Really Really ↠Dahmo

20

La mañana siguiente llego muy pronto, desperté antes que Momo, sin embargo, no tuve la suficiente energía para levantarme, y estar rodeada en los brazos de mi novia tampoco ayudaba con el propósito.

Intenté relajarme, pero no podía hacerlo. Tenía miedo por lo que podría pasar en las próximas horas; aunque Momo me había dicho que todo estaba bien con sus papás después de la mala experiencia que tuve con los míos, era difícil imaginar un escenario diferente al de la indiferencia y las lágrimas.

— Casi puedo escuchar tus pensamientos —, dijo la voz somnolienta de Momo, la miré y sus ojos apenas estaban abiertos. Le sonreí.

— No es nada, vuelve a dormir, aún es muy temprano.

— También deberías volver a dormir —, murmuró. — Cuando estamos de vacaciones es un desperdicio despertarse antes de las diez —, dijo con los ojos cerrados.

— Lo sé, lo sé —, le dije, besé su mejilla y cerré los ojos intentando conciliar el sueño de nuevo.

Después de diez minutos intentando volver a dormir sin conseguirlo, me rendí, miré a Momo y noté que, una vez más, estaba profundamente dormida.

La observé por un tiempo, simplemente apreciando los pequeños detalles que no podía notar cuando estaba despierta, sonreí al notar como su nariz se arrugo ante sus sueños. Dejé un suave beso en su nariz antes de soltarme con suavidad de sus brazos, cuando lo logré, me levanté de la cama.

Me dirigí al baño a prepararme para el día, cuando estuve lista, regresé a la habitación y Momo aún dormía. No sabía qué hacer, todavía era temprano para despertarla, y tampoco quería arriesgarme a salir de la habitación y encontrarme con alguno de sus padres, por lo que me quedé sentada en la alfombra mientras revisaba las notificaciones de mi celular.

Tenía algunos mensajes de amigos cercanos que contesté y luego me ocupé del mensaje de mi hermano que me preguntaba cómo estaba, no había hablado con él desde el incidente en casa.

" Estoy bien, aún un poco triste por cómo sucedieron las cosas, pero más tranquila"

Le escribí y se lo envíe, su respuesta fue casi inmediata.

"¿Estás ocupada? Me gustaría hablar contigo".

"Por favor, no me ignores".

Puse los ojos en blanco ante lo último que leí, no había pasado ni un minuto de diferencia entre sus mensajes.

"No seas dramático, no te estoy ignorando, sólo necesitaba tiempo".

"Y sí, puedo hablar, te llamaré enseguida".

Miré a Momo y luego mi celular, no quería despertarla, así que decidí salir al pasillo y llamar a mi hermano.

— Hola —, salude en cuanto me atendió.

— Hola, Dahyunie, me alegra que recuerdes que tienes un hermano —, puse los ojos en blanco una vez más.

— Lo siento, Myungsoo, sólo necesitaba tiempo para asimilar todo lo que pasó.

—Lo entiendo, sólo me molesta que me excluyas, me importas y me interesa todo lo que esté pasando contigo.

Suspiré, comprendiendo su punto.

— Lo siento —, me disculpé con sinceridad. A veces olvidaba lo mucho que le importaba a mi hermano. — Te prometo que ya estoy mejor, y no volveré a excluirte.

— Bien. Me alegra escuchar eso. ¿Y qué estás haciendo en este momento?

— Estoy en Japón, con Momo.