Un Nuevo Comienzo ~ Soukoku

Capítulo XV

- mamá ¿estas dormido? -

El sol se asomaba por la delgada cortina blanca que cubría la ventana iluminando la angosta habitación, habían pasado tan solo un par de minutos desde que la pequeña azabache despertó y aunque no quería molestar a su madre, pues entendía que se encontraba cansado tras jugar con ella todo el día anterior, no podía esperar más tiempo pues su estómago no dejaba de sonar.

- mamá tengo hambre - repitió demasiado cerca de su rostro consiguiendo finalmente que lo escuchará.

-¿tienes hambre? ¿que hora es? Iván no debe tardar con el desayuno - continuaba tan adormilado que había olvidado por completo donde se encontraban, abrazando una almohada intentando volver a conciliar el sueño.

- mamá estamos con los detectives, Iván no está aquí -repitió en voz baja levantándose de la cama sin soltar su peluche.

- ¿detectives? - finalmente recordó, lo que paso con Fyodor y como término bajo el supuesto cuidado de los detectives - tienes razón, lo siento tesoro... dame un minuto y vemos que podemos desayunar ¿te parece bien? -

La menor solo asintió mientras se ponía el lindo vestido que le habían prestado el día anterior.

- mamá ¿crees que podamos salir a pasear? es aburrido aquí-

- si lo se pero no creo que podamos- se levantó con pereza volviendo a sentir dolor en su estómago, fue un martirio pasar la noche, las náuseas, antojos, el no poder estar cómodo en una cama individual aunque sabía que era normal por su embarazo, llevo su diestra sobre su aún vientre plano, estaba feliz por la noticia a pesar de las circunstancias en las que se encontraba.

- mamá ¿te duele? también te sentías muy mal cuando estábamos con papá ¿verdad?-

Ella tenía razón, como no se percató antes, los síntomas los tenía desde hace tres semanas atrás, estuvo tan ansioso que no se preocupó por si mismo ni un segundo.

- estoy bien cariño no te preocupes -

Término de vestirse con las prendas que le entregaron el día anterior, lavo su rostro y ayudó a su hija a hacerlo, cepillo su largo cabello y lo ato en una media coleta.

-¿como me veo mamá? - retrocedió un par de pasos para dar una vuelta que provocó que los olanes del vestido se levantaran.

- te ves preciosa mi niña- se inclinó a su altura para abrazarla con cariño - vamos hay que desayunar -

Una vez todo estaba listo salieron de la enfermería notando que la mayoría de los agentes ya se encontraban presentes, el trato de parte de ellos era el mismo que el del día anterior, no los trataban con hostilidad, eran amables, se preocupaban por ellos, más sobre su estado de salud y él aún no podía entender porque eran así si son enemigos.

- Buenos días -

- Chuuya me preguntaba cuando iban a despertar- el castaño fue el primero en llamar su atención con ese tono de voz dulce e infantil, no le agradaba pero al mismo tiempo en su interior sabía que era mejor estar a su lado- compre café para ti y un licuado para Anya, Hikari paso antes de ir a la escuela y te trajo un par de emparedados y si quieres algo más podemos ir a la cafetería del primer piso -

- eh... gracias -

- yo traje galletas para Anya chan- Naomi saco una caja de tamaño mediano de una bolsa que tenía su hermano antes de entregársela - las hice anoche, espero les gusten- la sonrisa que reflejaba era tan sincera, sin pizca de maldad que el ex mafioso no dudó en aceptarlas

- ¿galletas? yo también quiero galletas - habló un segundo castaño desde el otro extremo den la habitación

- Rampo san ya se comió las que Naomi chan le dio -