la dedicación de un maestro

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Unas horas despues:

En un hotel estaba una rubia vestida casualmente tendida sobre la cama totalmente desanimada.
-...ahhh...-suspiro la chica con pesadez.
-¿aburrida ryuko?-preguntó una castaña saliendo de la ducha.
-mucho.-dijo la rubia sin interés.- no tengo nada que hacer y no puedo pasear por nuestra base porque esta destruida.
-¿es solo por eso o es porque no podrás ir a tu cita?-dijo una peliverde hiperactiva.
al escuchar eso la rubia se sonrojó de sobremanera mientras recordaba una conversación.

Flashback, academia UA:

estaba la rubia caminando por los pasillos de la academia sumergida en sus pensamientos.
-"¿debería ir con un vestido o con un pantalón ajustado?"-pensaba la chica de forma juguetona.-"el vestido esta bien, pero un pantalón lo pondría nervioso... si... usaré el pantalón".-pensó con malicia.
En eso la chica noto que alguien se le acercaba: un peliverde de gabardina roja.
-¡ha! ¡izuku!-saludó la chica para luego notar el rostro serio del pecoso.- ¿paso algo?
-hola pixie.-dijo izuku con una pequeña sonrisa.-si; surgió una misión muy importante... perdon, pero tendré que cancelar nuestra cena.
-¡¿que?!-dijo pixie-bob sorprendida.-¡¿por que?!
-es una misión de vital importancia.-explicó el cazador serio.-hay muchas vidas en juego y necesito estar centrado.-dijo viéndola a los ojos.-no estoy diciendo que no saldré contigo... es solo... que no puedo ahora.
-si me ibas a decepcionar, mejor no me hubieras invitado.- dijo la chica cruzándose de brazos y dándole la espalda al chico.
-a mi tampoco me agrada romper lo nuestro, pero es necesario.-dijo el joven tomándola de los hombros.-te prometo que te lo compensaré con creces.
Al escuchar eso la rubia no pudo evitar sonrojarse.
-"sonó como si fuera mi pareja".-pensó la chica con una sonrisa tierna.- y... ¿y como lo haras?
-te llevare al lugar mas hermoso que veras en tu vida.-dijo izuku con una sonrisa.
-¿s-si?... ¿a donde?
-a mi hogar.-dijo el pecoso mientras tomaba una de las manos de la heroina.-la aldea secreta de monte hermoso.
-¿acaso quieres secuestrarme gatito?- dijo la chica de forma juguetona para luego sonrojarse.- ¿me llevaras a tu casa?
-no le veo lo malo.-dijo con una sonrisa inocente.- y si quieres podemos pasar el fin de semana juntos.
-lo... ¿lo dices en serio?-dijo la rubia con un tierno sonrojo.-¿no me estas mintiendo?
-no necesito mentir.-dijo el pecoso con una de sus manos en la mejilla de la rubia.-hasta podría cocinar para ti.
-¿me lo prometes?
-por supuesto, gatita.-dijo con una sonrisa.-hasta entonces espérame.-dijo mientras se alejaba.

Fin flashback:

Al recordar el tacto de la mano del pecoso, ryuko se avergonzó tanto que su cara se puso roja como un tomate.
-tomoko... t-tonta.-dijo la chica con un puchero.
-era por eso ¿verdad? ¿Tan desesperada estas para salir con un menor?-dijo la castaña divertida mientras se secaba el cabello.
-e-el quiso salir conmigo shino.- dijo la rubia bastante nerviosa.-dijo que era para disculparse...s-solo eso.
-con lo de la cena te creo; pero el fin de semana juntos... parece una escapada de amantes.-dijo tomoko de forma juguetona.- se que el chico es muy bueno, pero ya no es un héroe.- dijo de forma seria.-recuerda que confeso frente a todos que no dudaría un segundo en matar y párese que no tiene resentimiento.
-no es lo mismo pelear contra villanos que contra demonios, rangdoll.-dijo la rubia serena.- anoche vimos un infierno a punto de devorarnos... tal vez su destino no era ser un héroe... tal ves Dios lo esta preparando para algo mas grande... solo espero que a pesar de todo no pierda su sonrisa.-dijo con un leve sonrojo.
-...no merecía lo que le paso.-dijo mandalay triste.
En eso las chicas escucharon un golpe seco; mas concretamente en la habitación de un niño.
-¿que estará haciendo kota?-susurró la castaña mientras se ponía una bata y se acercaba al cuarto. Al abrir la puerta, las tres mujeres pudieron ver al niño de pie, sollozando mientras las lagrimas caían por sus ojos al tiempo que miraba enojado una botella llena de agua; en su mano derecha tenia sujeto un cinturón de cuero y se podían apreciar marcas rojas en sus brazos y piernas.
-maldita sea.-dijo el niño tratando de dar un golpe a la botella con el cinturón, pero golpeando su espalda con este.-¡Mmm!... ahh... ahh...-se contuvo el chico soportando el dolor del golpe y tratando de no llorar.
-kota ¿que estas haciendo?-dijo mandalay entrando a la habitación.
-pra... practicando...-dijo el niño dando otro golpe fallando y golpeándose su pierna derecha.-¡ay ay ay!-se quejo mientras sujetaba su pierna.
-¡dame eso ahora!-dijo la castaña quitandole el cinturón.- estas lleno de moratones ¡¿en que rayos pensabas?!
-es que... q-quería hacer los ataques que hizo izuku anoche.-dijo el niño aun sobando su pierna.-me gusto su forma de pelear.
Al oír eso, las chicas no pudieron evitar ver al niño enternecidas.
-voy a dominar el combate con latigo sea como sea.-dijo el niño desidido.-no me rendire.
En eso la rubia tubo una idea.
-kota-kun...-llamo ryuko con una sonrisa.-¿quieres que izuku te enseñe?
Al escuchar eso tanto el niño como las mujeres estaban bastante sorprendidos.
-...¿ahora con que pendeja pendejada me vas a salir?- dijo la castaña con los brazos cruzados.
-nada solo que, como iré a monte hermoso con izuku pensé en llevar a kota-kun conmigo.-dijo la rubia sonriendo.- si pasamos un par de días con el podrías pedirle que te enseñe.-dijo mirando al muchacho.
-pero ¿no querías estar con el? Me refiero ¿con el a solas?- dijo tomoko ladeando su cabeza.- ya sabes; una fuga romántica.
-no es mala idea; pero también seria bueno para kota que me acompañe.-dijo con una expresión tranquila.- podría distraerse y olvidar lo de anoche.-dijo para ver el rostro dudoso del niño.-además, es muy posible que su hija este con el.
Eso basto para que el pelinegro se pusiera a saltar con una sonrisa.
-¡¿puedo ir tía?! ¡¿puedo, puedo, puedo?!-dijo el niño tirando a su tía de la manga.
-no lo se.-dijo la heroina dudosa.-...¿y si los atacan haya?
-por favor: vamos a una aldea llena de cazadores; no hay lugar en el mundo mas seguro.-dijo pixie-bob con una sonrisa divertida.- tienen las mejores armas y medicinas. Si no me crees mira tu espalda.
En eso la castaña recordó que se había revisado en la ducha notando cuatro marcas apenas visibles en su espalda.
-yo...
-solo di que si y ya.-dijo rangdoll divertida.
-... esta bien.-dijo la castaña con una sonrisa.-te dejare ir kota.
-¡siii!-gritó el niño dando saltitos.
-pero con una condición.-dijo mandalay con el rostro serio.
-¿cual tia?-dijo el niño.
-portarse bien durante toda la semana y nada de usar cinturones como látigo ¿entendido?
-¡hai!-dijo kota parándose recto y en pose militar.
Al ver el gesto del infante las tres heroínas solo pudieron sonreir.
-"izuku... ¿que estarás haciendo?".-pensó la rubia con una sonrisa.

la verdad de mi sangre (BNHA X CASTLEVANIA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora