Capítulo 12

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-¿quien eres?-a pesar de su situación Eris mantenía un tono calmado aunque por dentro tenía algo de miedo también tenía curiosidad por saber quién era aquel hombre.

El pelinegro no respondió y solo la miro con curiosidad.Eris cansada del silencio formado entre los dos hablo-si no vas a decir nada me voy a ir-dijo con un claro enojo empujó al pelinegro y miro la pared detrás de ella la cual lucía normal.

Tocó la pared en busca de algún interruptor o algo para voltearla pues era la única solución que había en su mente pero no encontró nada.

-mierda!-dijo con rabia al ver que no funcionaba fulmino con la mirada al pelinegro quién parecía en Belén con los pastores (termino de mi país para decir que esta distraído).

Enojada lo golpeó en la cara al mismo tiempo un aura oscura surgía de ella haciendo que el miedo por no salir se transformará en Rabia.

-hijo de puta abre esta estúpida puerta sino te mato-vio que había una armadura con una espada con una gran rapidez tomo la espada y apunto al cuello del desconocido.

Pero el ni se inmutó, enojada Eris lo apuñaló en el pecho pero....no salia sangre en su lugar salía un oscuro líquido similar al lodo así lo pensó ella.las gotas del mismo al caer al suelo se convertían en gemas negras que desprendían un olor similar al de un cadaver en descomposición.

Lo sabía pues en su segunda vida como Eris sin recordar nada de la primera había matado a tanta gente que aún podía oler el asqueroso olor de la carne humana descompuesta.

El hombre se levantó tomo la espada de la parte del filo y con su mano la rompió en miles de pedazos.

Petrificada así se quedó Eris nunca había visto algo así ni siquiera en sus sueños o pesadillas lo hubiera imaginado.

Uno de los fragmentos de la espada fue recogido por el hombre este se acercó,tomo el brazo de Eris y le clavó el fragmento cortándole el brazo y con jeringa le saco la sangre a la vez que la sangre que quedó en el fragmento la lamía de una manera realmente

Pero... Sucedió una explosión.

La pared de atrás fue destruida por alguien ese alguien era el duque.

Eso fue algo inesperado incluso por el pelinegro que salió corriendo pero una especie de alambres que provenían del duque lo impidieron.

-maldita rata-le dijo con Ascó, el desconocido aunque parecía no inmutarse la verdad se encontraba nervioso si Edward no hubiese venido posiblemente hubiera terminado de hacerle otras cosas no muy agradables a Eris.

-¿desde cuando te preocupa ella? Dime ahora la quieres porque se parece a Esme.

Al escuchar aquel nombre apretó los puños sus uñas se clavaron tanto al punto de salirle sangre lo miro con odio un odio que parecía que lo mataría en cualquier momento.

Pero no podía,pensó con resentimiento y odio observando el tatuaje en su hombro el tatuaje tenía forma de candado del mismo salían los alambres con los que atrapó al pelinegro cuyos ojos si se veían mejor se podía notar un leve parecido con los suyos.

Lo odiaba con todo su ser y aunque podía matarlo si quisiera no lo hizo.

Después de todo le prometió a Anastasia criarlo aunque no fuera hijo suyo.

Se podía observar a una joven de 15 años dando a luz está estaba gritando de dolor pues no había nadie que atendiera el parto aunque su esposo estaba hay la ignoraba.

Era normal ningún esposo querría al hijo producto de una infidelidad o en este caso de una violación.

Anastasia habia sido secuestrada hacia 7 meses donde fue brutalmente abusada de ese abuso quedó embarazada el duque al enterarse intento matarla pero no pudo pues su amor por ella era demasiado.

Por lo que cuando capturaron a quienes abusaron de ella el duque al descubrir lo que le hicieron sintió irá y vergüenza por lo que dijo que encontró a Anastasia muerta.

Si todos se enteraban la reputación de la joven caería para abajo, Edward no quería eso ya que pese a su ira y el sentimiento de traición que sentía la ocultó del resto del mundo.

Aunque había sufrido mucho Anastasia no quería abortar pues sentía que aquel ser dentro de ella era inocente eso sí sabía que su cuerpo era demasiado débil por lo que posiblemente moriría en el parto.

Y así paso dio a luz y con su último respiro le dio como nombre al niño

-Astaroth

Después de su muerte Astaroth fue escondido en la mansión de los Arabelle nadie sabía de su existencia a excepción del duque y Reginald quién era el único de confianza para el.

La vida de Astaroth se basaba en estar encadenado,comer,dormir y hacer sus necesidades eso era todo.

Hasta que Catalina lo descubrió.

Dejando esos recuerdos de lado Edward llevo a Astaroth arrastrándolo hasta llegar a una celda donde lo encerró.

-si vuelves a tocarla eres hombre muerto.

-oh esto me trae recuerdos como cuando conocí a Esme me dijiste exactamente las mismas palabras ¿Que divertido no?.

Edward lo miro con desdén estaba apunto de golpearlo pero se detuvo-¿No vas a golpear me? Tanto te has ablandado?-dijo con burla pero Edward no respondió y simplemente se fue.

-tch aburrido ya veo porque Esme me prefería a mi pero no puedo decir lo mismo de madre.

Lo recordaba bien esos ojos verdes que lo miraban con amabilidad y afecto pero a la vez con resentimiento como si deseara que no hubiese nacido.

-astaroth-esa voz tan gentil y a la vez cansada deseaba escucharla un poco más pero era imposible pues no le quedaba mucho tiempo de vida y acabo marchitandose.

En cambio ella lo miraba con afecto y con su cálida voz dijo....

-no te dejaré solo.

Pero eso fue una promesa vacía pues al igual que con su madre ella se marchito la rosa que resplandecía sin importar que terminó marchitandose sin luz alguna.

Sacudió la cabeza dejando eso de lado la partida de Esmeralda le seguía afectando más de lo que creía pero ya era hora de olvidarla.

Pues había encontrado el reemplazo perfecto en su hija.






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