Really Really ↠Dahmo

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— ¡Dahyun despierta! — Escuché la voz de Chaeyoung. Abrí los ojos con dificultad, apenas distinguiendo su figura en la oscuridad, mi mala vista junto con la falta de luz no era una buena combinación. 

— ¿Qué pasa Chaeyoung? — Le pregunté después de quejarme por  la interrupción de mi sueño. 

— ¿No lo recuerdas? — Preguntó un poco molesta. Negué mientras tallaba mis ojos, intentando no quedarme dormida de nuevo. 

— Ni siquiera ha salido el sol — murmuré. 

— Dahyun, nuestro concierto es hoy — me dijo Tzuyu al ver que Chaeyoung había perdido su poca paciencia de la mañana. 

Sabía que había olvidado algo.
No soy el tipo de persona que olvida sus compromisos; y menos si son tan importantes, sin embargo, en los últimos días lo único, o mejor dicho, la única que ocupaba mi mente era Momo-unnie. 

Me levanté con mucha dificultad de mi cama, mientras Tzuyu y Chaeyoung salían de la habitación. Me estiré al ponerme de pie y caminé hasta el baño para hacer mi rutina de higiene.

En cuanto salí del baño, caminé por el pasillo escuchando a lo lejos la voz de manager-unnie. 

— Dahyun-ssi, de nuevo tarde, debes ser más responsable con tus horarios — me llamó la atención manager-unnie en cuanto logró verme. Me disculpé con ella con una reverencia antes de seguir a las demás chicas hasta los autos. 

[...]

Más rápido de lo que pensé, llegamos a la arena en donde sería el concierto, todas bajamos de nuestros respectivos autos y comenzamos a caminar hacia adentro. 

El clima de la mañana estaba muy frío. Estaba envuelta con una de las mantas que nuestro manager dejaba en el auto. 

Sana-unnie, que estaba en un auto diferente al mío, corrió hasta mi lado y me abrazó. 

— Te ves tan linda, y estás tan calentita — dijo con una sonrisa. Me quejé, intentando huir de sus brazos. 

Sana comenzó a reír ante mis torpes intentos de escapar de sus brazos y corrió dejándome atrás. ¿Cómo podía tener tanta energía por la mañana?

Momo-unnie caminó a mi lado, bostezó mientras se tallaba los ojos.

— Buenos días Dahyun-ah — me saludó mientras me ofrecía una linda sonrisa, sus grandes ojos marrones adormilados y su cabello ligeramente despeinado solo hicieron que mi corazón se acelerara. 

Fui incapaz de contestarle, me perdí en lo hermosa que era.

— Hace frío, vamos adentro — dijo mientras entrelazaba nuestros brazos.

Me sentí aliviada al sentirla cerca. A pesar de que le había confesado todo lo que sentía ella seguía conmigo.

¿Algún día podré gustarle?

[...]

Habíamos ensayado todo el concierto. Estábamos agotadas sin embargo, teníamos que medir tiempos, probar sonido y luces, entre otras cosas más.

Todo tenía que salir lo más perfecto posible.

— ¿De nuevo? — Gritó Jihyo con una mirada enojada hacia Nayeon-unnie.

Nayeon sonrió en disculpa.

— Esta es la quinta vez que te equivocas de lugar — se quejó Jeongyeon.

— Ya — se quejó Nayeon —. Lo haré bien esta vez.

No culpaba a Nayeon-unnie por equivocarse, era normal, después de todo hemos estado ensayando desde muy temprano.