ᴏɴᴇ-sʜᴏᴛ's ʟᴜsᴀɴ

⁷ Aⁿᵗᵉˢ ᵈᵉ ᵗⁱ ⁷

Chau, decidí seguir escribiendo one shots y que mejor que volver con uno romántico(?) uwuuuu

Cosas a considerar:
1. Demorará más tiempo ya que entré a clases e ir en 3ro medio (2do de preparatoria) es una caca.
2. Lusan canon.
3. Aquí habrá un poco de oc asiq no me linchen si ven un Luffy más serio de lo normal.
4. Modern au, sin piratas, etc, etc.
5. Posibles escenas eróticas? Jwkdwnnd se requiere discreción (si no te gusta, si te gusta disfrútala a más no poder)
6. Primer song fic, no sé de este tipo de escritos asiq probablemente se sientan como ¿pero qué mierda estoy leyendo? Si es así, abstenerse de comentar weas hirientes que los cago a palos.
Eso, disfruten, voten, comenten, compartan, les amo♡

Los hielos dejan escuchar su leve tintineo cuando el vaso es levantado cuidadosamente de la fría barra de mármol negro, aquél vaso estaba hasta la mitad de un fuerte trago, de los que te hacen un cálido camino desde el paladar hasta el estómago, dando un trago a la bebida, el joven hombre vuelve a dejar el vaso en la barra, dejándolo al lado de su querido sombrero de paja, sacándose la gabardina roja que traía puesta esa noche, el calor inundó su cuerpo al momento de acabar el contenido del vaso, siendo esta su tercera ronda. Fijándose en ello, el barman se acerca a ofrecerle más rondas, con botella ya en mano y listo para servir más, sin embargo el chico niega levemente, satisfecho por el momento, todavía quedaban horas de noche para disfrutar sin necesidad de emborracharse.

— Como guste, si me disculpa. — Exclama aquel hombre de humita* retirándose con una reverencia y la botella de whisky en manos. Apenas le presta atención a lo que el barman le dice, siendo completamente distraído por el estridente sonido que causa el micrófono que había en medio del escenario. De repente todo el elegante sitio se ve sumido en la oscuridad, habiendo solo una luz que daba directamente al condenado micrófono, por suerte un trabajador del bar se apresuró en detener el ruido tan desagradable. Luffy se colocó el sombrero y se acomodó de tal forma que quedara viendo al escenario, donde el chico que estaba allí sudaba en nervios por ser el imán del momento, atrayendo la vista de todos los presentes, que no eran pocas, ya que aquél bar era conocido por toda la ciudad como un sitio de gran calidad donde podías ir a tomar un buen trago, disfrutar de pequeñas presentaciones musicales. Por ejemplo, esta noche. El chico, aún arriba del escenario termina de acomodar el micrófono junto a una silla alta y una mesilla de la misma altura, se apresura a aclarar su garganta y empieza a dar un breve discurso.

— Buenas noches a todos los clientes que prefirieron pasar su noche en nuestro bar, ahora, si me permiten, les voy a presentar a nuestro más reciente compañero que ha ingresado a trabajar hace no más de un mes, es tan radiante como el sol y su voz más encantadora que el mismísimo cielo. Con ustedes, Mrs. Prince!! — Una oleada de aplausos y vítores llena el establecimiento, las luces cambiando de tono a un hermoso color azul rey, el chico se baja del escenario dando paso al que dará inicio el show de la noche. El pelinegro hace un gesto para llamar al barman y, sin quitar sus ojos color ónix del escenario, le pide otra ronda del fuerte pero delicioso whisky. Mientras tanto, en el escenario se logró ver como una silueta bien definida iba acomodando el micrófono a su altura, desde lejos podía ver lo atractiva que era aquella persona ahí arriba, cabello tan dorado como el sol, con una textura que parecía más suave que la seda  china y unos ojos tan azules como el mismísimo mar Caribe y una cintura envidiada por muchos. Sin duda alguna, aquél hombre poseía una belleza fuera de este mundo. Luffy sonrió con los labios pegados al vaso al notar el ajustado traje color vino que el rubio llevaba puesto, hacía resaltar sus firmes piernas. El chico era encantador por donde se le viera y eso nadie iba a discutirlo.