Chapitre neuf

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- No vas a usar eso en vacaciones ni nos vamos a dividir — Yaz se mostró molesta por las reglas que habían puesto mis padres para estas vacaciones. — no estás en la cárcel, estás en Italia con tus amigos.

- Y con el cara de perro y su novia. — Contesté molesta.

Debido a la elección que tomamos esa noche, nuestro viaje era distinto. El viaje de pocos amigos, se desvirtuó.
La madre de Kit, invito a Agnes y cómo para fastidiarme Drew también estaba invitado. (Al cual había ignorado por completo por una semana).

- Pensalo así, la foto todavía no salió a la luz y ahora vas a poder estar cerca del universitario y lejos de Kit. — Nos sonreímos con Yaz. Drew era un paquete bien completo y muy atractivo.

Sin embargo la idea de que tener que pasar vacaciones con Kit y su novia, me causan náuseas.

- Gracias por venir a buscarme, no quería compartir auto con nadie y Drew llega mañana.

- Obvio que te iba a venir a buscar, sé que no te gusta compartir nada. — la mire con una cara ofendida y ella solo río

- Si sé compartir. — Yaz se parte de la risa, ofendiendo mi ego un poco.

Al llegar, los lujos del hotel delataban la elite que se hospedaba en el. El lugar era muy poco tradicional y muy... estadounidense. El plan original era una casa tradicional alejada de las personas.

- Llegamos, y los paparazzi también — acomode mi cabello y mi ropa queriendo mostrarme impecable.

Todos tenían que saber que estábamos con más gente, Yaz llegaba conmigo para mostrar que era un simple viaje amistoso.

Baje de la limosina, los flash llegaron a mi y los micrófonos se acercaban.
Estas semanas había generado una mala fama, como parte de la ingeniosa idea tenía que ser una especie de fiestera descontrolada, me tenían que ver con muchas personas y verme feliz con ello.

- ¿Algún día va a sentar cabeza con algún muchacho o va seguir con ese estilo de vida?

La pregunta fue grotesca y ruda. Mis ojos se abrieron excesivamente y mis labios formaron una sonrisa.

- La vida es muy corta y quiero poder experimentar — los periodistas hablaban uno sobre otros no dejándome comprender otras preguntas — la última vez que revise la diversión no era un delito, Yolanda.

Yolanda Haadi, una periodista insufrible e intensa, no solo era muy poco respetuosa con gente famosa sino que también es conocida por promover los trastornos alimenticios. En pocas palabras, nadie la quiere.

Nuestras habitaciones (suites) se encontraban todas en el mismo piso y yo al ser la única "'sola"" me habían dado la suite principal, por ende, yo estaba muy contenta.

- No puedo creer que ahora le den la suite principal a cualquiera. — Se escuchó la voz de Connor.

Me gustaría hacer enfasis en qué estaba muy feliz.

- No tendríamos que estar hablando. — Conteste sin mirarlo sacando las cosas de mis valijas, escuché como la puerta de mi habitación se cerró y mi cuerpo se paralizó ¿Que estaba haciendo Kit?.

- Lo sé, sin embargo hay algo que todavía me inquieta. — me voltee a verlo, a pesar de romper el trato que habíamos logrado mantenía su lejanía — ¿Quien se va a quedar con el club?

Oh por dios, mis labios soltaron todo el aire acumulado en mis pulmones. Ansiosa por cosas que no pasan.

- Es una pregunta muy tonta y obvia a esta altura. — Contesté continuando mi acción anterior.

El club de debate; Kit Connor. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora