Chapitre deux

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Narra Kit

- Ojo, Maxwell es bonita. — Soltó mi mejor amigo William y su novia le dió toda la razón.

- Tampoco hay que mentir para ganar puntos con tu novia. — Digo soltando una risa.

- Mi novio no miente. — Explica Yaz con una mirada asesina. — T/n es bien bonita por eso tiene a todos los herederos detrás de ella.

No me iba a gastar en contradecirla porque era cierto. Maxwell y yo éramos los que más pretendientes teníamos, aunque ella me ganaba por bastante. La cantidad de rosas que recibe en los eventos de San Valentín o primavera lo dicen todo. Sin contar los chicos que quieren bailar o simplemente charlar con ella en los bailes y eventos.

- Zurzolo los está espantando a todos. — Tristan se acercó con su nueva novia, Summer. Él meses atrás había intentado nuevamente conquistar a T/n pero como siempre fue rechazado, como casi todos los otros pretendientes. — Hace dos meses me dijo que no me acercara más a ella, inútil, no es de su propiedad.

Yaz lo miro muy preocupada y es que la reputación no ayudaba; existía el rumor de que Lorenzo Zurzolo era un celoso e impulsivo, y que no estaba con T/n porque la quería, si no por pura apariencia e interés. Yaz estaba al tanto de todos los rumores y me había enterado por parte de William que su novia le había advertido a Maxwell sobre ellos sin embargo T/n es una terca de mierda y solo hizo caso omiso a las palabras de su mejor amiga.

- Estoy un poco preocupado por la relación que llevan esos dos. — Admite Cormac.

Y es que por si no se han dado cuenta, mis amigos son sus amigos desde que Yasmín y Gao empezaron a salir, lo cual, solo fue una molestia para mí. No solo la tenía que ver en el colegio y en los eventos, ahora la tenía que ver todo el tiempo.

- Lo sé, tratamos de hablarlo con ella. — El ruido de mi silla al levantarme no lo dejo terminar.

- Sinceramente me encantaría pasar más tiempo con ustedes pero hablar de Maxwell me da náuseas, así que yo me voy a buscar a mi linda novia antes de que me llenen la cabeza de estupideces que no importan. — Interrumpí de manera grosera.

Camine por los pasillos de manera alegre, en busca de mi preciosa novia, Agnes. Una bella muchacha de ojos esmeralda y piel trigueña.

- Buenos días mi amor. — Dije de manera alegre.

- Buenos días mi precioso Kit Kat. — Mis ojos brillaban de amor al verla pero rápidamente cambiaron al ver con quién estaba sentada. — Le pedí a T/n si podía ser mi tutora, ¿No te molesta, verdad?.

La mire y pretendí que no me importaba, mi novia había preferido que Maxwell sea su tutora en vez de pedirme ayuda a mí.

- Hiciste bien Agnes, soy la mejor en la clase. — Dijo con soberbia, me pondría a discutir con ella pero afortunadamente no estábamos en las mismas clases siempre.

- Yo te podría ayudar con esto bebé. — Escuché una risa silenciosa pero simplemente no hice caso. — Sabes que siempre te voy a ayudar bebé.

- Lo sé mi Kit Kat. — Escuché otra carcajada ahogada proveniente del mal tercio. — Pero siempre que me tratas de ayudar me pedís muchos mimos a cambio y así no me puedo concentrar mi amor.

Observé a T/n la cual se estaba controlando para no dejar salir la carcajada más ruidosa en años. Sin embargo nunca la dejo salir, prefirió reír en silencio y no interrumpir.

T/n le dijo los horarios de su tutoría y con quién iba a compartir esa hora, ya que Maxwell es muy solicitada como tutora.

- Bien, muchas gracias linda. — Nos íbamos a ir pero Agnes dijo que necesitaba usar el baño. Por ende me quedé solo con sus cosas en compañía de T/n, la cual estaba guardando sus pertenencias de manera tranquila.

El club de debate; Kit Connor. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora