XIII. DIGTAMEN

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—YiBo necesitamos que elijas...

Aquellas palabras sonaron en su cabeza como un eco, la situación era tan caótica que no podía si quiera pensar con claridad.
Debía ser una broma que el destino  de Xiao Zhan estuviera en sus manos.
Era tan elevado su ritmo cardíaco que podía sentir un leve temblor recorrer su cuerpo.

Pará los espectadores solo han pasado algunos segundos, para si mismo aquello parecía ser eterno, mientras los otros sólo esperaban una respuesta.
En estos momentos cualquier decisión sería la correcta.

Jiyang quiso hablar, pero fue HaoXuan quien lo detuvo de inmediato, pues a pesar de lo difícil de la situación, esto sólo le corresponde a Yibo.

—Yo.. Yo... — Pareciera que al fin obtendrían al menos unas palabras del omega.
Pero volvió a cerrar su boca para tragar un poco de saliva, pues le dolía el nudo que se formó en  su garganta.
Una vez hecho aquel pequeño gesto.
Tomo valor de nuevo.

Pero se encontró algo confuso cuando
algo detrás de él pareció llamar la atención de los tripulantes.

—No es necesario que sigan hostigando a Wang Yibo. —Una voz rasposa y cansada, le hizo voltear de inmediato.
La silueta de Xiao Zhan estaba frente al el.
Una figura visiblemente empapada con sus ropas hechas harapos, que parecía poder observar mejor los detalles cada vez que el otro avanzaba a pasos lentos hacia donde este se encontraba.
Un alfa herido, con  la piel enrojecida y claros síntomas de deshidratación, pues sus labios estaban completamente blancos.

Pero a pesar que era obvio que se dirigía hacia su sitio, el alfa sólo pasó de largo como su el omega no estuviera a su costado.

Por su parte HaoXuan y Jiyang corrieron para ayudarlo, el omega castaño lo abrazo con todas sus fuerzas mientras soltaba un llanto incontrolable, por su parte Dalai solo contuvo los ganas de hacer lo mismo. Procediendo a abrazarse a sí mismo para calmar sus nervios.

Una vez que noto que su amigo se calmo tomó los brazos que le rodeaban la cintura para separarse  de su agarre, tomó un respiro para volver a hablar.

Acomodo su postura, para dirigir una mirada felina hacia los presentes.
— Necesito que sean sinceros, no le pueden mentir a su capitán...
— Mencionó con la respiración agitada. —¿Quién de aquí estuvo deacuerdo en seguir nuestra  ruta aún sin mi presencia?...¡DÍGANMELO!.

muy a pesar de todo, aquellos que habían tomado dicha decisión, cabizbajos levantaron su mano, ya que de cualquier forma serían descubiertos.

Pero para su sorpresa fue el mismo Xiao Zhan quien los felicito y comenzó a reprender a quienes decidieron buscarlo.

—Veo que en todos estos años no han aprendido nada.—Dijo exaltado. —¿saben cuanto tiempo se ha perdido?, casi un día completo, lo  suficiente para que cualquier desgraciado que haya quedado vivo, lo tomará con ventaja para ir a vociferar nuestros planes, recen a sus dioses para que esto no suceda por que si por alguna razón nuestras noticias llegan a oídos de del emperador... ¡no sólo yo estaré muerto! — Los murmullos entre la tripulación no se hicieron esperar, pues el alfa realmente se veía molesto por estar vivo.
— Los que  botaron por dejarme y seguir adelante se pueden retirar...

—¿Pero Zhan? —HaoXuan trato de persuadirlo.

—¡Pero nada¡.—Todos ustedes. —Apunto  con su dedo índice. —No recibirán alimento hasta que yo lo decida, veremos si esta sanción les enseña a  pensar fríamente.
— No hubo absolutamente nadie que pusiera objeción . 

Después de aquello se dirigió a la parte del barco que había tomado como dormitorio, bebió  todo el agua que pudo, se desnudo y se hecho entre las sábanas que había en el suelo.
Despertó hasta el atardecer del día siguiente.

[.....]

Los días posteriores la tensión siguió en el navío, se podía sentir como el oxígeno era más pesado cuándo el alfa estaba cerca.
Cuando Yibo finalmente apareció, la imagen de Xiao Zhan se volvió un poco  mas calida, había dejado de ser aquel capitán demandante, de mal genio que sólo vivía por cumplir todos sus objetivos.
Pero desde que regresó de aquel incidente aquella capa fría pareció envolverlo de nuevo.

Incluso Yibo experimentaba el cambio del capitán.
Pues antes de todo, Zhan siempre trataba de empatizar con él, se mostraba interesado en su persona o al menos eso pensaba.
Pero ya no más, cada vez que este estaba cerca el otro simplemente se retiraba.
Incluso si este estaba en el comedor a punto de ingerir sus alimentos, éste tomaba su plato para retirarse.
Lo peor de todo que estuvo rogándole al a Zhan que lo ignorara, que pasara de él, tantas veces le reprochó su presencia que hoy obtuvo lo que tanto deseo, le frustra tanto  que el causa conflictos internos, pues aunque no lo quiera aceptar, le duele.

Sumándole a la embarazosa escena que   que está por suceder, en la última reunión se le pidió que marcará los territorios y rutas en los cuales se esconde su gente.
Era necesario entregarlo directamente al alfa ya que debe ser de sumo cuidado, si esto por algún error llega a manos equivocadas muchas personas estarían en peligro.

Tuvo que bajar a la bodega, pues es ahí donde Xiao zhan tiene lo que el llama "oficina";Para el omega era un cuchitril pero para el alfa parece funcionar.

Cuando llegó a donde Xiao Zhan, a pesar de la poca luz pudo notar como este rápidamente bajo sus pantalones  para cubrir su tobillo el cual claramente estaba muy inflamado, esto solo era el reflejo de todo su esfuerzo, no hubo un día que tuviera reposo.

—¡Zhan! tu tobillo... Regresó voy por un poco de ungüento. — Sonaba preocupado.

—Podrías dejar de actuar como si te importara. — Reprochó.
Se levantó para ir  a la mesa, apenas y podía apoyar el pie.

—Es lo que  haría por cualquier persona, no sólo por ti, prometí ayudar al prójimo cuando adquirí todos mis conocimientos.
—Le menciono tratando de sonar convincente.

—Si por supuesto. — Tomó una silla y se posó tras el escritorio.
Por un momento se quedó  pensante, no podo resistir más para preguntar.

—YiBo, ¿tan difícil era decidir? ... Por mi.

—¿Que?. —Aquello lo pasmo.

— Nada solo olvídalo.. . — Se arrepintió
por haber dicho aquello, y siguió leyendo  los  documentos que ya tenía anteriormente.

—No era una decisión fácil, además  fuiste tu quien dijo que no buscarte hubiera sido lo mejor...— Podía sentir como la sangre se le comenzaba a calentar.
—Para ti todo es tan fácil Xiao Zhan, ¿Recuerdas por qué todo se fue al carajo?, Lo recuerdas... —Clavo su mirada en el otro.
Quien a pesar de poder observar todo la furia siguió mirando de igual forma sus ojos directamente.

—¡Ese bebé también era mío! ... —¿Crees que eres el único que ha sufrido?... ¡Se que fui un cobarde!, e intento pagarlo todos los malditos días.
Pero ya no puedo mas Yibo, ¡Ya no puedo! .
— No pudo contener más su llanto.
—Pero ya me he quedado sin fuerzas para demostrar que estoy tratando de enmendar mis errores.
Pero tranquilo lo entendí todo cuando no pudiste decidirte en buscarme más.
— Podía aceptar aquello de cualquier otro pero no de Yibo.
Aunque lo niegues una parte de ti te hizo dudar y eso solo me demuestra que ya no me amas. — Cuando terminado de hablar pudo sentir su cuerpo más ligero, como si tuviera guardadas esas palabras ya hace mucho tiempo.
Se calmo y continuó;
—Así que solo terminemos esto ¿quieres?, llevemos las cosas en paz por nuestro bien una vez que todo acabe seremos libres, ya no habrá nada que nos ate al otro.

Por primera vez en mucho tiempo Yibo no supo que decir...









Algunas  veces necesitamos terminar con todo para poder  comenzar de nuevo y  seguir avanzando....

¡Hola! ¡hola!

En verdad extrañaba mucho esta historia, pero por X o por Y no podía escribir..
(también tengo nuevas historias en mi cabeza, así que no me puedo concentrará en ninguna)
Pero me enfoque y aquí otro nuevo capítulo.

Como siempre espero que les haya gustado...
Mil gracias por sus votos y sus comentarios...

Nos leemos la próxima semana 🥰🤟

MI CONDENA TIENE TU NOMBRE    ZHANYI - OMEGAVERSE Donde viven las historias. Descúbrelo ahora