Se dice que la historia es la narración o registro de que pretende certificarse con pruebas y fragmentos escritos que se han dejado a lo largo del tiempo, quien la cuenta tiene el poder de engrandecer, minimizar e incluso distorsionarla.
Aquellos...
Después de abrir la puerta; tan cuidadoso, que apenas pudo ser escuchado el crujir de la vieja madera.
Salió en puntillas, no logra ver al pequeño beta por ningún sitio, aunque pretende que la poca luz que hay a su alrededor no le de una mala jugada. Entonces logra distinguir la salida principal, así que se apresura para salir de ahí. —Eso fue realmente fácil. —Pensó.
Al menos lo fue hasta que puso un pie fuera... — ¿A donde crees que vas? —Un alfa, que ya conoce lo detuvo.
—¡HaoXuan! —Parecía sorprendido.
— Nos crees tan poco inteligentes, que imaginaste que dejaríamos al omega cual mayor virtud es escapar, sin vigilancia alguna. —Su cara apenas era visible pero, se podía notar como levantaba sus cejas.
— ¿Y que harás?, ¿detenerme? —Preguntó altanero.
—¿Me vez cara de Xiao Zhan?— Le refutó de igual forma. — Pará ser sincero, no quisiera volver a lo mismo, así que tienes dos opciones ;La primera irte una vez más, para así nosotros volver a emprender tu búsqueda y retrasar de nuevo nuestros planes... Los tuyos. Y la segunda, sería que por una vez en todo este tiempo podrás ser capaz de escucharnos, si te unes a nosotros podríamos lograrlo. créeme que todos aquí estamos luchando por el mismo objetivo.
—¿También Jiyang? — Le miró.
— ¡No te atrevas Wang Yibo! ... — El omega sabía que puntos tocar. —Jiyang no tiene la culpa de ser hijo de quien es. El no hizo nada, no es como su tuviera muchas opciones y para Zhan fue lo mismo.
—¡Eso no es verdad! —Mencionó molesto.
—Tu no sabes nada Yibo, entiendo tu postura y tu dolor, pero no eres el único que ha perdido aquí. — trataba de no irritarse.
—¡Pero soy el que ha perdido más!. — Seguía a la defensiva.
—Eso lo sabemos todos, nadie está minimizando por todo lo que tuviste que pasar, realmente lamento todo lo que viviste solo. —Probócando que este lo abrazara impulsivamente,que por un momento supuso que el otro lo rechazaría, pero no fue así, el abrazo también fue correspondido. —Por favor Yibo, danos esta última oportunidad, te doy mi palabra que si en verdad no estas de acuerdo, yo mismo me encargo que no vuelvas a vernos. Al final del día somos todo lo que tienes, se lo difícil que debe ser para ti, pero acepta que también ocupas de nuestra ayuda.
—Solo lo haré para de que una vez por todas me dejen en paz. —Con su manos retiraba las pequeñas gotas de agua que derramó por todas las emociones que afloraron en el.
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La mesa estaba servida de nuevo, esta vez con platillos característicos de un desayuno, arroz , algunos cortes de cerdo y panecillos de trigo principalmente.
—Me podrías servir un poco de té. — Jiyang se dirije a Xiao Zhan.
