IV

407 50 80
                                    

2005

Defne y Bahar estaban en aquella cabaña que había sido testigo del gran amor que se tenían.

—Creo que esta será nuestra casa algún día, cuando no tengamos que trabajar más por que tendremos suficiente dinero y viviremos aquí hasta que nos hagamos viejas testarudas y locas— dijo Defne con una sonrisa.

Bahar rio ante su comentario —Por supuesto, así no nos molestaran los vecinos y podremos gritarnos cada que nos plazca sin que alguien nos moleste e interrumpa nuestras peleas— dijo con tranquilidad.

Defne sonrió —¿Alguna vez te planteaste tener hijos? — pregunto con tranquilidad.

Bahar la miro —Quizás, pero no es algo que desee demasiado y tu ¿quieres tenerlos? — pregunto con tranquilidad.

Defne la miro con una sonrisa —Solía soñar que tendría una hermosa princesa con mis ojos y con el color del cabello del amor de mi vida— dijo con una sonrisa.

—Bueno, evidentemente no puedo embarazarte, pero existen algunas opciones— dijo con una sonrisa.

Defne comenzó a reír —No es necesario, no tienes que cumplir mis caprichos, con estar a mi lado será suficiente— dijo con una sonrisa.

Bahar la miro con una sonrisa —No tengo que cumplirlos, quiero cumplirlos, que te quede claro que de ahora en adelante lo que tú quieras es lo que yo quiero— dijo con una sonrisa y se acercó a ella para besarla mientras delicadamente desabrochaba su suéter.

Dejaron de besarse por un momento y Defne la miro con una sonrisa —Entonces si yo quisiera que fueses tu quien diera a luz ¿lo aceptarías? — dijo en tono de reto.

Bahar la miro seria —Por qué no, quizás entonces en lugar de una tendríamos dos, una tuya y una mía— dijo con una sonrisa y continúo besándola y haciendo desaparecer su ropa.

•⊱✦⊰•

Había pasado un mes, no se veían mucho pues ambas tenían exámenes y trabajos que entregar, pero se llamaban por teléfono para recordarse lo mucho que se amaban.

La última vez que se habían visto fue en aquel jardín que les recordaba el inicio de su relación y se dieron un beso largo antes de volver a casa.

Sin embargo, no todo seria miel sobre hojuelas...

•⊱✦⊰•

Defne llego a casa y tomo su teléfono inmediatamente, marco el número de Bahar y esta contesto casi al instante —Hola cariño, ¿Estas ocupada? — pregunto Defne con una sonrisa.

Del otro lado se escuchó la voz de Bahar —Justo ahora no, pero en una hora tengo examen— dijo con seriedad.

—Entonces te dejo, te hablare más tarde— dijo con tranquilidad.

—No, tenemos un poco de tiempo, dime para que hablabas— dijo con tranquilidad.

—Solo quería escuchar tu voz, lo sé es tonto, pero algo me decía que necesitaba escucharte— dijo con una sonrisa.

Bahar sonrió y miro a sus compañeros que le hacían burla —Bien, la verdad a mí también me encanta oír tu voz, quizás pronto volvamos a poder vernos, ya casi terminamos, pronto entrare a trabajar y poder ayudarte con tus proyectos durante tu último año y después de eso quizás nos adelantemos y nos casemos— dijo con tranquilidad.

—Eso sería maravilloso— contesto un poco cabizbaja.

—Defne, te sucede algo, no te estoy viendo, pero puedo notar que en tu voz hay algo— dijo con tranquilidad.

En otra vidaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora