensación incómoda se apoderó de su estómago, sus piernas comenzaron a temblar y el sudor empezó a caer sobre su frente. Lentamente retrocedió sin apartar la mirada del gran muro de piedra.

- ¿Qué sucede? ¿Qué no habías pedido volver con tus padres? - Loki volvió a girarse para toparse a una extraña y vieja mujer; bajita y algo jorobada, con el cabello opaco pero dorado y alborotado. Lleno de ramas y hojas, aunque vestía ropas realmente lindas, una bella túnica de colores celeste la cubría. También llevaba un bastón.

Ella le sonrió - ¿Ahora qué te detiene mi niño? - preguntó con calidez.

Loki volvió a mirar el pueblo a la lejanía. Se veía aún más lejos de lo que estaba, cubierto con una sustancia asquerosa y putrefacta. Aunque era solo su imaginación.

Un dolor en su pecho lo atravesó de golpe, un dolor al que alguna vez estuvo acostumbrado pero ahora había olvidado que alguna vez lo sintió. Tan solo había pasado un mes desde la última vez que sintió ese ardor que le dejaba sin aliento.

Todo estaba dando vueltas, su respiración se atascó en su garganta. Trataba de respirar pero solo salían jadeos de su boca. Lentamente sus piernas se deslizaron hasta el suelo y sus manos cubrieron sus rostros. Junto sus piernas hacia su pecho y se hizo bolita ahí mismo - No quiero volver - susurro muy a fuerzas mientras trataba de calmar su agitada respiración. La vieja mujer misteriosa caminó hasta él y se sentó a su lado.

- ¿Por qué? Pensé que extrañabas a tu familia - el agarre de Loki sobre su rostro se apretó con frustración. La suave expresión de la anciana se transformó en una mueca de pena. Puso su mano sobre la espalda de Loki y le abrazó - No hay nada que temer aquí, Loki querido. Estás a salvo... -

No es un Amante quien no ama para SiempreDonde viven las historias. Descúbrelo ahora