La Junta del Cielo.

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—No me interesa luchar contigo, retírate. —Lan WangJi cerró los ojos dándole la espalda, no podría herir a una mujer.

No me des la espalda, ¡Lan WangJi! ¿¡Por que hiciste eso!?

—¿Por que te infiltraste en mi Reino y fingiste ser mi hermano? —la miró de reojo.

—Yo tenía que hacerlo para poder acercarme a tu aislado reino. Tenía una orden directa del Cielo, sabes lo que pasa si desobedezco tú fuiste parte de el...

—... —el silencio reinó por un momento. —Bien, quitaré el hechizo. —volteó y extendió el brazo. —Dámelo.

—Pero primero vamos arriba, este lugar me da escalofríos —subió las escaleras.

Una vez arriba Wei Ying no pudo evitar contemplar a Lan WangJi por primera vez con toda esta iluminación podía ver cada detalle de el... —Dios mío... Son los ojos más hermosos que vi en mi vida. —Estaba tan concentrado en verlo hasta que se percato que el otro lo miraba serio directamente a los ojos y esto era como un flecha helada atravesándolo.

—¿Tengo algo en la cara?

—¡No, no tienes nada! —volteó rápidamente. —¿¡Wei Ying como vas a mirar a un hombre de esa manera!? ¡Ahora eres una Diosa no olvides tu puesto!  —se reprendió para si mismo.

—Dámelo.

—Claro. —entregó a Suibian y notó como la espada temblaba levemente. —Estarás bien, no tengas miedo, Lan WangJi revertirá la técnica por si mismo.

Lan Zhan no estaba acostumbrado a intercambiar su longevidad como Wei Ying por la cantidad de Armas Humanizadas que hizo. Pero debía hacerlo para no meterse en problemas con todo el cielo. 

Revirtió la técnica pero esto le costó aproximadamente 5 mil años de vida, nada comparado con toda la vida que reparte Wei Ying en verdad.

Ahora Suibian volvió a tener un solo amo y ese era Wei Wuxian. —Gracias por cumplir, Lan Wangji, ahora me retiro pronto se pondrá la Luna y no deseo interrumpirte.

—Mn.

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Los días pasaron y al fin llegó el Dia de la Junta del Cielo...



Al pasar por la entrada del CIelo, las Diosas no tan reconocidas recientemente ascendidas miraban y murmuraban alrededor de Lan WangJi casi siempre cumplidos sobre su aspecto pero nadie se le acercaba por miedo, lo cual el Dios del Sol no le daba tanta importancia, solo debía asistir e irse cuando terminara.

Por el lado de Wei Wuxian era completamente distinto, los Dioses se le acercaban a darle presentes y cartas, algunos por interés y otros le entregaban cartas confesando sus sentimientos. El más atrevido le mandaba solicitud para casarse directamente...

Ya que justamente de eso trataba la Junta. Hablar del futuro de cada uno y mas de aquellos de mandatos importantes en la superficie.

Jiang Cheng esquivaba a todas las chicas con sus propuestas con su cara enojona. Aunque claro a sus admiradoras les gustaba esa cara.

En la Gran Junta del Cielo se reunían absolutamente todos los Dioses que servían al Cielo y a los ancianos, no era necesario ser Dios de algo específicamente, eran promovidos a Dioses por su capacidad de batalla y eficiencia. La única excepción aquí era Lan WangJi quien fue invitado a la fuerza.

Lan Qiren familiar directo de el Dios Lan WangJi quien tenía el mando de La Junta, ex sucesor del mandato de el Sol, se encontraba en un asiento gigante, el cual demostraba autoridad buscaba a su sobrino con la mirada.

En lo que iban llegando todos los invitados uno de los dioses se levantó de su asiento. —Antes de comenzar con el tema principal de la Junta, creo que el Gran Lan WangJi junto con Wei Wuxian nos deben una explicación, ¿No es así?

Los murmullos llenaron el lugar.

—Hace unos días presentí una feroz batalla que claramente venia de su inmenso poder.

—Es cierto, fue hace unos días antes de la junta.

—¿Los castigarán?

—Tienen un puesto tan importante... ¿Cómo se les ocurre?

—Lan WangJi es tan guapo... yo tomaría el castigo por el... —murmuró una joven Diosa.

Todos se callaron al escuchar el grito que decía ''¡Silencio!'' el cual vino de Lan Qiren, quien no aguantaba los murmullos sobre su sobrino en toda la sala. —Lan WangJi ya no pertenece al Cielo no puedo tomar medidas contra el. Sin embargo Wei Wuxian nos puede dar una explicación.

—Fue mi culpa, yo provoqué a Lan WangJi, luchamos y causamos demasiado escandalo. Aceptaré cualquier castigo. —Pronunció Wei Ying.

—Pensaré tu castigo, te lo diré al final de la Junta Wei Wuxian. 

...

—Por ahora vamos a comenzar el tema principal por el cual cada uno se encuentra reunido aquí, como saben ninguno de nosotros tiene una vida infinita aunque si bastante extensa. A excepción de nuestra Diosa de La Luna, ella es el tema mas delicado e importante aquí. Les pido que aquellos que tengan pareja se dirijan al Salón en donde se encuentra el Casamentero, así su relación se hace oficial ante sus fieles. —la mayoría se levantaron de sus asientos acompañados de sus parejas y se dirigieron hacia el Casamentero Nie Huaisang.

—Los demás se quedaran aquí para charlar este asunto.

La verdad aquí era que Qiren estaba impaciente por ver si la DIosa de la Luna había conseguido pareja, los ancianos ya no querían seleccionar más sucesores a través de competencias, debían de ser a través de líneas de sangre, así como la mayoría de Dioses principales. Estaban preocupados, no querían que volviera a suceder lo mismo que con Xue Yang, por suerte Wei Ying no hizo nada grave, solo fue una pelea con su sobrino... Su sobrino y Wei Ying no se levantaron de sus asientos... Esto podría llegar a ser interesante... Sin duda alguna. Se lo contó rápidamente a los demás ancianos quienes aceptaron sin pensarlo.

—¡Wei Wuxian! Tengo decidido tu castigo.

Fin del Capitulo 8.

Los Dioses del Sol y La Luna | WangXianDonde viven las historias. Descúbrelo ahora