Capitulo 25

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El tiempo no se detiene y vuela cuando estas ocupado, en un abrir y cerrar de ojos había llegado el día del cumpleaños de Nirin y el estado de ánimo de Fluke no era el mejor, seguía estando abatido extrañando a su esposo muerto, deseando que estuviera a su lado para celebrar esos dulces momentos junto a sus hijos, su pequeña cumplía cuatro años y su papá no estaba con ella para celebrarlo, a veces se preguntaba si Nirin de verdad lo recordaba o solo lo extrañaba porque Aroon y él le hablaban de Teerapat.

Habían llegado al restaurante, era un lugar pequeño que estaba cerca de la estación de trenes, la cena de ese día iba a ser carne cocinada por ellos mismos, acompañada de verduras, la verdad es que tenían una variedad de alimentos y por lo menos una vez a la semana cuando no tenía clase de tutorías, Fluke se daba el lujo de pasar por allí y comprar la cena del día para llevar, y luego en casa se sentaba con sus niños en el suelo frente al televisor para degustar sus alimentos.

Esos días eran los favoritos de de Nirin y cuando se acercaron al restaurante ella salto de arriba abajo emocionada, tanto así que tiraba del brazo de Ohm constantemente.

—¡Si! ¡Comida sabrosa! ¿galleta también quiere comida sabrosa?, ¡Los amo! ¡Los amo!—. Definitivamente la niña estaba emocionada.

—Bueno parece que tenemos a una chica realmente alegre hoy—, dijo Kao caminando a la entrada del establecimiento en donde el dueño les dio la bienvenida.

—Ella sabe en dónde estamos y lo que le gusta—. Fluke se rió de las ocurrencias de su hija.

—¡Amo comida sabrosa!, ¡Comida sabrosa!—. Lograr sentarla en una de las sillas de la mesa fue todo un problema, estaba demasiado emocionada y no dejaba de rebotar en su asiento, pero eso acabo cuando Ohm se le acercó y le dijo que las niñas que se quedaban tranquilas recibían su comida sabrosa mucho más rápido.

Inmediatamente se dejó caer en su asiento con sus manos en el regazo, su cabello estaba alborotado de la emoción, sus coletas ya no estaban en su sitio, pero sin borrar la sonrisa de su rostro.

—Esta bien galleta me portare bien.

El castaño observó esa interacción con una sonrisa, estaba aliviado de que hubiera podido controlar a su hija pero igual se sentía un poco preocupado.

—¿Ahora eres todo un encantador de bebés?—, pregunto burlón Kao después de ver la manera en la que había controlado a la pequeña, pero solo se llevó una mala mirada de su amigo.

Ordenaron muchas cosas, tanto que Fluke estaba seguro de que iba a ser demasiada comida, se acomodaron en sus sillas esperando sus platillos, Nirin estaba muy emocionada no podía permanente tranquila en su sitio.

—Ella parece que va a explotar de emoción—. La señaló Kao cuando la pequeña colocaba sus manitas sobre su rostro y comenzaba hacer pucheros y pequeños ruidos con sus labios.

—Si estás alrededor de Nirin nunca habrá un momento aburrido—. Admitió el doncel colocando una mano en su rostro admirando la manera en la que su niña jugaba con todo lo que tenía a su alcance.

—Aquí, juguemos piedra, papel o tijera—. Se ofreció Ohm para tratar de tranquilizarla y que dejara de agarrar las cosas que estaban sobre la mesa.

—¡Yo también quiero jugar!—. Intervino Aroon que hasta ahora se había mantenido callado porque estaba entretenido con un libro nuevo que su papi le había dado.

Los tres comenzaron con el juego, Nirin se la estaba pasando muy bien haciendo las figuras del juego con su pequeña mano, celebraba cada vez que le ganaba a su hermano o a Ohm, unos minutos después una mesera se acercó con su bebidas y dio una sonrisa en dirección del pelinegro y la pequeña, aunque sus ojos se detuvieron más tiempo en la figura del hombre, él llamaba la atención en todos los lugares, eso no era nuevo para él y por eso se había vuelto un experto en ignorar ese tipo de cosas.

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