Naraku es un ser despiadado y cruel pero extremadamente inteligente, aquél ser había devastado los pueblos enteros que se encontraban cerca de un castillo.
Un castillo que prontamente conquistó acabando con los guardias ,sirvientes y nobles, dejando...
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“Ante mi tengo la elección de ser parte de algo maravilloso, de ser recordado sin límites y de tener la felicidad que todos desean. Por eso mi amor no es duda y te eligió a ti desde antes de verte por primera vez.”
—Eva González—
《No quiero más interrupciones entre nosotros》
Naraku beso los labios de su esposa dormida, hoy devolvería los fragmentos de Shikon a Kikio con la finalidad de alejarlos y poder moverse silenciosamente a su nuevo castillo, donde no podrían molestarlos.
《Mis sentimientos egoístas crecen sin control, porque ahora que estas conmigo nuevamente》
Jugueteo con su cabello, admirándola como el ser más precioso que puede existir, su esposa estaba agotada por la implacable noche de pasión, él espeso aroma a sexo flotaba en la oscura habitación, Xue estaba envuelta en los brazos del hombre que la hizo perder la razón, desnuda y expuesta para una ronda más, la espalda de Naraku fue arañado por las princesa, un acto que lo lleno de excitación, podía curarse rápidamente pero decidió consérvalo y mostrarle lo bueno que fue el acto sexual entre ellos, seguramente Xue estaria avergonzada y trataría de esconder su rostro, todas sus reacciones cada vez que se miran a los ojos son sumamente adorables, Xue estaba demorando en despertar muy pronto Kikio volveria al castillo por los fragmentos, ordeno a sus sirvientes traer agua y algunas toallas para limpiar el cuerpo de su esposa.
Xue sintió algo recorrer su piel, abrió los ojos encontrándose con su marido, él estaba limpiando el sudor de su cuerpo, el Yokai miro a su esposa ya despierta.
“Aun no termino de limpiarte”
Dijo él, aun con la toalla en sus manos recorrió los muslos de la princesa, abrió las piernas de su mujer exponiéndola para él, se lamio los labios mirando lujuriosamente el lugar secreto de la princesa.
“Aun estas muy mojada, te llene los suficiente anoche”
Sus gruesos dedos entraron en su entrada, entre mas frotaba dentro de ella más húmeda se ponía, aturdida por el creciente placer trato de alejarse,Naraku no se lo permitió, atrapo su cintura atrayéndola a su cuerpo, Xue se sobresalto al sentir su miembro frotándose contra ella.
“Si no fuera por ellos te tendría mucho más tiempo en mi cama, Xue como puedo detenerme si me mirar de manera adorable,
《Nunca podrás escapar de mi》
Xue gimió al sentirlo dentro nuevamente.
“Espera, no podemos hacerlo, tenemos invitados”.
“Ellos pueden esperar, yo no”
Naraku sonrió juguetonamente empujando su carne contra ella, sus cuerpos chocaban apasionadamente entre si mientras que sus invitados esperaban en la sala principal.
Estuvieron esperando más de una hora, incluso los sirvientes les sirvieron de comer mientras los amos salían de sus aposentos.
La puerta de la sala principal fueron abiertos dejando entrar solo al amo del castillo con una caja pequeña en sus manos.
“Lamento la demora, como prometí entregare los fragmentos de Shikon”
Naraku extendió la pequeña caja con los fragmentos entregándolo en las manos de Kikio.
“La princesa ¿Ella esta bien?”
Pregunto la sacerdotisa, le preocupaba que Xue estuviera triste por no volver a caminar.
“Lo esta, ella entiende que todo esto es por su bien, me asegurare de que sea feliz”
“Gracias, solo quería saber que ella no se sintiera mal”
“Xue es fuerte, sabremos vivir nuestras vidas, tal vez hagamos un viaje para animarla, a petición de mi esposa hemos preparado algunos regalos”
Xue insistió en dar algunos regalos a las tres mujeres, y para aquella niña humana que aun los acompañaba, a cada una se le entrego una caja de cosméticos lujosamente decorada, además de algunos kimonos, y orquídeas para el cabello, para la pequeña Rin tambien se le obsequio un cometa y un temari elaborado de preciosas telas para que la pequeña niña pudiera jugar, a Xue le gustaban los niños, quería que ella sonriera como lo había hecho en el festival y en el banquete.
“Esto es demasiado señor, como podríamos atrevernos a recibir tales obsequios”
Dijo Kagome, no sentía que hubiera hecho algo como para merecerlo.
“Mi esposa es generosa, no deben despreciar sus buenos deseos”
Kagome,Kikio y Sango no tuvieron opción más que aceptar los regalos de la amable princesa, por su parte Rin estaba muy feliz, esta es la primera vez que recibía un regalo de esta magnitud, la princesa era muy buena, le hubiera gustado verla una vez más y agradecer por su generosidad. Como prometieron y con los fragmentos en sus manos abandonaron el castillo dejando atrás a su gran enemigo, el los había engañado, nunca pudieron darse cuenta que convivieron con Naraku, y que ese ser tenia en su poder a la rencarnada Rui.
Naraku volvió a sus aposentos con una sonrisa en su rostro, al fin ellos se habían ido, comenzaría a mover toda su riqueza a su nuevo castillo escondido de los ojos humanos y de los Yokais, Observo a Xue dormir profundamente, no la molestaría, la dejaría descansar mientras se ocupaba de otros asuntos.
《No te preocupes, encontrare una forma para que vuelvas a caminar, duerme bien mi princesa》
Xue fue fuerte, soporto las lagrimas de tristeza cuando le fueron retirados los fragmentos, se había acostumbrado a caminar por si misma, entrañaría mucho correr por el jardín con libertad, Naraku le hizo una promesa de curarla, así que confiaría en él.
Muchas gracias queridas lectoras que han llegado hasta aquí, a partir de los siguientes capitulos se vienes sucesos importantes.🔥Se aproxima el caos.
