32. Animada actividad

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Tomo mi miembro y lo coloco en su entrada. Lentamente entro en ella mientras se aferra a mi espalda. Está tan mojada, que eso mismo sirve como lubricante y hacer las cosas más fáciles.

Le doy un pequeño beso y empiezo a mover despacio, sin prisa, solo disfrutando el momento. Mis embestidas se vuelven más rápido, y la escucho ahogar varios gemidos.

—Más rápido. Dios, así, christopher.

Sabía que estaba alcanzando el climax, así que me moví más rápido. Yo también estaba a punto de llegar al famosísimo orgasmo como muchos los llamaban.

—No puedo más. Voy a explotar.

Ella fue la primera en venirse, yo la embestí un par de veces más, hasta que la llene de ese líquido caliente.

Pegue mi frente con la suya, aún sin salir de ella. Nuestras respiraciones estaban entrecortadas.

—Eso a sido... a estado... Increíblemente bien —murmura ella.

—Y apenas estamos comenzando— susurré sobre su boca.

Salí de ella y me acosté a su lado. Creo que nunca había tenido el mejor sexo que esté. De hecho, con ella se sentía tan bien follar.

Perdí las horas entrando y saliendo de ella en repetidas ocasiones, algo que me hace sentir especial es que ella me demuestra con sus gestos que se está sintiendo bien y eso es lo importante

En la madrugada, cuando terminamos nuestra animada actividad, ella se quedó dormida al instante, pero yo preferí bajar al comedor a recoger un poco el desastre

Más que el desastre principalmente la ropa interior de mi pandita, los de seguridad llegan muy en la mañana y no deseo que se deleiten con las bragas de ella

Para mí sorpresa no estaba solo en la cocina, mi hermana estaba ahí también, con pinta de venir llegando de una buena fiesta

—Buenas noches, ¿O debería decir buenos días?- digo al entrar de lleno a la cocina
—Chris- me mira y veo completamente su rostro, sus ojos llorosos inundan mi vista- perdón por llegar tarde, no era mi intención
—¿Estás bien?- pregunto al ver su semblante
—estoy bien, solo que no quiero hablar de ello- toma un trago de la botella de vino en su mano
—se perfectamente que quizás no eh sido el mejor hermano, que eh concentrado mi vida en muchas cosas, y que no eh demostrado lo mucho que me importas, pero aquí estoy para ti, te quiero

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