CAPITULO 7: A LA UNA... A LAS DOS... Y A LAS.. TRES

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CAPITULO 7 : A LA UNA... A LAS DOS... Y A LAS ...TRES


***NARRA MAC***

Me quiere, me quiere, ha dicho que me quiere, os lo podéis creer, me quiere, dios mío no puedo ser más feliz en este momento, ¿y sabéis porque?, porque yo también le quiero, y tenía miedo a que yo fuera demasiado rápido, pero no, porque él también me quiere, y porque esto muy feliz.

Ayer cuando se marchó del restaurante, aparte de que me quede muy impresionante cuando se fue, también me quede pensando, sé que se había enfadado por mentirle, pero no sabía cómo decírselo, al fin lo hice, y no salió tan mal como yo lo había previsto, al final me dijo que me quería, pero bueno cuando me quede sola me di cuenta que estaba más que enamorada de él que de otra persona, y suena extraño, pero me he dado cuenta que lo quiero en mi futuro, quiero verlo envejecer conmigo, y que mis hijos , lo llamen papa, dios pero que ñoña soy, pero me da igual, por el soy así de ñoña.

Después de la declaración de amor, nos quedamos tumbados en la cama besándonos un rato, al final, Doble a se quedó durmiendo en mi pecho, pero yo no pude, estaba demasiado contenta de lo que me había dicho que no podía coger el sueño, así que estaba acariciando la espalda y el pelo de Doble a, este, había caído en un sueño bastante pesado, no lograba despertarlo, y cuando lo intentaba, este se removía, y se acurrucaba más. 

Estaba casi cogiendo el sueño, cuando escuche, la puerta de la casa, abrí un poco más los ojos, y me di cuenta que la madre de Doble a, Noah, estaba en la puerta mirándonos, iba a abrir la boca cuando le hice un gesto de silencio, esta sintió, y entro a la habitación, saco una manta, y nos la coloco encima de los dos, se giró y cuando iba a salir, nos volvió a mirar, y sonrió, sé que ella y mi madre, están muy felices sobre lo nuestro, aunque sé que tienen miedo de que esto no salga bien, y tengan que romper su amistad, o sus negocios en el caso de nuestro padres.

(A la mañana siguiente)

Me despierto con un gritos, y unas risas de alegría, bueno y también unos gruñidos, pero esos gruñidos me los conozco a la perfección, son de mi hombre, que tiene su cabeza, metida en el hueco de mi cuello, ya decía yo que alguien me estaba soplando el cuello.

Abro un ojo, y me doy cuenta de donde proceden las risas y los gritos, y la causa de los gruñidos de mi chico, y es que los hermanos pequeños de Doble a , han entrado en la habitación, y se han tirado encima de su hermano, y me extraña que no me hayan chafado a mi también, porque Doble a y yo estamos , muy, pero que muy pegados, puedo sentir todo su esplendor en la parte baja de espalda, me giro un poco, sobre los brazos de Doble a , y sonrió cuando veo las cabezas de sus hermanos, les sonrió, y estos me sonríen a mí.

-buenos días chicos- les digo, y estos me miran y se ríen, seguro que no se acuerdan de mí.

-buenos días, Mackenzie- me dicen los dos pequeños a la vez, pues mira tú, sí que se acuerdan de mí, yo de ellos también, pero cuando me fui eran bastante más pequeños, bueno solo dos o tres años.

Miro a su hermano, y este aún está dormido, y agarrado a mí, ¿pero este hombre es que no despertaba con nadie o qué?, pero se me ha ocurrido una manera de levantarlo, espero que sus hermanos me ayuden.

-¿queréis que despertemos a vuestro hermano de una forma diferente?- le digo a sus hermanos, estos asienten sonriendo, sé que me los acabo de meter en el bolsillo.

Les explico de que va el plan, y los dos asienten, creo que lo han entendido, así que veo como salen de la habitación, y al rato, cuando intento separarme un poco de Doble a, este me suelta un poco, y es ahí cuando me doy cuenta de que sus hermanos ya han vuelto con todo lo que les he pedido, y sonriendo.

Vamos nena sabes que somos perfectosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora