Estoy enamorado de ti...

001

Bakugo fue alcanzado por una peculiaridad extraña, aparte de tomar todos los medios para enamorar a la persona secreta que le gusta; tiene por objetivo casarse y tener su familia con esa misma persona. ¿Cómo se lo tomará el chico de todos sus objetivos?

El mismo Katsuki se pregunta cómo va a hacerle para evitar ser descubierto, sin embargo los días pasan y sigue teniendo esa audacia que jamás había tenido en los temas que trataban o relacionaban a Todoroki Shoto. 

—Sal de mi cabeza. — pide sintiéndose tenso de solo pensar que en verdad ha visto al Todoroki como la única persona que le ha gustado. — Maldición, esto no me gusta. 

—Entonces, esa persona. — piensa Izuku al lado de Kirishima que parece divertirse con la situación. 

—Lo trae loco. — recuerda Eijiro. — Estudia aquí, es hermoso, casi inalcanzable. Solo porque Tetsu lo dijo, sino estaríamos perdidos de esta situación. 

—Juro que los voy a golpear en la clase de hoy, par de idiotas. — murmura el Alfa a aquellos dos, al menos Midoriya si se siente intimidado. — Shinsou tenía que hablar. 

—No es tan malo, tu primo quería ser bueno, aunque Monoma abrió la boca. — relaja el de cabellos verdes. — Se paciente Kachan, seguro está peculiaridad tiene solución.

—De hecho el término "objetivo" es algo propio, si no lo hubiese pensado antes como algo para hacer entonces no sería tomado tan literalmente. — Hitoshi recuerda vagamente mientras toma asiento. — Ya habías pensado en decirle en algún momento. 

—En verdad te odio, por tu culpa gran parte del alumnado sabe qué sucede. — susurra a su primo quien levanta los hombros sin importancia. — Olvídate de que vaya a encubrir tu cita. 

—¿Por favor? — pide con calma, sin embargo este se encuentra nervioso. 

—No. — responde sencillo para levantarse. — Es mejor que terminen de hablar de esto, ahora. 

Bakugo abandona la mesa para ir al pasillo y salir del comedor, ni siquiera tiene ganas de ir por algo picante, solo se resigna. Sin embargo, ver a cierto chico de doble peculiaridad hace que todo sea difícil para él.

—¿Estás bien Katsuki? — pregunta el menor mirando el rostro pensativo del otro. 

—Nadie te dio el permiso de decir mi nombre, helado de fresa. — decirlo ni siquiera sale con tanto fastidio u odio. 

—Parece no molestar, entonces lo seguiré diciendo. — el Todoroki argumenta dando una apenas perceptible sonrisa. — Katsuki, Ne-san envió comida picante pero soy pésimo para comerlo, ¿Quieres compartir? 

"Dile que no, aunque quieras podemos negarnos." Piensa, pero demonios que incluso su lobo interno estaba más interesado en pasar tiempo con el bonito chico que otra cosa. 

—Está bien si no quieres… — murmura por lo bajo el menor. — Lo lamento, debes estar pasando por un dilema. 

—Joder, esta bien. — acepta rápidamente tomando la muñeca de su contrario. — ¿Tienes algún lugar en mente?

—Monoma me dijo de un lugar, podríamos ir. — asiente el menor confundido, sin embargo no deja de seguir al otro. — Uhh…

Bakugo debe evitar avergonzarse, cuando Shoto hacia ese tipo de sonidos usualmente se veía demasiado bien para su gusto; cuando llegan al lugar se da cuenta que es donde usualmente la pareja de tontos suele venir a comer juntos. 

—Para que ella te mandara comida, creo que puso incluso palillos extras. — señala bastante confundido, mira a su menor quien duda un poco.  

—Soy muy torpe. — responde el de doble peculiaridad evitando un poco la mirada. 

—Demasiada comida. — señala de nuevo el rubio aceptando los palillos, su menor asiente. — ¿Estás mintiendo? 

—No. — niega rápidamente el otro con un rostro tranquilo. — Aunque…

—Solo habla. — Katsuki bufa para tomar algo de la comida sin descuidar su interacción con su compañero casi perfecto. 

—Estoy preocupado por ti. — suspira al fin el menor. — Por lo que pasó la última vez por descuido de Hawks. 

—No tienes que estar preocupado. — recuerda el mayor. — Tenemos 18 años, es normal que este tipo de sucesos pasen. 

—17… 

—Lo que sea. — Bakugo debe evitar molestarse, estaban a mediados de noviembre, el otro cumpliría años después de todo. — ¿Qué te preocupa exactamente? 

—Está semana te he visto pensativo, más de lo normal. — responde apenado, prefiere evitar la mirada y comenzar a comer, su rostro tranquilo. — Como si esa persona en verdad te importara más de lo que creías. 

—Que importa. — dice tomando un poco más de comida, el sabor es un poco más picante de lo que recuerda, no comenta nada porque aunque la técnica es aún insuficiente le parece bueno. — No es como si fuese a hacer algo al respecto. 

—Bueno. — Shoto dice pensativo. — Eso significa que tienes miedo a ser rechazado o que definitivamente tienes miedo a intentarlo. 

—¿Demasiado cobarde de mi parte? — Katsuki filtra un poco de diversión en las palabras. 

—Creo que cualquier objetivo que determines lo conseguirás. — Todoroki explica al fin subiendo su mirada a su compañero. — Ese omega debe ser bastante importante para ti. 

Bakugo se toma esas palabras no como desafío, sino como un permiso; después de todo la sonrisa que ve después determina que al menos debe intentarlo y no solo crear una idea con la cual no se encuentra satisfecho. 

—Supongo, nunca dudes de mi determinación, tome una decisión desde hace un rato. — levanta los hombros para negar. — El picante es más que perfecto, pero la técnica le falló un poco.

Shoto debe tomar esas notas, aunque le duela el corazón por escucharlo afirmar que va a ir tras aquella persona; nunca ha comprendido que se supone que es Bakugo para él o que etiqueta llevan. 

No eran amigos, tampoco conocidos; después de todo estar juntos en primaria y conocer que parte de la familia se hace una es una completa obra del destino. Al menos eso piensa Shoto, pero pareciera que el destino no está de su lado.