LA RARA. | Wandanat. ©

Capitulo 16

Al ver el rostro de Wanda, Natasha notó inmediatamente lo que pasaba. La había vuelto a cagar. ¿Cuántas veces tendría que arruinar las cosas con Wanda?

— No es nada. — Natasha retrocedió rápidamente, mirando a Wanda por el rabillo del ojo. Estaba sacudiendo la cabeza y murmurando para sí misma mientras Pietro la estudiaba.

— No, dime. — insistió Pietro, impidiéndole salir. — ¿Qué quieres decir con 'apuesta'? ¿Es este otro secreto, Wanda? ¡Puedes confiar en mí, lo juro! ¡Somos gemelos! 

—¡Si, somos gemelos! Sí, está bien, nacimos el mismo día de la misma madre aproximadamente al mismo tiempo, pero ¿cómo se traduce eso en una cuestión de confianza? No te lo voy a decir. — espetó Wanda con firmeza.

Y de repente, las palabras se escaparon de la boca de Natasha.

— La usé. — Decirlo en voz alta lo hizo parecer peor.

— ¿Qué quieres decir? — preguntó Pietro y Natasha tragó saliva.

— La usé. Por dinero. La llevé a una fiesta para poder ganar algo de dinero. — todo esto hizo que Natasha pareciera una especie de villana y eso lo odiaba.

Pietro retrocedió con disgusto ante sus palabras.

— ¿Y ella desperdició su primer beso contigo? — Pietro escupió con el ceño fruncido antes de darse cuenta de lo que acababa de decir. — ¡Wanda, lo siento, no fué mi intención!

Natasha parpadeó en estado de shock. ¿Wanda nunca había sido besada por alguien más antes que ella? ¿Natasha le había quitado su primer beso? No... no había querido hacerlo, en absoluto. Si hubiera sabido las circunstancias, nunca la habría besado.

— ¿S-soy tu primer beso?

— Sólo déjenme en paz. — murmuró ella, mirando hacia abajo, incapaz de mirarlos a los ojos. — ¿Dónde está el baño?

Natasha señaló en la dirección correcta y ella comenzó a caminar, con la cabeza gacha.

Cuando Wanda cerró la puerta del baño Natasha entendió lo que tenía que hacer.

— No, no más errores. — murmuró para sí misma.

Natasha se volvió hacia Pietro que todavía parecía horrorizado por revelar el secreto de su hermana.

— ¿Tienes una horquilla para el cabello?

Pietro asintió frunciendo el ceño tomando el bolso de su madre para buscar entre sus cosas y entregarle la horquilla a Natasha.

— Ten.

— Está bien, sé que esto parece horrible y lo es. Pero quiero hacer las cosas bien, créeme. Así que por favor cúbreme con nuestros padres, volveré enseguida.

Antes de que Pietro pudiera protestar Natasha corrió en dirección al baño.

(...)

En lo que logró abrir la puerta del baño cerró detrás de ella, viendo a Wanda en el suelo. De repente sintió un deja vu al saber que ya habían pasado por ésta situación antes.

Wanda estaba con los ojos cerrados y los brazos cruzados. Para ser honesta, ya ni siquiera parecía molesta. Solo un poco enojada. Sabía que Natasha estaba allí, pero no hizo ningún movimiento para reconocerla. Natasha se cruzó de brazos y se apoyó contra la puerta, un poco para evitar que ella también se fuera.

— Fui tu primer beso. — soltó finalmente.

— Sí, lo fuiste.

Natasha suspiró.