Reencuentro

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Al rompérsele el corazón las personas actúan de deferentes maneras. Algunas lloraran hasta quedarse secos. Otras beberán en algún bar hasta perderse por completo. Otras tal ves llenen ese vació con otra persona.

WanNing lidio con ese dolor de manera diferente a cuando era un estudiante. Al rompérsele el corazón cuando vio a Mo Ran y Shi Mei agarrados de las manos derramó unas cuantas lágrimas. Después de eso huyo de todo. Si no lo veía no existía era su pensamiento peor aún si no pensaba en ello eventualmente dejaría de doler¿Verdad?. Durante ese tiempo pasó sus vacaciones muy desanimado pero procuro que nadie lo notara. Cuando su padre le sugirió que podrían irse de vacaciones como lo habían hecho un año antes e ir a algún lugar cerca de la playa WanNig dijo que ya no podia pues había conseguido donde hacer prácticas. No necesitaba de esas vacaciones, estaba completamente seguro. Si se quedaba quieto todo el tiempo al final terminaría pensando en Mo Ran. Solo deseaba deshacerse de todo sentimiento relacionado a esa persona. Por supuesto al final no lo logro.
Lo que si logro con esa contención de sus emociones fue el que pronto todo sentimiento se desdibujara. Era como esos pinceles que cuando los usas están llenos de color y pintan hermosas obras. Después de utilizarlos los llevas a un recipiente donde puedes enjuagarlos. El color se va desvaneciendo poco a poco. Así paso con el corazón de Chu WanNing sus sentimientos eran como ese recipiente de agua. Los colores se iban desvaneciendo a medida que se iba desgastando el agua, al final solo quedaba el gris sin vida en lugar de los colores vibrantes.
Ahora oyendo a la señorita Song y todo lo que le habia contado solo se quedó muy pensativo antes de volver a trabajar. Si había algo que hacer siempre ¿No dolería tanto no es así?

Como alguien frío por naturaleza nadie sospechaba que el impresionante e imponente jefe de departamento Chu WanNing justo en ese momento estaba con el corazón roto una vez más. Seguía con su rendimiento habitual. Incluso su padre quien era el más cercano a el no se entero de nada cuando lo visito dos días después. Solo en la noche cuando dormía tenia una cierta pesadilla. Nada demasiado horrible. Solo era él caminando por el sendero de la universidad que daba a los árboles de flores haitang, el último día de escuela. Veía a alguien de espaldas. Lo reconocía y mientras seguía caminando parecía que nunca alcanzaría a esa persona, queria gritar su nombre, queria tocarlo pero su voz jamás salia de su garganta, el aire le comenzaba a faltar y de pronto todo se obscurecia mientras en sus oidos se podia oir el viento soplando ferozmente mientras las hojas de los arboles se agitaban dejando caer interminables flores que al llegar al suelo ya estaban secas. Cuando Chu WanNing se despertaba una sensación de malestar se quedaba con el por un buen rato mientras el sudor frio se acumulaba en su frente. Este sueño no lo abandono por mucho, mucho tiempo.

Una mañana estaba trabajando como un loco en su oficina. Estaba tan concentrado que cuando sonó el teléfono dio un pequeño respingo. Resulta que hace unos días la mujer que trabajaba con él se había jubilado. Era una mujer mayor y muy amable, como era demasiado dulce y dedicada pronto se adecuó al nivel de trabajo de Chu WanNing. A él le agradaba la anciana. A diferencia de los jóvenes que trabajaban ahí era más sensata. Era tranquila y no se dejaba intimidar por los imprevistos. Era una lástima que ya estuviera demasiado cansada para seguir trabajando. Cuando sus hijos le ofrecieron vivir cerca de la playa junto con ellos y sus nietos la mujer no lo pensó dos veces, le dio las gracias a WanNing y le regaló una caja repleta de pequeños pasteles que por supuesto WanNing se devoro en un solo día.

Al responder la llamada de hace un rato resultó que era su jefa, Ye WangXi. La jefa Ye era una mujer joven y amable además de fuerte y competitiva. Le llamo con el motivo de conocer al nuevo personal que trabajaría con ellos. Antes de colgar le dijo que aun no llegaban por lo que la reunión  con todo el equipo sería a las 10 am.

Como de costumbre Chu WanNing llego cinco minutos antes a la sala de juntas. Se sentó en el asiento más cercano a la gran ventana de la sala en la cual podian pasar las corrientes de aire y la luz. Estaba sentado con las piernas cruzadas y sus hermosas y blancas manos entrelazadas descansando ligeramente sobre sus rodillas. Era la imagen de la pulcritud. Pero mientras otros veían a WanNing como alguien distante y serio en realidad tenía una naturaleza bastante amable, debajo de toda esa frialdad también se escondía un alma en extremo romántica. Mientras todos creían que actuaba altivo y frío el miraba pensativo por la ventana los árboles de alrededor. Resulta que cerca de su edificio había crécido un majestuoso árbol de flores amarillas. El aroma de las flores era bastante agradable. En primavera cuando el ambiente era demasiado bueno las mariposas se amontonaban en ese árbol por lo que la vista era hermosa. Chu WanNing estaba observando como dos mariposas blancas volaban alrededor de una de las exuberantes flores, el viento golpeaba amablemente su rostro y el dulce aroma de las flores inundó sus sentidos. Realmente ese era el ambiente propicio para que el amor floreciera. Lastima pensó, que para el ese sería un escenario bastante improbable. Pero admirar la naturaleza estaba bien. 

Notas de ColoresDonde viven las historias. Descúbrelo ahora