𝑪𝑨𝑴𝑷𝑨𝑴𝑬𝑵𝑻𝑶 𝒁𝑶𝑴𝑩𝑰𝑬 [𝐴𝑖𝑑𝑎𝑛 𝐺𝑎𝑙𝑙𝑎𝑔ℎ𝑒𝑟]

𝐄𝐢𝐠𝐡𝐭

/Narradora/

Los rayos del sol eran cada vez más fuertes, los jóvenes estaban sedientos y cansados, ya no faltaba mucho para llegar a las cabañas, mas tenían que ir con cuidado.

-¿Quieres que te cargue? - pregunta Aidan con una pequeña sonrisa en el rostro.

—No es necesario- respondió _____, tratando de no verse débil frente a él.
—Bien...- fue lo último que dijo el joven.

Mientras más caminaban más cerca se encontraban de llegar a su destino, cuando uno de ellos estaba apunto de decir algo, el sonido del claxon de un auto interrumpió.

-¡Cuidado! - mencionó Aidan lanzando a un lado a la joven.

El vehículo hiba con rapidez, y apenas se pudo ver como la mano ensangrentada de alguien toca parte del auto desde adentro.

-¿Qué fue eso? - pregunta _____ tocando su cabeza con una mano.

-Dios, no- decía Aidan con poca voz viendo a la chica que le gusta.

-¿Pasa algo? - respondió _____ entre cerrando los ojos y tocando su rostro.

-No lo toques-

Lo que sucedió fue que ____ al momento de caer y por culpa de sus flechas que cargaba junto con su arto se había hecho un corte en la mejilla.

-Está saliendo demaciada sangre - dijo _____ un tanto alterada-¿Crees que los zombies huelen la sangre? - eso si suena que estaba desesperada.

-No, claro que no, mira sigo vivo - dijo Aidan mostrando su mano aún herida.

/AIDAN/

No sabía que hacer ahora, ella en cualquier momento comenzaría a llorar por lo asustada que está, tomé parte de lo que tenía puesto e hice un pequeño corte con mis manos en forma de cinturón, mi camiseta se había sacrificado pero valía la pena.

-Limpiaré un poco la sangre y quiero que pongas esta otra parte dando un poco de apretón y no salga más sangre - expliqué y ella asintió con la cabeza.

Se que suena extraño pero esto ayudará hasta llegar a la enfermería del campamento.

Limpié con cuidado la sangre, _____ hizo lo que le pedí, lo que haría se vería raro pero funcionará. Con el cinto grande amarré por alrededor de su cara, era un poco difícil pero lo logré, tapando un poco de sus labios, nervioso miré estos, ella se relame y solo continuo con venderlo.

-¿Estás cómoda? - pregunté y ella confirma con la cabeza.

Ya faltaba poco y solo tomé su mano para comenzar a correr, esta vez yo llevaba las cosas peligrosas.

Al momento de llegar pudimos ver el auto anterior como se había estrellado con un poste de luz y no había nadie dentro de el.

Debíamos tener mucho cuidado, no queremos llamar la atención, sin embargo, algo causó la nuestra.

Unos gritos se oían y eran provinientes de los juegos físicos, con cautela al llegar notamos a una chica arriba de estos y a su alrededor había muchos zombies.

_____ me quitó el arco y las flechas, decidida lanza una de estas, el primer zombie calló y eso alertó a los demás.

Admito que estoy muriendo de miedo, es momento de mostrar lo varonil que puedo ser.

Lo primero que ví fue un bate de béisbol, no pregunten de dónde apareció. La miré y ella a mí, quizás alguno podría morir.

-Te .... - dije, mas no completé la frase. —... Te protegeré- cambié las palabras.

_____ lanzaba sus flechas con cuidado y agilidad mientras se quedaba en un solo lugar, en cambio yo debía correr para golpearlos.

Con todo el temor que sentía, la lucha había acabado y la chica bajó del juego donde había estado.

-Muchas gracias, Aidan - me habló mientras me abrazaba muy fuerte.

/________/

¿Es normal sentir algo en el pecho al ver tan ridícula escena?

No podía hablar así que solo me dispuse a caminar por mi cuenta hasta que Aidan se de cuenta que ya no estoy.

-________- No pasó mucho para escucharlo gritar mi nombre.

Voltee la mirada, Aidan corría irritado de la chica, no entiendo por qué rechaza a tantas mujeres bonitas...

Le resté un poco de importancia su llamado y seguí caminando, no pasó mucho hasta llegar al lugar donde encontramos el auto.

-No me dejes- dice Aidan tomando mi mano.

Levanté los hombres, y comencé a mirar en el interior del vehículo, habían marcas de sangre por las lunas y asientos.

-AGH- escuché un quejido al costado mío, supuse qué era la rubia que salvamos hace rato.

Seguía escuchando los mismos sonidos y esta vez se escuchaban diferentes, irritada miré a mi costado y Aidan estaba luchando para que un zombie no lo coma, la sangre que ese lunático tenía caían por el lindo rostro de Aidan, razón por la que no pidió ayuda o sangre se metería a la boca.

Estaba por tirar una flecha pero ya no me quedaba ninguna, llena de valor tomé el bate que tenía Aidan y golpee al zombie hasta que cayera.

Viendo al zombie en el piso, ayude a Aidan a ponerse de pie, le sonreí débilmente viendo su rostro manchado con sangre negra...

La chica rubia estaba apunto de hablar, pero el zombie del suelo por desgracia la muerde.

Quedé en shock por un momento, quiero decir; salvé a esa chica arriesgando mi vida y ahora ella es una de esas cosas [?] No puede ser [!]

Por un segundo cerré los ojos, Aidan me abrazó cubriendo mi cuerpo con el de él, el sonido de un zumbido llamó mi atención, abrí los ojos, voltee y vi al hombre que mordió a la rubia muerto.

Reconocí la flecha, era de Millie, ella siempre marca sus flecha.

-¡________! Me preocupé mucho por ti nena- habló uniéndose al abrazo.

-¡Muerete! - habló Malia golpeando a la chica con una roca.

-¿Qué te pasó en la cara? - pregunta una de mis amigas.

-Lo que faltaba, le mordió un zombie - dijo uno de los chicos.

Solo pude mirarlo fijamente mostrando una expresión de seriedad y burlona.