Mikenix || Destinos Naturales

13. Un secreto más

+ -madre que hago aquí, no deberíamos estar con papá...-El felino se cuestionaba con lo que ocurría en su alrededor.
El atardecer chocaba con la tierra infértil del lugar dando paso a el crudo invierno, la madre cubría al minino con sus ropas, de pronto, unos ojos púrpuras pasando entren la nieve. La madre empezó a proteger un tesoro único, que un cuchillo atravesó su cuerpo haciendo que la sangre bañara al minino de ojos púrpuras, quien con el paso del tiempo se convirtieron en esmeraldas, los ojos más bellos que que hayan visto.

- tengo que cuidarte, no te olvides que tienes a una madre a tu lado y mi único orgullo eres tú mi hermoso minino....+

Dos ojos se abrieron cambiando de color mutuo en un instante, se levanto con la energía que tenía y se olvidó por completo de de lo ocurrido miro a su alrededor, un presentimiento que ya había estado aquí le corría por su cuerpo, en eso se escuchó un sonido de la puerta, un ser de pelaje dorado amarrillo entraba por la habitación, con una bandeja de plata.

- Gatito...puedo pasar a verte...-Mike entro, sin escuchar respuestas alguna de su amado.

Acenix, empezó a desviar la mira, para evitar encontrase con el mayor, Mike se acercó lentamente sin emitir ruido alguno para evitar asustar al minino, que se encontraba sentado en la cama. El silencio era muy dura algo que ninguna cuchilla podría romper.

Acenix, estaba temblando sus orejas estaban caídas, Mike abrazo al felino quien poco a poco empezaba a mover su cola, Mike miro este acto, que beso al menor. Acenix no sabía que hacer que correspondió como pudo, el gato empezó a mover más su cola, el mayor despegó sus labios del felino. Quien hacía caer un poco de baba en su pelaje gris.

- Por qué lo hiciste- confundido el menor, no dejaba de mover su cola.

- Tranquilo, deja de mover cola, además...estabas ignorando con la
mira-el can tomo el la bandeja de plata y la llevo a la cama con de su amando.

- ¿Dónde estamos Mike?...

- Llegamos al lugar, dónde Víctor nos dijo.- la emoción de Mike era muy notable, llegaron dónde Víctor le dijo que fueran ahora, es donde aquí las respuestas se volverán en preguntas o las preguntas se volverán en respuesta.

- Estamos en el santuario de otoño... Un poblador nos acogió mientras su estabas dormido. - el can no pudo contener las lágrimas que empezó a llover sin motivo alguno.

- Mike...no llores estoy bien, gracias a
ti.- el felino empezó a abrazar al can, cubriéndolo con sus patas y cola como aún niño pequeño.

La noche se acercaba por la ventana y las luces del pueblo brillan con una ciudad. Acenix decidió ver el pueblo, que bajo lentamente sin despertar al can. Acenix noto a Mika, con esos ojos azules que siempre hacían que Acenix quedé perplejo con sus ojos.

- Mika...estas bien...- el felino empezó a caminar hacia la pequeña, quien está salto y tumbó a Acenix con el piso provocando un ruido espantoso, el cayó asustó a Mike quien bajo las escaleras y vio una escena muy tierna. Acenix tenía tenía a Mika en sus brazos y la estaba acurrucado para que se duerma.

Acenix vio la Mike que le entró a Mika y este decidió salir sin decir palabra alguna. Mike quedó confundido con la acción del gato que decidió seguirlo, Mike salió de la casa, pero la cruzar se percató de un rastro de sangre, hacía un camino decidió seguir sin duda alguna por sabía que algo iba a pasar. Mike busco a Flex quien estaba tomado en un bar que había en el pueblo, Mike miro esto con asco que no se acercó por miedo a que le pase algo a Mika. Mientras tanto Acenix estaba temblando, algo que no le pasaba muy común, no había riesgo alguno pero la desesperación lo llevo a salir de casa. Una voz horrible se escuchaba por en medio de la nada, Acenix sabía que su felicidad no iba hacer eterna, en eso Nixe apareció delante de Acenix quien esté no se sorprendió mucho como si el lo estuviera esperando.