Naraku es un ser despiadado y cruel pero extremadamente inteligente, aquél ser había devastado los pueblos enteros que se encontraban cerca de un castillo.
Un castillo que prontamente conquistó acabando con los guardias ,sirvientes y nobles, dejando...
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"Hermano las flores de cerezo son muy bonitas, espero algún día vivir rodeada de flores"
-Rui-
Las únicas flores de las que pudo ser rodeada fueron las de su tumba, Rui murió a una edad muy joven sin siquiera asumir su lugar como la protectora de la perla de Shikon.
Onigumo se había quedado solo en este mundo, la única persona a la que pudo llamar familia estaba enterrada bajo el frio suelo.
Apretó el amuleto amamori en su pecho, estaba completamente perdido, su tristeza fue ahogada en alcohol pues esa era la única de verla sin importar que fuera una ilusión ,la veía sonreírle y hablar con el.
Días después abandono aquella aldea que le recordaba tanto a Rui , tiempo después se unió a unos bandidos, robando y saqueando era la forma de conseguir lo que deseara.
Pero allí estaban nuevamente los recuerdo de su amable hermana de nuevo, y es que Xue le recordaba a su difunta hermana con la que vivió parte de su vida.
Ella estaba atrapada en este lugar con el, pero eso no parecía importarle, esta chica comía con tranquilidad a su lado, esta criatura tan pequeña y frágil se sentía cómoda con él, ni siquiera sabe quien es Naraku en verdad, o lo que a hecho de su vida.
En su vida como Yokai jamás se permitió conservar a un humano durante mucho tiempo, algunos tenían aromas desagradables pero ella no, su aroma era bueno y tentador.
Esa noche en la que ella enfermo él le dio a beber la medicina así probando esos labios rosados como melocotón, incluso volvería hacerlo nuevamente para probarla, ella era su esposa, la única y la primera.
Ella estaba sentada frente a el comiendo y con las mejillas sonrojadas, había recuperado su color y estaba mejor de salud.
"Come, no quiero que mi esposa muera, aun te necesito" Dijo el.
"Y-Yo gracias por cuidar de mi"
Kagura le conto que Naraku cuido de su salud ,sin omitir la forma en que le dio el medicamento, escucho que algunos esposos hacían esto por sus esposas, además era la primera vez que alguien la trataba con mucho cuidado, estaba avergonzada y sus orejas estaban rojas de la vergüenza, tanto que no podía mirarlo a los ojos.
Naraku sonrió con diversión al verla tan tímida, había de admitir que esta mujer era adorable.
"Entonces mi esposa debe agradecerme correctamente"
"Como puedo hacerlo señor"
Xue era inocente e ignorante sobre los pensamientos del hombre, Naraku se levanto de su lugar y luego se sentó junto a ella.
"Cierra los ojos mujer, si los abres te castigare"
Xue asintió y cerro los ojos,Naraku acaricio rostro de la mujer, era suave y delicada, sus labios cubrieron los de ella,Xue abrió los ojos con sorpresa desobedeciendo las ordenes de Naraku , ella intento decir algo pero no la dejo, volvió a besarla pero esta vez introdujo su lengua.
Su lengua húmeda se deslizo entre sus labios ,chupando y lamiendo ,Xue no podía creer que este hombre le estuviera haciendo esto, esta era la segunda vez que Naraku tomaba sus labios.
Naraku dejo un momento los labios de Xue para después capturar suavemente el lóbulo de la oreja entre sus dientes, presionó sus pechos en sus manos.
"Mi señor por favor detente, se siente extraño"
Suplico ella, él la ignoro y siguió besando su cuello dejando algunas marcas.
"Esposa no hay nada de que avergonzarte, es normal hacer este tipo de cosas"
Cada vez que el tocaba su piel templaba, a pesar de la condición de la mujer ,ella era tentadora, quería ir mas halla y hundirse dentro de ella, deseoso de escucharla gemir bajo de el ,pero sabia que ella no soportaría debido a su salud.
"Te dije que no abrieras los ojos o te castigaría ,acaso debo pensar que estas seduciéndome"
"No de ninguna manera, no fue mi intención"
"Debo cuidar mas de ti, así la esposa me recompensara"
"No hace falta, estoy mucho mejor, ya puedo cuidarme sola"
Respondió rápidamente con el rostro enrojecido, no quería volver a estar atrapada en esta situación, su toque la hizo sentir extraña, muchas sensaciones extrañas envolvieron su cuerpo con cada beso que ella recibía de el.
El palacio, grandes riquezas y un esposa, todo esto era suyo, ella no tenia a nadie que la cuidara y protegiera, solo el mismo Naraku.
Hoy fue suficiente, no la molestaría más, probaría sus labios en otro momento, ordeno a los guardias y sirvientes de Xue llevarla a descansar, mientras el se ocuparía de otros asuntos que tenían que ver con los fragmentos de Shikon.
Naraku y Kagura abandonaron el palacio dejando a Xue bajo el cuidado de Kohaku, después de descansar despertó y vio que ya estaba oscuro, las lámparas iluminaron la oscura habitación.
Entonces alguien llamo a la puerta, una bella mujer entro a la habitación con un bebe en sus brazos.
"Si veo tu alma, tal vez sepa por que Naraku aun te mantiene con vida"
