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Dos meses después—Entonces —acusó Kyuhyun sin preocuparse en tragar antes la comida de su boca —vas a dejarme de nuevo por irte detrás de un culo.
Enrojecí y me negué rotundamente.
—Te dejo porque necesito estudiar. Me leí entero el séptimo canto de la Ilíada. No voy a cancelarle a Hyukjae para irme a comer hamburguesas contigo.
Siendo sincero, detestaba la Ilíada y todo lo relacionado a ella. Las historias resultaban interesantes, pero leer el libro original de Homero no era precisamente un paseo por el parque, e incluso antes de que pudiera pensarlo, Hyukjae me advirtió no escuchar el audiolibro en youtube ni ver resúmenes. Siempre fui un tipo sencillo y no aprendí a mentir. No podía desobedecer a mi tutor y fingir tranquilidad. Por eso la idea de haberme leído un capítulo tan complejo y al final irme a perder el tiempo con Kyu se me figuraba a una bofetada en todo el rostro.
—Debes aceptar que si Hyukjae no te hiciera babear, literatura griega te daría lo mismo.
—Cállate, eso no es cierto.
Nos encontrábamos en el departamento de literatura, justo al término de la clase que por poco me hizo llorar a dos semanas de haberla tomado, donde el profesor Iong podía escucharnos; donde, de hecho, los estudiantes que tenían a los pensadores griegos en un pedestal ya nos miraban feo. Por si no fuera suficiente, vi a Hyukjae aparecer en la otra punta del pasillo. Habíamos quedado de juntarnos aquí y ahí estaba, puntual como siempre. Que desastre sería si pillara a Kyuhyun diciendo eso. No nos iríamos hasta que terminara de recitarnos todas las razones por las cuales estábamos equivocados.
En el tiempo que llevaba conociendo a Hyukjae me di cuenta de algo: era raro. No en el sentido raro, freak, tipo chico que te respira en el cuello y acaricia tu cabello sin que te des cuenta. Aunque, quizá, sí un poquito demasiado obsesivo en ciertas cosas. Por ejemplo, su aspecto personal, cuidaba demasiado cada detalle de él. Casi siempre vestía trajes que le quedaban como guantes o ropa formal, su cabello nunca se hallaba despeinado, todo el tiempo llevaba las cejas bien arregladas y nunca le vi un solo vello facial. No entendía de qué forma alguien en séptimo grado podía verse tan esplendoroso las veinticuatro horas. Y eso era apenas la punta del iceberg.
Hyukjae era un maniaco de la limpieza y muy probablemente un chico TOC certificado. Habíamos comido un par de veces juntos, por lo que tuve oportunidad de verlo sacar un pañuelo de su bolsillo y limpiar la mesa como si algún portador de la peste la hubiese tocado ¿Se me había derramado salsa en el rostro? De inmediato la limpiaba con otro pañuelo ¿Había morusas sobre las mesas? No las podía ni ver, las barría al instante ¿Tenía un cabello suelto sobre la camiseta? Se deshacía de él sin darse cuenta. Era fan de los detalles.
Su inteligencia fungía otro aspecto extraordinario de su persona. No era simplemente un chico listo, Hyuk era culto. Podía leerse cinco libros a la semana y entenderlos a la perfección sin perderse de nada.
La última cosa que me descolocó por completo, y la más notoria e interesante: se le iba la olla con los griegos. Hyukjae sabía muchas, muchas cosas de la antigua cultura grecoromana, normal conociendo en lo que quería especializarse al terminar la universidad, pero es que cada día tenía un relato que contar acerca de ellos. No existía nada que le llamara más la atención.
Aunque, después de todo, no le hacía daño a nadie, y era una persona tan agradable que acostumbrarse a él no representaba un desafío. Incluso me encantaban algunas de esas manías. Podría pasarme horas escuchándolo hablar.
—Hola Donghae, Kyuhyun. —Hyukjae llegó a nuestro lado y, en un acto de inercia, revisó el reloj de su muñeca.
Mi amigo le respondió con un movimiento de cabeza y yo le sonreí. Hoy, de cerca, se veía mucho más guapo.
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DIONISIO (Eunhae)
FanfictionDonghae, luego de ingresar a la universidad, conoce en una conferencia a Lee Hyukjae, un estudiante de literatura obsesionado con la mitología griega. Hyukjae irradia un aura fuerte de elegancia, misterio e inteligencia que de inmediato llama la ate...