Borró Cassette | Jenlisa

Capítulo 1

Pov Lisa [⛓️]

Coloqué el ramo de rosas junto a aquel libro clásico que había decorado de manera que el papel resaltara uno de los mejores versos escritos por Emily Dickinson; "Divide la alondra". Si bien no es mi poema preferido de la autora, sé que es el favorito de ella y es la razón por la cual lo elegí para esta ocasión tan especial.

¡Sólo Dios sabe lo emocionada que me encuentro ahora!

¿Qué ocurrirá cuando por fin escuche mis plegarias de amor?

¿Cómo sabrán sus labios en los míos? 

Reí para mis adentros.

Siempre he tenido ese presentimiento de que su boca sabe a fresa o algún sabor fresco como el verano y que la carnosidad de sus labios es tan suave como la noche larga cuando se llena de estrellas y silbidos hechos por el viento.

Creo que me declaro culpable por generar para mí misma expectativas tan altas sobre sus besos, se supone que es algo que el mundo o la sociedad en general te recrimina por hacer. 

"No tengas altas expectativas porque puedes decepcionarte" solía escuchar de la boca de los demás, pero sé que yo no correré ese riesgo.

¡Por Dios! ¡Estamos hablando de la mismísima Jennie Kim!

¡Claro que mis expectativas se encuentran en el cielo cuando se trata de ella!

En la curvilínea de mis labios se esculpió una enorme sonrisa al ver el resultado final de mi arduo trabajo decorando el lugar.

Todo está listo.

Me siento lista.

—¡Lili! —escuché su grito lejano y la felicidad de mi pecho incrementó a un grado tan alto que mi corazón no hacía más que latir desbocado golpeando las paredes de mis costillas una y otra vez.

Si mi corazón sigue así hay una alta probabilidad que mi cuerpo no aguante más y fallezca de un repentino paro cardíaco. No sería la primera vez que le ocurre a alguien, pero la diferencia entre ellos y yo será que en la piedra de mi lápida habrían esculpido con letras grandes y legibles: "Murió por culpa de Jennie Kim" y; aunque parezca irónico, me seguiría sintiendo agradecida e incluso halagada de que así fuera mi muerte.

Todo lo que lleve su nombre me parecerá siempre lo más hermoso y gratificante del mundo, como si de la mismísima gloria estuviéramos hablando.

Jennie Kim... 

Nueve letras que, para cualquiera, pueden parecer insignificantes en el abismo profundo al cual llamamos vida, sin embargo, para mí esas nueve letras han definido mi comportamiento, le han puesto freno al mundo a mi alrededor y le ha dado cuerda al reloj de mi corazón. 

Ella es la única persona en este universo que logra poner mis nervios en caída libre y la única que consigue que mi corazón lata tan rápido y perdido tal como un barco en el abierto mar a la deriva.

—¡Aquí estoy, Nini! —grité de vuelta llena de ilusión.

"¡Vamos, Lisa! Tú puedes hacer esto, no tengas miedo" me apoyó la pequeña voz escondida en la corteza cerebral de mi cabeza.  

¿Miedo? 

¿Por qué habría de tener miedo? Todo saldrá bien.

Entre los árboles del bosque apareció la figura de una mujer joven corriendo entre los troncos largos, avanzando más y más rápido hasta mi encuentro. La imagen que recibían mis ojos de la realidad que transcurría era borrosa debido a la lejanía de la mujer.