-Ten cuidado podrías caerte- tomó del brazo al niño más pequeño que él que se había acercado al lago para poder verlo de cerca sin darse cuenta del peligro.
-No me pasará nada, estoy contigo- le sonrió el más pequeño confiado de que su hermano estaría ahí se algo le pasaba.
-No puedes ser tan confiado- aclaró el mayor mirando con preocupación a su hermano menor mientras lo hacía retroceder unos cuantos pasos hacía atrás.
-¿Estas diciendo que ya no me cuidaras? - preguntó el niño más chico con un dejé de tristeza en sus ojos y su voz.
-No es eso, si por mi fuera te cuidaría el resto de mi vida porque te amo más que a nada- lo tomó de los cachetes con sus dos palmas mientras lo miraba a los ojos con pleno y puro amor y se inclinó a su altura para poder verle más de cerca.
-¿Entonces porque dices que no me confíe?- preguntó el menor con un puchero desviando su mirada del mayor.
-Porque tal vez no siempre esté para ti Sasuke- golpeó con sus dedos la frente del pequeño y este sonrió por el acto.
-Auch...- no entendía porque su hermano siempre hacía eso pero de alguna manera entendía que era una muestra de afecto.
-Ven vayamos al lago- ánimo el mayor tomando a Sasuke de la mano para observar el lago y nadar en el.
Los dos niños corrieron a meterse al lago, reían y se miraban a los ojos como si solo existieran ellos a pesar de haber un hermoso paisaje a su alrededor ellos solo se miraban entre sí, como si nunca fueran a dejarse, como si nunca tomarían caminos diferentes como si nunca fueran a verse como unos desconocidos. Ellos no sabían de los errores de sus padres ni que ellos mismos serían los que cargarán con las consecuencias.
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Los pájaros fueron la alarma en esa mañana con un aire fresco pues el verano estaba a la vuelta de la esquina, el alba salió y con eso unos ojos negros se abrieron, Itachi podía ver ese lago frente a sus ojos, después miro a un lado y vio a esa persona, su persona favorita, sonrió, es como si lo conociera desde antes, desde mucho antes, amaba al hombre sentado junto a él, un abrir de ojos lo hizo darse cuenta que se quedo mirándolo como si fuera un tonto.
-Buenos días - lo recibió con una sonrisa.
-Buenos días, ¿dormiste bien?, ¿porque no me despertaste? - contestó enderezandose con vergüenza de que lo viera recién levantado, seguramente tendría muchas lagañas.
-Muchas preguntas, dormí mejor que nunca y no te desperté porque te veías muy comodo, como si no hubieras dormido en días, ¿tienes problemas?- preguntó Itachi que había observado las ojeras de Sasuke hace semanas. Y bueno era obvio que dormir en un auto tampoco era lo más cómodo.
-¿Ahora quien es el de las preguntas? - salió del auto para estirarse y el acompañante lo siguió, el sol desdé esa vista se veía hermoso.
-Te ves cansado, ¿te parece si yo conduzco? - el contrario se le quedó viendo incrédulo como si hubiera dicho que tenía un bicho en la cara.
-No estoy cansado, acabo de despertar y ¿sabes manejar?- no era que pensará que Itachi no podría manejar pero por lo que sabia este no tenía auto.
-Que no tenga auto no significa que no sepa manejar- respondió indignado pero con una sonrisa en sus adentros.
