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La intensidad de sus encuentros era tal, que ambos habían entrado en celo

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La intensidad de sus encuentros era tal, que ambos habían entrado en celo. Los de ojos rojos y dorados no dejaban de mirarse con ferocidad mientras sus caderas danzaban rítmicamente en su encuentro la una con la otra. Ambos habian perdido la noción del tiempo porque todo lo que existía era la existencia misma del otro.

El cabello y la piel de ambos estaban bañados en sudor. Seokjin acomodo el cabello de Taehyung para ver mejor sus facciones y sonrío ante lo cálido y mojado que estaba.

— Dámelo todo Jin.

Seokjin apretó su mandíbula sintiendo su carga crecer.

— ¿lo quieres todo bebé?

— ¡Si dámelo! ¡Dámelo! — suplico. Seokjin sonrío ante la imagen tan excitante y beso sus labios. Luego los mordío estirándolos un poco hacia sí para chuparlos una vez más.

— ¿tendrás mis cachorros? Eso es lo que quieres ¿no?

— Si amor. Dame muchos cachorros. Muchos cachorritos. Míos y tuyos.

— ¿ah sí? — siguió empujando fuerte, rápido y firme.

— Si. Si. Si. Si. ¡Por favor! ¡Por favor! Por favor Jin.

— Tómalo todo bebé. Tómalo todo de mi — dijo empujando fuerte y gruñendo en el proceso — te llenare tanto con mi cálida semilla que estará dentro de ti por semanas. Te llenare de mis cachorros.

— Nuestros cachorritos. Lléname de ellos por favor Jin. Uhmmmmmm — gimió sintiendo sus paredes contraerse en deleite — tan bueno. Eres tan bueno. — exclamo con su interior en llamas. Su orgasmo comenzó a construirse apretando la polla de su alfa en su interior. Lo que llevo a Seokjin a gruñir y derramarse en el interior de Taehyung con continuas y feroces embestidas.

— Tan bueno, tan bueno para mi bebé. Tan dulce. Jodeerrrrrrrrrrr...me ordeñas tan bien. Jodeeeeer bebé, si hubiera sabido de ti y de lo bueno que eres para mí, nunca; pero nunca hubiera tocado a nadie más.

Taehyung sonrió sintiendo aun los espasmos de su recién orgasmo. Se sentía pleno sintiendo la cálida semilla de Seokjin bañando su interior. Cerró sus ojos tratando de recuperar el aliento. Todo lo que sintió fue los besos tiernos de Seokjin sobre su rostro. Al abrirlos se percató que Seokjin continuaba con sus ojos rojos y se preguntó si él también estaba en su forma primitiva. Acarició el rostro de Seokjin para hacer que le viera.

— Aun en tu forma primitiva logras llegar a esa conclusión — sonrió continuando con sus caricias.

— Nuestro lado salvaje está a flote, pero nuestras conciencias siguen intactas.

— ¿mis ojos también... — antes de que terminara la pregunta Seokjin asintió y beso la punta de su nariz.

— Eres el omega más hermoso que jamás haya visto.

Your Eyes Tell - JintaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora