RIVALRY [SOPE]

16

Enero de 2017-Tampa Bay

Hoseok estaba nervioso. Después de seis temporadas y media, estaba acostumbrado a su con alguien sobre su... posible preferencia. O tal vez fue por la forma extraña en que dejaron las cosas la última jodido arreglo con Yoongi, pero ahora algo se sentía diferente. Tal vez fue porque finalmente había hablado en voz alta vez que él y Yoongi estuvieron juntos, en el apartamento de este. O tal vez Hoseok se sentía más seguro de lo que quería ahora, después de alejarse de una relación que había sido casi perfecta.

Casi.

Él quería ver Yoongi este fin de semana. Quería estar con él, solo, a puerta cerrada; estaba cansado de mentirse a sí mismo al respecto.

Este año, finalmente, Hoseok sabría lo que se siente jugar con Min Yoongi. Seis All-Star Games y esta fue la primera vez que los habían puesto en el mismo equipo. Las lesiones y los arreglos extraños y engañosos del equipo que la liga seguía ideando habían impedido que sucediera antes.

No era el único que estaba emocionado de que él fuera el compañero de equipo de Yoongi. La prensa estaba teniendo un festín escribiendo sobre este evento monumental donde Hoseok y Yoongi tendrían que dejar de lado su supuesta animosidad y aprender a trabajar juntos. ¿Será posible siquiera? Se preguntaban.

Hoseok sonrió para sí mismo mientras colgaba su traje en el armario de la habitación del hotel.

Si tan solo supieran.

Pero, a decir verdad, si tan solo él supiera lo que Yoongi estaba pensando en estos días. No estaba seguro de si quería terminar las cosas o si quería llevar las cosas más lejos. Realmente no tenía idea de qué esperar de su compañero temporal de equipo este fin de semana.

Echó un vistazo a su reloj. La reunión del equipo, en la planta baja, comenzaba en unos minutos.

Hoseok dejó escapar un suspiro y luego se miró en el espejo.

Hagamos esto.

***

Yoongi no le había enviado un mensaje de texto a Hoseok en más de dos meses.

No es que se hubieran contactado con regularidad antes, pero este silencio había sido particularmente ensordecedor. Las últimas semanas habían sido la primera vez que Yoongi estaba seguro de que, si le enviaba un mensaje de texto, Hoseok no respondería.

Hoseok probablemente le mostraría el texto a su novia estrella de cine, y se reirían de lo patético que era Yoongi.

No. Eso no sucedería. Por supuesto que Hoseok no haría eso. Quizás.

Yoongi buscó a tientas el paquete de chicle de nicotina del bolsillo y se metió un trozo en la boca. ¿Hoseok había traído a su novia al fin de semana All-Star? ¿Le presentaría a Yoongi?

Dios.

Yoongi se quedó sin tiempo para preocuparse, porque en ese momento, Hoseok entró al bar. Cada cabeza se volvió. Algunos tipos hasta se pusieron de pie, por el amor de Dios.

Yoongi se inclinó contra la barra y vio a Hoseok estrechar la mano y golpear a los chicos en la espalda. Lo vio sonreír y reír con todos. Se veía relajado y confiado, como un hombre que ha arreglado su vida. Como un hombre que ya no se cuestiona a sí mismo. Él lucía...

Dios, lucía tan jodidamente bien.

Quizás Eun Bi lo había llevado de compras o algo así. De repente se vestía como el millonario que era. Llevaba una camisa blanca de lino abotonada, abierta en el cuello y con las mangas arremangadas. Ellos estaban en Florida, después de todo. Estaba metido en unos pantalones azul pizarra que le quedaban perfectamente. El atuendo terminó con un cinturón tejido y unas elegantes zapatillas grises sin calcetines.