O si, tal vez ya lo he recordado. Fue esa noche en verano mientras veía venir a las hermanas Berman hacia mi casa.
Yo estaba en el techo como todas las noches mirando las estrellas aunque en verdad no sabia nada de ellas, pero me gustaban mucho.
Porque así era yo, me gustaban las cosas sin ninguna razón coherente.
Vi a dos chicas caminando y riendo con mochilas que cargaban en sus espaldas.
Asi que baje para expiar detrás de mi puerta, escuchaba como mi hermana se presentaba con ambas y decidí salir para matar mi curiosidad.
-¡Ahi estás!. Te presento a Ziggy y Cindy- dijo mi hermana mayor
Aunque solo nos llevamos un año de diferencia se creía la dueña de mi vida o eso empezó a ocurrir desde que mi madre decidió dejarnos a mis hermanos y a mí, empezó una nueva vida y desde ahí no he sabido nada de ella.
-¡____!. ¿Pasa algo?- hablo Denna sacandome de mi trance
-No, lo siento. Soy ______ Johnson- le estreche la mano a la pelirroja que tuve en frente, aunque ambas lo eran
Dos pelirrojas que me miraron con confusión absoluta, pero la que tuve en frente soltó una risa y ahí fue donde escuché su voz por primera vez.
-Soy Ziggy Berman- dijo correspondiendo mi saludo y alzando su cabeza para observar sus ojos azules y extrañamente adictivos que tenía
-Y supongo que yo soy la que queda. Cindy Berman, por cierto- la otra pasó de largo conmigo, fue directo a la habitación de invitados que teníamos y solo pude mirar su espalda y su pelo atado con una liga amarilla
-¿Te hace falta decirnos algo?- pregunto cuando llegamos las tres a la habitación
-No, lo siento debí irme hace más de 5 minutos- sentí como esto se había vuelto un momento incómodo para mi
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No sabía si irme, huir de ahí y escapar al techo nuevamente o quedarme a dar un intento de ser social y caerle bien a Cindy.
-No la molestes Cindy- hablo Ziggy saliendo unos segundos de la habitación
-No sabía de la existencia de una tercera hermana- la pelirroja acorraló mi cuello con su brazo, haciendo que me vea muy pequeña al lado de ella
-Soy la hermana que nadie conoce- había movido mis hombros resignandome falsamente
-Y la más bonita- sentí como su mirada bajaba y la posaba en mis labios sonriendo como si estaba utilizando el mismo truco de siempre
-Ya los encontré- hablo Ziggy entrando a la habitación haciendo que Cindy me suelte inmediatamente -¿Interrumpí algo?- preguntó
-Nada que no hayas hecho antes- salió de la habitación con su maleta haciendo que volviera a mirar esa estupida liga amarilla
-Lo siento- susurro rodeando los ojos
-Espero que te sientas como en casa aquí- me pose en la pared para hablar mejor con Ziggy
-Yo espero que no. La verdad lo primero que pensé al venir aquí es olvidarme completamente de casa- termino de ordenar sus cosas y me miro con una sonrisa sin dientes, más como para decirme sutilmente que me vaya
-Lo siento, soy mala en esto-
-Ya lo note-
Regrese a mi habitación sintiéndome un poco mal por haberlo estropeado con Ziggy.
Al entrar vi a Cindy ordenando sus cosas y pase de largo hasta la parte de abajo donde teníamos otra habitación.
Pero esa estaba muy desordenada como para que Cindy durmiera ahí hoy.
-¿No dormirás conmigo?- preguntó volteando su mirada hasta donde estaba
-Lo haré abajo- agarre una almohada de mi antes habitación
-Niña estas loca, solo te dará muchas alergias- estaba riendo mientras ordenada su ropa
-Correre el riesgo-
-¿Te di mucho miedo al mirar tus labios?- se acercó a mi a una distancia prudente mientras tenía los brazos cruzados
-Sabes podría denunciarte-
-Nos llevamos un año-
-Esta bien puede qu...- me detuve al verla más cerca de mi esta vez
-¿Tienes miedo a que mire tus labios?- puso su mirada nuevamente en mí, note como jugaba con su lengua y me miraba suavemente de arriba a abajo en cuestión de segundos
-No llevas ni una noche y ya estás jugando conmigo- bajé y cerré la puerta
Aunque estornudaba cada cinco segundos, esto era mejor que Cindy.
