la verdad de mi sangre (BNHA X CASTLEVANIA)

como entrenar a un cazador/ pt2.

UA, Dormitorios 2.A, 4: am:

El silencio de la madrugada, un retazo de paz y calma antes de el despertar de los hombres, las almas reflexivas han encontrado en ella un refugio serenidad y autodescubrimiento, pero las almas decididas solo encuentran una cosa: fuerza.
Suaves golpes resonaron en la puerta de la habitación, despertando a sus ocupantes.
-¿kero?...-susurró una ranita somnolienta, solo para ver una sombra moverse en su cuarto.
-tranquila tsuyu... vienen por mi.-dijo un cenizo mientras se colocaba sus zapatillas.
-pero... es muy temprano baku-chan.-dijo la chica viendo la hora en su celular.
-si quiero salvar a satsuki-chan tengo que romper mis limites.-susurró el muchacho para si mismo.-puedes seguir durmiendo, yo tengo que entrenar.
-buenas noches baku-chan...-dijo la peliverde antes de volver a dormir.
La joven tenia un mechón de su cabello sobre su cara, el cual el cenizo colocó detrás de la oreja de la muchacha.
-...soy un cobarde...-susurro el joven.- estas tan cerca de mi... y no puedo decirte lo que siento... no puedo decirte como has alegrado mi vida, como tu risa adorna cada momento... como cada una de tus miradas me quema con fuerza el pecho.-dijo mientras colocaba su mano en la mejilla de la joven.-no tengo el valor de decir...q-que me enamoré de ti...-dijo mientras acercaba su rostro lentamente al de ella.-...perdóname... p-por ser tan c-cobarde...-susurró acercando su rostro mas y mas.
Pero antes de consumar el beso, se escucharon nuevamente los golpes en la puerta.
-...-el joven solo se alejó mientras tenia una ligera sonrisa.-te lo prometo: salvaré a tu hermana y dejaré de ser un cobarde... s-solo espérame...-dijo mientras se ponía en pie y salia del cuarto.
-...baku-chan...

Fuera del cuarto:

El joven cenizo estaba cara a cara con el peliblanco cazador.
-¿listo?-pregunto solomon con una sonrisa.
-no.-dijo bakugo serio.- iré a mi cuarto por mi espada.
-deja eso, no la necesitas aun.-dijo el joven.- primero será entrenamiento físico, luego estudio de bestias y por ultimo entrenamiento con armas; no necesitas tu espada ahora.
-...¿no seria mejor hacer el entrenamiento fisico y el de armas juntos?-preguntó el joven.
-no.-contestó solomon.-mientras estudian las bestias, sus musculos descansan para el entrenamiento con armas; entre otros beneficios.
-...okey... no lo discutiré.- se limitó a decir el chico.
-tenemos solo cinco dias para entrenar.-dijo solomon con un rostro serio.- dos dias para prepararlos y los otros para entrenar sus maniobras y tacticas.
en eso una puerta se abrio dejando ver a shanoa junto con tokoyami. el chico vestía unas zapatillas deportivas y un pantalon, al igual que la invocadora, solo que ella tenia unas vendas que sostenian sus pechos a modo de brasier.
-buen dia kacchan.-dijo la pelinegra mientras inclinaba levemente su cabeza como saludo.
-¡shanoa-nee, c-cubrete un poco!-dijo el cenizo bastante sonrojado.
-...no le dijiste.-dijo la cazadora mientras cruzaba los brazos.
-le iba a decir, pero no me dio tiempo.-dijo solomon mientras volteaba a ver al aprendiz.- es nuestra costumbre entrenar con poca ropa; eso ayuda a tu cuerpo a resistir el clima, entrena tu mente, en fin: lo necesario.
-...- el chico no lo penso y se quito su playera para luego tirarla en el piso.-...¿y tu no vas a entrenar?-dijo notando que el peliblanco aun traia su camisa y abrigo.
-lo lamento, pero solo puedo entrenar con izuku.- dijo el peliblanco.- si me llego a descontrolar es el unico que puede frenarme... sin contar a mi padre.
-tiene mucho sentido.- dijo tokoyami sosteniendo su talisman en su mano.
en eso todos escuchaban como una chica gritaba.
-¡te dije que no, maldita sea!- se escuchó con fuerza.-¡no voy a ponerme esa mierda!
cuando todos fueron a ver pudieron apreciar a la pelivioleta peleando con el rubio cazador quien ya tenia el torso descubierto.
-niña testaruda, ¡ya te dije que es parte de nuestras costumbres!..-dijo el rubio mientras le tendia unas vendas.
-¡¿y quieres que me lo crea?! ¡seria mas creible si me lo dijera izuku!-dijo la pelivioleta sin tomar las vendas.
-...¿esto cuenta como fallar?-dijo bakugo con una sonrisa retorcida.
La pelivioleta volteo a ver solo para notar al resto de cazadores vestidos igual que el rubio a excepción del peliblanco.
-...-la chica no sabia que decir.
-¿ahora si me crees?-dijo jonathan ofreciéndole las vendas.
-...p-pensé que solo querías verme...-dijo tomando las venda y con la cara roja.
-no te confundas, aunque seas hermosa solo tengo ojos para charlotte.-dijo de forma relajada para luego ver a shanoa.- las chicas se están alistando en el cuarto de bakugo. No deberían tardar.
-bien, jiro; ve al cuarto de bakugo y pídele a las chicas que te ayuden.-dijo shanoa tranquila.- las esperaremos en la sala comun.
-...malditas escaleras.-dijo la chica al notar que tendria que subir al quinto piso.